Yendo a la capital

Aiwai estaba volando con Yale y Wyba en sus brazos, pero ella no estaba volando a toda velocidad como de costumbre.

La razón era que Sebe los estaba siguiendo. La línea de sangre de Sebe no le dio alas, pero con su estatus, logró aprender un hechizo de vuelo sin problemas. Sin embargo, como Sebe estaba en un nivel inferior al de Aiwai y solo podía confiar en la habilidad para volar, su velocidad era mucho más lenta que la suya.

Sebe iba con ellos a recoger el árbol, por lo que Aiwai necesitaba esperarle, incluso si eso era equivalente a ser más lentos para llegar a la casa.

Afortunadamente, Sebe decidió dejar a Shirk en la habitación porque si necesitara llevarlo, la velocidad habría sido incluso más lenta.

Cuando todos llegaron a la casa de Aiwai, Sebe se sintió un poco avergonzado de su capacidad de vuelo.

—Lo siento, mi habilidad de vuelo es muy lenta en comparación con la tuya…