1484 Revelación

En el momento en que ella habló, el mundo entero pareció calmarse.

Anna podía incluso oír los latidos de su corazón.

Abrió la boca, pero su voz no parecía emitirse por su garganta.

—Pero, ¿adónde más podemos ir?

… La Guardiana se quedó en silencio, sorprendentemente.

—Parece que tú también eres consciente de la respuesta. Aparte de este lugar, no tenemos adónde ir. —Anna se animó y observó cuidadosamente a la Guardiana. Se veía idéntica a un humano, y hablaba en el idioma estándar del Reino. Con su repentina aparición, era fácil adivinar sus orígenes—. He oído de Joan que estás atrapada aquí. ¿Nunca has pensado en irte?

—Srta. Joan, es... —La Guardiana reveló una suave sonrisa—. Parece que ella realmente ha traído de vuelta la pregunta. Pero desafortunadamente, no hay una respuesta verdadera a la pregunta.

—Pero todavía hay gente que intenta buscar la respuesta, y ella también es de tu clase.

—¿Una de mi clase?