Aurora bostezó aburrida tras levantarse y cuando salió a la sala se encontró a Alice mirando las clasificaciones actualizadas.
"Con nuestra victoria contra la Academia Aetherium hemos obtenido 22 puntos, dejándonos en primer lugar con 67 puntos." Dijo Aurora recordando lo que había visto.
A diferencia de lo que todos esperaron el combate fue una victoria bastante grande para ellos, logrando elevar sus puntos y solo dejando 3 puntos a la Academia Aetherium.
Iban bastante bien, pero las otras academias del cuarto y quinto grupo también elevaron sus puntos.
"La Academia Zerzura tuvo bastantes problemas con la Academia de Paladines." Murmuró Alice ligeramente entretenida.
Esa batalla era del quinto grupo y eran dos academias 'importantes', siendo la Academia de Paladines quienes terminaron victoriosos, obteniendo 20 puntos, dejando a la Academia de Zerzura con 10 puntos.
Ahora la Academia de Zerzura tenía 33 puntos en total mientras que la Academia de Paladines 45 puntos.
"Creo que lucharon con bastante ferocidad logrando derrotar a algunos oponentes antes de caer derrotados." Señaló Aurora con aburrimiento.
Se había tomado un tiempo para mirar un poco de los combates y lo que notó fue que la Academia Zerzura logró derrotar algunos oponentes en la batalla grupales antes de perder.
Incluso si perdían el combate podían ganar algunos puntos, al menos en las batallas grupales.
"Hoy tendremos algunos combates interesantes, ¿los mirarás?" Preguntó Alice curiosamente.
En el primer grupo tendrían la Academia Merlín contra la Academia de Elementalistas mientras que en el segundo grupo la Academia de Aventureros estaba por enfrentarse a la Academia Cernunnos.
Dejando en el tercer grupo la Academia Sacerdotal en contra la Academia de Druidas.
También se encontraban otras academias como la Academia de Cazadores de Escandinavia, o la Academia Militar.
Sin embargo, los tres primeros enfrentamientos se llevaban la atención de todos.
Aurora lo pensó detenidamente.
"Supongo que iré a ver los combates, para tratar de buscar un poco de información." Respondió Aurora.
En realidad, no podía hacer muchas cosas en este lugar y cuando no entrenaba miraba los combates para luego comentarlos con Edward en su tiempo libre.
Hoy terminaría el enfrentamiento de la segunda ronda y eso significaba que empezarían los desafíos.
También se entregarían los nombres, el valor de puntos y las reglas de todos los desafíos, junto a la modalidad bien explicada por parte de las autoridades.
Había que tener una idea de las capacidades de cada estudiante para luego seleccionarlos para los desafíos que serían mejor.
"Y también Rupert te invitó otra vez, ¿no?" Preguntó Alice con una mirada curiosa.
Aurora dio una sonrisa.
"Bueno… Estuve entrenando con sus estudiantes, así que seguramente quiera que lo vea." Respondió Aurora rascándose la mejilla.
La verdad era que cuando la invitaron dio uno que otro consejo y les enseñó como ella se enfrentaría a sus bestias, para que los estudiantes pudieran aprender un poco.
Si se protegían en contra de esas tácticas entonces mejorarían.
"¿Preguntas por qué quieres hacer algo?" Preguntó Aurora de vuelta con curiosidad.
Era probable que ella también fuera invitada por Rupert.
Aunque era de seguro que Alice prefiriera centrarse en otras tareas en vez de comentar sobre los combates.
"Sí. Quiero que hoy sea un día de comida mexicana." Respondió Alice asintiendo de modo solemne.
El tono y la expresión tan seria como si sus palabras fueran un asunto importante fue divertido para Aurora.
Aunque al final asintió sin dudarlo.
¿Cómo podía rechazarla cuando la miraba con tal expresión?
******
En la arena de entrenamiento, Nicole y Érica se detuvieron para observar el combate en proyectado.
"La Academia Merlín son demasiados aterradores…" Murmuró Nicole mirando la proyección.
La arena era grande suficiente para que varios combates se desarrollaran al mismo tiempo y lo que destacaba eran los proyectores que les permitían presenciar los combates.
Los estudiantes se detuvieron por el combate de la Academia Merlín en contra de la Academia de Elementalistas.
"Pensé que los elementalistas podrían darle batalla, pero se ve difícil." Dijo Leslie con una mirada seria al ver los combates.
La Academia Merlín era altamente conocida a nivel mundial y se encontraban estudiantes aterradores y profesores altamente conocidos en el 'mundo de la magia'.
La multiplicidad de la magia llevó a que la Academia Merlín se extendieran en varias ramas diferentes, logrando que en este momento varios estudiantes de ramas muy diferente entre ellas estuvieran presente.
Magia de invocación, magia mental, magia de oscuridad, magia espacial y otros estudiantes que conocían otras magias todo se encontraban en una sola academia.
La multiplicidad de magias y la forma que fueron distribuidos en los combates individuales hizo que la Academia de Elementalistas empezaran con una desventaja.
Añadiendo las raras magias que conocían algunos estudiantes fue difícil que los Elementalistas pudieran ganar.
"La magia es una parte fundamental de Terra nova y la mayoría de los profesores trajeron ese conocimiento y lo enseñaron en la academia." Explicó Érica y mirando el combate, comentó. "Es normal que los elementales tuvieran algunos problemas a pesar de que su control sobre su elemento es elevado."
Ahora estaban mirando el combate grupal de Rango A y todos podían ver como los magos de la Academia Merlín estaban presionando a los elementalistas.
Los elementalistas no eran 'magos' en el sentido directo de la palabra.
Es decir, no eran individuos que controlaban la 'magia' directamente, sino que eran individuos que realizaron contratos con 'elementales'.
Al igual que los domadores de bestias ellos realizaron un contrato con su elemental y le permitió usar el 'elemento' que usaba el elemental.
En la proyección podían ver como los estudiantes elementalistas tenían algunos seres elementales rondando a su alrededor mientras tomaban forma de algún animal.
Eran igual al elemental Gliss que Érica había conocido en la Cordillera de los Andes… No, estos elementales eran más débiles y su forma era más incorpórea.
Los elementalistas tenían un control del elemento gracias a su contrato con el elemental y le permitía demostrar una destreza superior a los magos de su mismo rango.
En cierto sentido los elementales controlaban el elemento a su voluntad, siendo similar a los Archimagos de Rango S.
Pero en este caso hubo un defecto fatal.
"Otro hechizo de maldición… ¿La barrera protege en contra de estos hechizos?" Dudó Nicole al ver la batalla.
Un estudiante de magia de maldición de la Academia Merlín lanzó un hechizo y un aura oscura cubrió a un elemental de fuego que volaba como un ave por el cielo.
La maldición suprimió a la fuerza el elemento fuego y la criatura elemental perdió parte de su fuerza provocando la caída de aquel que lo controlaba por un ataque de magia espacial.
Un corte que distorsiono el espacio golpeó a ese estudiante, llevando a que perdiera de inmediato.
La duda de Nicole era sincera, debido a que la magia de maldición era rara, pero todos los ataques estaban cubiertos por la barrera.
"Oh, va a estallar." Exclamó Érica emocionada al ver como el elemental de hielo de un estudiante elementalista se adelantaba mientras sus compañeros lo protegían.
Estaban siendo suprimidos por la destreza de los magos, pero los elementalistas no caerían tan fácilmente.
Y tal como había señalado Érica el elemental de hielo que se estaba deslizando a las filas enemigas reunió una gran cantidad de energía mágica.
*BOOM*
Cuando estaba en el centro de las filas enemigas estalló generando una feroz tormenta que golpeó a los magos y sus barreras hiriendo a algunas de gravedad sin descalificarlos.
El elemental de hielo que realizó tal hazaña no murió, sino que su fuerza disminuyó y volvió al lado de su compañero para recuperar su fuerza.
"¿Perderán?" Preguntó Clémentine con curiosidad.
La Academia Merlín estaba llevando la batalla muy bien con su trabajo en equipo, pero ahora al ver esa feroz tormenta que se empezaba a extender desde donde estalló el elemental, trajo dudas.
"No, mira al mago de oscuridad." Señaló Érica con una sonrisa.
El mago de oscuridad estaba creando un poderoso hechizo de magia de oscuridad y a pesar de que los otros elementalistas trataban de derribarlo, un mago de luz levantó una poderosa barrera para protegerlo.
Con el tiempo suficiente el mago de oscuridad lanzó su ataque al centro de esa tormenta y…
"Eso es un agujero negro." Murmuró Leslie impresionada.
Un agujero negro apareció en el centro de la tormenta y se tragó todo mientras generaba una fuerza de atracción que hizo que los elementalistas perdieran el equilibrio.
En ese momento un mago de fuego sacó su espada de repente y con un pequeño estallido de fuego en sus pies saltó hacia los elementalistas cubriendo su espada con fuego.
El hechizo 'Agujero Negro' se deshizo de la tormenta y le permitió al espadachín mágico adelantarse.
Lo siguiente en el combate solo fue la derrota de los elementalistas causada por ese espadachín en un combate cercano.
"La Academia Merlín son demasiado buenos. Tienen un mejor trabajo en equipo que nosotros y sus magias son demasiado raras." Dijo Leslie con un tono pesado.
El trabajo en equipo le permitió ganar los combates grupales y si bien el mago de maldición era débil en combate individual, con un grupo de apoyo a su lado, simplemente eran imparables.
Después de todo, era difícil defenderse de ese tipo de magia y ni hablar de 'curarlo'.
"Tiene sentido que su trabajo en equipo sea excelente. A diferencia de la Academia de Héroes los magos realizan prácticas conjuntas para aprender a lanzar hechizos." Respondió Érica sin estar sorprendida.
Los magos de la Academia de Héroes también realizaban prácticas en conjunto entre sus compañeros.
Cuando había magos de diferentes ramas de magia era un problema que se lanzaran hechizos que se contrarrestaba, por lo que era importante aprender a lanzar hechizos que aumentaran de fuerza entre sí.
Un hechizo de magia de agua antes de un hechizo de magia de relámpagos sería devastador al igual que utilizar un hechizo de magia de hielo.
Que la Academia Merlín tuviera una destreza grupal alta no era una sorpresa.
Estaban por cambiar a otras batallas, cuando Leslie y los demás recibieron un mensaje.
"Aurora y Alice nos han invitado a un restaurante de comida mexicana. También han invitado a todos los miembros de la academia. ¿Quieren ir?" Preguntó Leslie por todo el grupo.
"Claro. Relajarnos entre todos va a ser agradable." Respondió Clémentine.
Nunca estaba de más tomarse un respiro y más cuando ahora iban a estar todos los miembros de la academia.
******
Andrés siguió a un hombre que era guardia de la red de información para la cual su superiora estaba trabajando.
Subiendo el ascensor llegaron a uno de los últimos pisos.
La red de información se encontraba en un edificio en el centro de la ciudad Elelín.
Todo un piso era de ellos y Andrés no pudo evitar pensar que el tamaño de la red era enorme.
Cada habitación de este piso eran oficinas en donde varias personas estaban trabajando desde sus computadores.
Cuando entraron a una habitación, Andrés pudo ver a su superiora Giselle mirando los combates.
Esta vez no estaba vestida con una apariencia de 'bibliotecaria', llevaba ropa más casual, lo que hizo que Andrés se preguntara si la primera vez que se conocieron estaba usando un disfraz.
"Cuando termine el combate, hablamos." Dijo Giselle mirando el combate detenidamente.
Como la persona que lo acompaño se fue, Andrés solo se sentó y la acompañó, concentrándose en el combate.
La Academia Sacerdotal se enfrentaba a la Academia de Druidas.
Aquellos estudiantes de la Academia Sacerdotal entrenaban para servir a los dioses de la tierra, pero eso no significaba que todos ellos pudieran emplear los poderes de los dioses de la tierra.
Los Dioses de la Tierra nacieron de la creencia de la humanidad y representaba a todos los dioses que existieron desde el principio de la humanidad.
Sin embargo, no eran tan poderosos como otros dioses que podían prestar su poder de forma indiscriminada, así que tenían que elegir meticulosamente sus paladines.
Por tal razón, en la Academia Sacerdotal no se encontraban tantos paladines o sacerdotes como en la Academia de Paladines.
Eso no significaba que sus estudiantes no fueran fuertes, cada uno seguía creyendo en los dioses de la tierra y entraron a esa academia para mejorar sus habilidades y servirle con mayor devoción.
Los Dioses de la Tierra perdieron fuerza tras años de perder la fe y también se debilitaron aún más cuando las iglesias desaparecieron o fueron repudiadas por los mismos dioses.
Era normal el repudio, cuando esas personas que se llamaban la 'voz' o representante de un Dios en la tierra, solo eran farsantes que usaron la 'fe' para su beneficio.
La iglesia actual era más pequeña que la Iglesia del Tiempo y el Espacio y la Iglesia del Orden, e incluso más pequeña que la Iglesia del Conocimiento de Terra nova.
No obstante, seguían protegiendo a la tierra y mantenían adoradores y creyentes, quienes fielmente les servían.
Ahora esos individuos estaban chocando con la Academia de Druidas con una ferocidad única.
"Los están presionando fuertemente. ¿Los druidas revelarán sus cartas ocultas?" Preguntó Giselle con curiosidad.
La Academia Sacerdotal estaban presionando metódicamente a los druidas que mayormente eran magos de naturaleza.
Estaban en el combate grupal de Rango A y los druidas no tenían la variedad que tenía la academia Sacerdotal, lo que hizo que un trabajo conjunto de sus oponentes lo llevaran al límite.
Los druidas empezaron a extender gruesas raíces del suelo para protegerse, pero ante los incesantes ataques de sus oponentes, sus expresiones empezaron a cambiar.
"¡Oh!" Exclamó Giselle sorprendida.
Fue en el momento en el que estaban por romper la barrera de naturaleza que los druidas se movieron.
Un druida realizó un propio hechizo y al muro de gruesas raíces le crecieron espinas cuyas puntas liberaban un líquido extraño.
El paladín que estaba al frente cubrió a su grupo, pero recibió un corte de esas espinas y en tan solo unos segundos, su cuerpo empezó a temblar.
No había magia 'débil', solo había individuos con poco conocimiento.
Eso dejaron en claro los druidas cuando usaron un hechizo más mortífero creando esas espinas con veneno.
Un sacerdote rezó suavemente y una luz cubrió el paladín purificando el veneno, pero los druidas recién empezaban su ofensiva.
"¡GRAaH!" Un tigre saltó de las gruesas raíces cargando a su oponente.
Ante esa sorpresiva carga, los estudiantes de la Academia Sacerdotal no pudieron reaccionar y uno fue golpeado cruelmente.
La barrera se activó para protegerlo de ese ataque mortal.
"Era un cambiaforma." Murmuró Andrés sorprendido por el cambio.
A diferencia de los estudiantes de la Academia Sacerdotal, él había visto a un estudiante cambiar a la forma de un tigre.
Sin embargo, eso no era todo.
"Eso si es impresionante." Murmuró Giselle al ver como un mago de naturaleza empezaba a rodearse de raíces formando una gruesa armadura a su alrededor.
La armadura fue creciendo hasta que el estudiante se convirtió en un pequeño gigante de tres metros formado por gruesas raíces que cubrían su cuerpo por completo.
Un gigante de naturaleza arremetió en contra de los estudiantes de la Academia Sacerdotal, embistiéndolo con una fuerza considerable.
Tal vez no llevo que su fuerza se elevara de un Rango A, a un Rango S, pero sin duda estaba cerca.
En ese punto la batalla cambio de forma completa y los estudiantes de la Academia Sacerdotal fueron derrotados abrumadoramente.
"Hay muchos estudiantes capaces en todas partes." Comentó Giselle y cuando Andrés asintió, añadió. "Felicidades por tu victoria."
"Gracias. Hice lo mejor que pude." Respondió Andrés en calma.
Giselle no le dio demasiada importancia y dirigiéndose a una esquina en donde estaban las computadoras le señalo para que se sentara.
"Tu trabajo es simple. Tienes algunos objetivos sospechosos a los que tienes que mantener un ojo." Informó Giselle revelando en la pantalla a varias personas y con un tono serio, detalló. "Hemos logrado piratear sus correos, cuentas de redes sociales y sus relojes holográficos. Básicamente, todo lo que usan que sea electrónico y pueda almacenar información."
Andrés asintió con calma.
"Realizar este trabajo sin una causa justa es completamente ilegal, pero por eso hemos sido contratados." Informó Giselle con un tono serio y mirando a los objetivos, señaló. "Los carteles se han escondido muy bien y hemos tenido que llegar hasta el punto de buscar a sospechosos que parecen limpios."
El número de turistas que llegan cada día era un número bastante elevado y una vez dentro de la ciudad era difícil encontrar a sus objetivos.
El departamento de inteligencia del imperio mantenía un ojo sobre todo el bajo mundo inspeccionándolo con una lupa.
Si un miembro del cartel, criminal o cualquier persona se pusiera en contacto con una pandilla, red de información o cualquiera relacionado con negocios del bajo mundo local sería descubierto.
Sin embargo…
"No importa cuánto se esfuercen nuestros socios, todo ha estado muy tranquilo y es por eso que ahora tenemos que encontrar a nuestro objetivo por otros medios." Dijo Giselle seriamente.
Según el departamento de inteligencia, miembros del cartel ya estaban en la ciudad, pero permanecían ocultos.
Sea lo que sea que estuvieran haciendo lo hicieron con un secretismo único, lo que llevo a que ellos extendieran a sus objetivos.
Andrés leyó el informe básico que le daban en la misión y miró a los sospechosos que tenía de objetivo.
Su trabajo era mantenerlo vigilado, ver si realizaban algo sospechoso o tenían contacto con individuos sospechosos.
Aun así, mirando a sus objetivos su expresión no pudo evitar cambiar.
"Ese anciano parece bastante amable." Murmuró Andrés sin poder evitarlo.
Entre los tres sospechosos que eran sus objetivos, uno era un anciano de barba blanca con una sonrisa amable que dio la impresión de que era abuelo cariñoso.
"No te dejes llevar por la apariencia." Dijo Giselle y al revelar su historial, declaró. "En su pasado tuvo contactos con carteles, pero no se pudo descubrir demasiado."
Andrés miró el historial y se dio cuenta de que era tal como Giselle había mencionado.
Era un historial bastante simple, pero el departamento de inteligencia tenía suposiciones del pasado y en vez de dejarlo de lado, lo pusieron en la lista de vigilancia.
"Entiendo, me pondré a trabajar ahora." Dijo Andrés seriamente.
A la noche iba a asistir a la cena grupal y por tal razón era necesario poner todo en orden.