A través de una oscuridad como el espacio se veía una silueta flotando, la era Antony...un chico de 15 años que lamentablemente estaba flotando a la deriva. Lo que flotaba era su alma, que no encontró el camino al otro mundo y estaba en una especie de limbo. Y vivirá muchas aventuras en el nuevo mundo que le espera. No soy dueño de My Hero Academia ni de el personaje de Madara Uchiha. Todos los derechos a sus respectivos creadores.