CAPÍTULO 128- Demasiada confianza.

Humanos contra demonios.

CAPÍTULO 128

Izuke y Crismei están en las gradas. Crismei tiene una gran bolsa con pequeños chocolates redondos. Los está comiendo rápidamente.

—¡Delicioso! ¡¿Quieres, hermano?!

—La mujer que se llama igual a ti está a punto de pelear. Presta atención y deja de comer.

—Hagamos un trato, yo dejo de comer, pero tú dejas de sonreír.

—Ya me acostumbré a sonreír... Me siento incómodo si no sonrío...

Izuke toma aire y deja de sonreír.

—Listo, ahora presta atención, Ednac.

—Crismei... Llámame Crismei.

—Como sea.

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Leinad y Ednac están a punto de pelear.

—¡¡¿Estás listo, Leinad?!!

—¡¡Lo estoy!!

—¡¡¿Estás lista, Ednac?!!

—¡¡Por supuesto!!

—¡¡Comiencen!!

Leinad salta y extiende sus manos.

De sus manos comienzan a salir tentáculos blancos, pero son tentáculos algo raros... Los tentáculos tienen bocas y ojos... Es realmente raro... Son 4 tentáculos en total, dos en cada mano.

Toma a Ednac con uno de los tentáculos.

—Vaya, ¿intentas aplastarme?

Acaricia el tentáculo y comienza a desintegrarse.

—Tocarme fue mala idea.

La desintegración avanza rápidamente por el tentáculo.

—¡¿Qué?!- Dijo Leinad asustado.

La desintegración alcanza su brazo derecho.

Leinad comienza a desintegrarse rápidamente.

—¡¡Gané!!- Gritó Ednac, levantando su brazo derecho.

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... Wow... Un poder de desintegración... Es algo injusto.

Leinad se vuelve polvo y desaparece.

Me acaricio el brazo izquierdo... Eso fue realmente sorprendente.

—Realmente los participantes no saben nada sobre los otros participantes. Si Leinad hubiera sabido sobre el poder de Ednac, no la hubiera tocado... Pero Ednac se confió.

—¿Ednac se confió?- Dijo Sandro.

—Mira muy bien lo que va a pasar.

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La presentadora no dice nada, no dice que Ednac ganó.

—Oye, tienes que decir que gané.

—Aún no ganas.- Dijo la presentadora.

—¿Eh? ¿Aún no gano?

Del suelo sale un tentáculo negro, y con una gran velocidad, atraviesa el pecho de Ednac.

—¿Q-qué?- Dijo Ednac mientras sangre sale de boca.

Del suelo sale Leinad, su brazo derecho se convirtió en ese tentáculo negro.

—Creo que yo soy el ganador.

Ednac se vuelve polvo y desaparece.

El brazo de Leinad vuelve a la normalidad.

—¡¡El ganador es Leinad!!

Todos comienzan a aplaudir y a gritar su nombre.

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Ah... Un error de novato... Confiarse demasiado.

—¿Cómo sabías que no había perdido?- Dijo Sandro.

—Sucedió muy rápido. Un pequeño tentáculo salió de su cabeza y cayó al suelo antes de que Leinad desapareciera. Cuando Leinad se volvió polvo, sentí que el poder mágico del tentáculo estaba creciendo, lo que significa que lo usó para sobrevivir... Es como un doble. Ese tentáculo entró al suelo, lo que significaba que tenía un plan para derrotar a Ednac.

—Realmente los seres de otros mundos son increíbles.

—Realmente lo son... Es una pena que Ednac haya perdido, tenía un gran poder mágico, pero se confió demasiado.

Crismei e Izuke se acercan a nosotros.

—¡Hola, Daniel!- Dijo Crismei sonriendo.

—Hola, Crismei. Hola, Izuke.

—Tu pelea fue increíble, pero muy corta.

—Gracias.

—Oscuridad es demasiado poderoso, suerte.- Dijo Izuke.

—Espero lograr llegar a la final.

—¿Y qué deseo pedirás si ganas?- Dijo Crismei.

—¿Deseo?

—¿No sabías que al ganador se le concede un deseo?

—N-no lo sabía...

Volteo a ver a Dios.

—¿Es cierto eso?

—Quería darte una sorpresa.- Dijo Dios sonriendo.

—¡¿Puedo pedir que el mundo 1 se salve?!

¡Eso me ahorraría mucho tiempo y esfuerzo!

—Tal vez. El Dios supremo concede los deseos, pero solo los que él quiere. En una ocasión, un ganador pidió destruir un mundo, pero el Dios supremo no se lo concedió... Esperemos que el Dios supremo quiera conceder tu deseo, Daniel.

—I-increíble.

... ¿Y si lo uso para recuperar a Daniela...? No... Lo importante es salvar el mundo 1... No puedo ser egoísta.

... Realmente la extraño.