El sol en lo alto estaba iluminando una gran llanura y dejaba a la vista un increíble paisaje.
Lo principal que destacaba era el inmenso árbol que cada vez aumentaba de tamaño cuanto más se acercaban y ahora podían ver ese inmenso árbol cada vez más cerca.
Aurora seguía creyendo que media varios kilómetros de alto y cada vez que se acercaba no podía ocultar su seriedad.
La razón era que se podía sentir la presencia de la naturaleza… Era una forma rara de decirlo, pero la vitalidad en esta área era alta y las plantas florecían con mayor fuerza.
Solo se necesitaba mirar los árboles de más de diez metros que creaban el inmenso bosque que parecía rodear al gigantesco árbol.
Algunos de esos árboles no eran tan 'alienígenas' a diferencia de otras plantas que había visto y eran árboles con gruesas ramas y hojas doradas.
Muy similar al árbol gigantesco que estaba más allá y en ese bosque había una sola extrañeza que destacaba a distancia.
"Alice siempre destaca." Murmuró la Sumo Sacerdotisa Xaali sin ocultar su sonrisa.
Su grupo había estado volando en formación de combate con la Sumo Sacerdotisa Xaali en medio junto a Abdellah y Alba detrás, mientras ella dirigía el camino, con Amnestria posiblemente oculta en su sombra.
En medio de ese bosque dorado se encontraba un solo gigantesco árbol de más de veinte metros que era visible a simple vista desde la lejanía.
La forma que buscaba imitar al árbol gigante era notable y la expresión de Aurora se relajó un poco.
Su hermana le había informado de su ascenso de rango y ella parecía querer soltarse cada vez más y esta era su forma de hacerlo.
De mostrar con sus habilidades una mayor capacidad y un control mayor de lo que el supuesto 'Dominio de Oscuridad' era capaz de hacer.
También de cierta forma dejaba ver su indiferencia y su calma al lugar en el que se encontraba y era bastante agradable, tener alguien que mostrara tanta confianza.
"Me alegro de que la hayamos encontrado." Murmuró Aurora mientras le daba una señal para moverse.
La Sumo Sacerdotisa Xaali los había guiado a través de su 'Señor' identificando la posición del grupo de Alice y Minerva había enviado los drones, para confirmar la posición.
Ahora tras viajar durante gran parte de lo que para ella era la mañana pudo encontrar a su grupo y volver a unir la expedición.
El viaje hubiera sido más fácil si la Cardenal Najjar estuviera presente, pero ya no era momento de molestarse por ese hecho y debían organizarse con lo que tenían.
"Creo que podremos movernos por el día hasta acercarnos al gran árbol." Dijo Aurora y dando un largo suspiro, añadió. "Esperemos que las figuras que lo adoran en la visión, no sea tan poco comunicativos como la que se encontraron ustedes."
Estaba observando a la Sumo Sacerdotisa Xaali y Abdellah.
"No sé si les faltaba comunicación o simplemente eran salvajes que deseaban eliminarnos." Respondió Abdellah agitando su cabeza con solemnidad.
Todavía seguía desconcertado sobre esa situación y era imposible que no lo estuviera.
Las criaturas generalmente instintivas temerían si alguien como Alba se presentaba, pero según ellos, esas criaturas solo continuaron atacando.
Ella pensaba que podrían estar corrompidos por el 'Caos', pero hasta ahora solo se habían mostrado distintas criaturas mágicas y ninguna estaba corrompida de esa forma.
"¿Eso es una casa?" Dudó Alba mientras se acercaban al único árbol extraño en este bosque.
Un árbol de veinte metros de masa negra de color azabache que literalmente brillaba de forma reluciente cuando la luz del sol lo golpeaba.
El grosor era de más de cuatro metros y el tronco tenía una superficie similar a la corteza de un árbol real y eso se extendía a las ramas e incluso a las hojas.
Mientras que arriba de todo había una casa del mismo color, con una pequeña sala y balcón en el que estaba Melgar saludando y Zrag observando como un vigía.
Eso ya estaba a otro nivel… Todos se dieron cuenta al instante y las expresiones mejoraron.
Aurora estuvo agradecida que no se molestaran o que preguntaran abiertamente sobre la fuerza de su hermana y la mayor razón era que no tenía la menor idea de cómo responder.
Sabía que su forma de guerrero autónoma era algo nuevo que su hermana había creado, pero si preguntaba sobre cualquier otra capacidad específica, Aurora no tenía ni la menor idea y estaba segura de que Alice no respondería.
"Alice acertó cuando dijo que nos encontrarías." Dijo Melgar y dando una sonrisa a Zrag, comentó. "Te dije que nuestras jefas eran increíbles."
Ese demonio disfrazado de humano se rio y Zrag asintió en su dirección mientras su grupo bajaba al balcón.
Alba lo hizo con cuidado temiendo destrozar el balcón, pero nada de eso sucedió y Aurora entró al interior de la casa del árbol, viendo a César, Rupert y Alice jugando con la oscuridad para dar forma a objetos.
"No es tan útil como imitar la forma de armas, pero es agradable, no lo negaré." Murmuró César utilizando una cómoda silla para su tamaño de tres metros de alto.
"Estoy curioso por cuantos metros puedes extenderte… ¿Cuánta masa de oscuridad puedes liberar?" Dudó Rupert levantando un pequeño plato de oscuridad.
La masa oscura estaba en forma independiente similar a la forma de guerrero autónomo, pero para Aurora eso no lo sorprendió demasiado.
Su hermana no necesitaba estar conectada a la oscuridad para utilizarla, ya que sabía que su sombra que actuaba como espacio independiente, era la conexión que necesitaba.
Aunque si estaba curiosa por cuanta oscuridad era capaz liberar y cuanto podía mantenerse en batalla o cuan agotador era, aunque si fuera sincera con toda la comida que seguramente llevaba, era muy posible que alimentara toda una ciudad.
"Bastante." Respondió Alice y levantándose le dio una mirada a su grupo, comentó. "Ya era hora."
Su mirada pasó por su grupo y ella, luego hasta su sombra y entonces dio una sonrisa.
"¿Nueva compañía?" Preguntó Alice y sin esperar respuesta, añadió. "Creo que este mundo se encuentra en problemas."
Como literalmente la última que entró al portal Alice seguramente sabia quien se había infiltrado en sus filas sin que nadie se enterara.
No obstante, Aurora se centró en sus últimas palabras.
"¿Qué tan grave es el problema?" Preguntó Aurora de forma solemne.
Ella aparte de las criaturas, la gran raíz y toda la naturaleza, no había visto nada que destacara como un 'gran problema'.
Tal vez esas criaturas que se encontraron Abdellah y la Sumo Sacerdotisa Xaali podrían entrar en esa categoría, pero Alice estuvo claro que estaba apuntando a otro lugar.
"Planetaria." Respondió Alice y dando una mirada pensante, añadió. "Aunque no sé cuánto tiempo tenemos."
¿Una amenaza planetaria? Aurora no supo que responder ante esa pregunta.
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Volando por medio de los grandes árboles mientras se dirigían al gran árbol, Aurora observó cómo Rupert y César saltaban por las ramas moviéndose en la naturaleza.
"Entonces… ¿Alguien está desgarrando este mundo?" Preguntó Aurora como confirmación.
"Más que 'alguien', es algo. Puede ser un fenómeno natural, físico o mágico." Respondió Alice que estaba a su lado en su vuelo y tras pensar, murmuró. "Está desgarrando este mundo, absorbiendo con gran fuerza las tierras por medio de una grieta. El gran árbol parece encargarse de protegerlo, pero no puede hacerlo por completo."
Aurora recordó los cráteres que había visto y luego dio una mirada ambos gorilas… Esos dos gorilas casi fueron tragados por lo que había sucedido y ellos narraron su historia.
Habían estado viajando por más de cuatro horas en dirección del gran árbol y lo hicieron lentamente, debido a que todavía desconocían lo que se encontrarían.
Agregando a eso que el espacio estaba inestable, no sabía si moverse espacialmente una gran distancia podía causar problemas y por ahora la Sumo Sacerdotisa Xaali respondió que era seguro viajar distancias medias.
Aun así, ella no podía imaginar lo que este mundo enfrentaba.
"Creo que es un camino bilateral. Toma algo y deja algunas cosas, hay rastros de destrucción que no tiene sentido." Añadió Alice, abriendo una bolsa de papitas y viendo su mirada, comentó. "Lo has notado."
"Si… Rocas cortadas de forma extraña y muy precisa." Respondió Aurora y en voz baja, murmuró. "Como si el espacio los hubiera cortado y dejado caer en la zona."
Hasta había visto una maldita montaña o al menos la parte superior de una montaña… Tan solo ese hecho demostraba una parte de lo que se enfrentaba y eso era algo que sin duda entraba al nivel de amenaza planetaria.
¿La raíz se encargaba de evitar esos desgarros? Aurora no tenía respuesta y por eso miró a la joven que estaba comiendo con tranquilidad.
"¿A dónde crees que lleve? Si dices que es un camino bilateral… Entonces debe llevar a algún lugar." Dijo Aurora en voz baja, sintiendo como su grupo estaba a su alrededor.
César y Rupert estaban en lo alto moviéndose entre los árboles.
Mientras que Alba estaba siguiendo a Amnestria, que estaba en la parte trasera mientras flotaba en su forma pequeña.
Melgar y Zrag estaban charlando con la Sumo Sacerdotisa Xaali en el medio de la formación y Abdellah se había ido a explorar.
Ambas estaban adelante y Aurora habló en voz baja, ya que esto sin duda estaba a un nivel que la superaba.
"No lo sé." Respondió Alice y con una mirada dudosa, especificó. "Cuando miré a la grieta que casi se traga a César y Rupert, pude ver oscuridad, pero no mágica, sino que literal… Oscuridad de un vacío inexistente."
Los ojos negros de su hermana dejaban ver cierta seriedad y Aurora pudo entender a lo que se refería.
Si lo que algunos teóricos decían, entonces la barrera dimensional estaba protegiendo todo el universo y los diferentes dioses de sus respectivos mundos protegían la porción que estaba conectado a sus mundos.
No obstante, más allá de la barrera dimensional se encontraba el 'Vacío', en donde se podían encontrar entidades de gran poder vagando por ese lugar, ya sea que fueron enviadas, se perdieron o fueron 'selladas'.
Enfrentándose a todas las energías que se encontraban en ese lugar y siendo el 'Caos' la más aterradora de ellas.
Tal vez Aurora no leía tan seguido como su hermana, pero se había informado sobre esos temas y como gran parte de la información estaba libre, no fue tanto problema.
Sin embargo, a pesar de saber que había 'algo' que separaba más allá de la 'barrera dimensional', no muchos sabían cómo era el lugar o los peligros que se encontraban.
No obstante, si creían en lo que la segunda expedición en el portal francés se enfrentó entonces era posible que hubiera entidades en el 'Vacío', tal vez tratando de entrar a algún mundo.
"Esperemos que sea algún tipo de fenómeno desconocido." Murmuró Aurora de forma honesta y viendo que su hermana se reía, dudó. "¿Qué? ¿Te crees capaz de enfrentarte alguna entidad del 'Vacío'?"
De cierta forma que fuera un fenómeno desconocido sonaba menos peligroso que cualquier asunto relacionado con el 'Vacío'.
"Tenemos a una gatita que se filtró en nuestras filas. Creo que todo es posible." Respondió Alice y al sentir su mirada extraña, dio una suave risa y añadió. "Sabes hacer aliados"
Su hermana se estaba burlando de que Amnestria viniera con ellos y Aurora solo pudo agitar su cabeza.
"Hay movimientos a nuestros alrededores… Parecen venir desde atrás y delante. Según los drones son dos grupos diferentes." Avisó Minerva con un tono rápido.
La expresión de Aurora se volvió seria y observando a todo el grupo que había escuchado el mismo aviso, dio una señal.
"Reagrúpense y prepárense para la defensa. No ataquen al menos que seamos atacados." Ordenó Aurora con seriedad mientras el grupo se reunía y dando una expresión solemne, preguntó. "¿Dónde está Abdellah?"
"Está regresando… Pero algo parece estar por interceptarlo, es rápido y parece fuerte."
La respuesta de Minerva fue lo único que necesitaba y con una sola mirada, Aurora le hizo una señal a su hermana para que la acompañara.
Dejando a Alba y al resto del grupo para que empezaran a levantar la barrera en caso de una emboscada, Aurora corrió junto a su hermana en dirección en donde Minerva le señalaba.
Saltando entre las ramas y los árboles, pudo ver que Abdellah estaba a lo lejos con una expresión solemne en su rostro y ese hombre esquivó una lanza de hueso mientras volaba, entonces se movió espacialmente.
Su salto espacial distorsionó el espacio y apareció a más de veinte metros delante de ellas, pero en ese punto una figura a gran velocidad apareció de repente golpeando el cuerpo de Abdellah y volviendo a desaparecer.
Aurora pudo ver que Abdellah golpeaba un árbol tosiendo sangre y ella al desenfundar su espada creó una barrera celeste que cubrió a ambos.
La presencia feroz, salvaje e indómita que estaba sintiendo en este momento le hizo dar cuenta que su enemigo era un rango SS… Uno muy fuerte.