webnovel

Kantaros/ La odisea del Dragón

Manuel Doragon es un joven Cristiano que fue separado de su familia durante la evacuación luego de que un extraño fenómeno apareciera. Su fe es puesta a prueba constantemente en este mundo donde la fantasía ya es una realidad

HibriDDoragon · Fantasie
Zu wenig Bewertungen
18 Chs

Capitulo 7.- Perdiendo la cordura.

Se encuentra flotando en el espacio vació una vez mas, solo el negro de la oscuridad y el latir de su corazón le acompañan, hasta que una luz aparece, la única luz que brilla en toda esa oscuridad es la de ella.

Una vez mas ella le extiende su mano para que el la trate de alcanzar, una vez mas el vacío se transforma en aquel campo de batalla lleno de cuerpos y demonios negros, Una vez mas aquella doncella se encuentra de rodillas y trata de apoyarse con su espada para levantarse, una vez mas el suelo tiembla y se revela aquella enorme sombra en medio de la bruma. Y una vez mas, Manuel se encuentra detrás de ella, atravesado de pies a cabeza por estacas, lanzas y flechas negras.

Como es de costumbre con ese extraño sueño que se repite sin parar, la Doncella de cabello rubio como el sol se levanta y arremete contra la sombra en la bruma y una vez mas Manuel corre tras ella y se despierta sin poder alcanzarla.

Esta vez despierta a causa del frío que envuelve todo el lugar, el frío de ultratumba que atormenta su alma.Con los ojos secos de tanto llorar, parpados cubiertos por cristales de hielo que antes eran sus lagrimas.

Manuel se levanta en medio de la oscuridad e incapaz de ponerse sobre sus pies por la falta de energía.

- Aun esta oscuro - dice con un débil susurro mientras levanta la mirada, y al ver que no hay nada mas que oscuridad se recuesta nuevamente en el helado suelo a esperar que la muerte llegue pronto y le permita descansar de esta pesadilla.

Luego de presenciar lo sucedido a estado recostado en el suelo por mas de 3 días, incapaz de levantarse por voluntad propia, solo espera que algo termine pronto con su vida. La agonía y desesperación grabadas en los gritos de las personas aun seguían con vida, inclusive hubieron algunos que golpeaban la puerta y pedían ayuda, pero Manuel en su cobardía no se atrevía a levantarse de su lugar.

Pasaron dos días mas y el cuerpo inerte de Manuel seguía sin mostrar señales de vida, pero su mente estaba consiente, durante un par de horas pudo escuchar lo que se acercaban a quejidos humanos y cuerpos siendo arrastrados e incluso algunas voces de niños balbucear, pero el cuerpo sin vida no se dignaba a levantarse.

- si salgo me atraparan, si me muevo me escucharan, mejor morir aquí sin hacer nada mas - eran las palabras que susurra hasta que ya ni fuerzas le quedaban para hablar y su boca dejo de balbucear, quedando así como otro cadáver mas y luego de un par de horas las ratas lo ven como tal pues chirridos de esas pestes comienzan a resonar mientras se van acercando al cadáver en el suelo.

Manuel simplemente no es capaz de escuchar o sentir nada, ni siquiera cuando una por una van subiendo a su inerte cuerpo y comienzan a roer partes de su ropa y zapatos, Manuel simplemente no hace nada, hasta que una de ellas le muerde la mejilla derecha, fue allí cuando se dio cuenta de que seguía con vida, pues el dolor es lo que nos dice que estamos vivos.

- ahhh, que demonios - grita por el agudo dolor de ser mordido en la cara por los dientes de una rata, las cuales lo tienen completamente rodeado y comienzan a morderle por todas partes.

- fuera, fuera de aquí pestes de mierda - grita con fuerzas que no tenia mientas se las quita de su cuerpo arrojándolas lejos y haciendo que se vayan asustadas.

Luego de 5 días Manuel por fin reacciono y se puso de pie, pero dado que no ha comido ni bebido nada su vista se torna borrosa y le hace caer al suelo golpeándose la cabeza contra un escritorio. El frota su cabeza en el lugar del golpe y toma asiento sobre el suelo y así ver como el lugar ya no se encuentra rodeado de oscuridad.

-¿Que fue lo que paso? - se pregunta mientras mira y revisa el alrededor con su vista.

-¿Porque no vinieron por mi? ¿es acaso una maldita broma? Todas las personas murieron y a mi ni se me acercaron, ¿como puedo se supone que debo tomar todo esto Señor? - grita mientras las preguntas solo siguen llegando cuanto mas lo piensa y sucumbe a destrozar todo lo que encuentra sillas, muebles, estantes y cajas son arrojados con fuerza por un arranque de ira hasta que se desploma debido a la inanición. Agotado por su rabieta queda tirado en el suelo y de repente oye el chirrido de una rata que pasa cerca de su lado, por instinto reacciona lanzándose hacia ella chocando en el proceso con varias cajas hasta lograr atraparla y sin esperar comienza a devorarla mientas esta aun se encuentra viva. Mordiendo con fuerza el lomo de la rata para desgarrar su carne.

Chirridos de una rata siendo destrozada viva que acompañados de risas maniáticas se esparcen por el lugar generando terror en sus hermanas mas cercanas. el estado mental de Manuel no es el mismo que antes. Luego de devorar la rata Manuel se levanta y comienza a revisar entre los estantes en busca de mas y las encuentra, 3 de ellas y todas terminan como la anterior y así son por tres cuatro mas.

Entre sonidos de huesos, chirridos de ratas siendo su carne desgarrada y las gotas de algún grifo goteando y haciendo eco un animal se levanta, tras terminar de comer comienza a explorar el terreno como si de verdad fuera una bestia que camina por los alrededores mientras amplia su territorio, siguió así por un rato hasta tropezar con un libro que le hizo regresar en si son solo ver la portada.

- ¿La Biblia de mi tío? - dijo Manuel en voz alta.

Puede ser irónico o ilógico, durante mucho tiempo Manuel fue un chico de familia secular hasta que en un viaje a la hacienda de sus abuelos paternos, él paso mucho tiempo con su tío, ese hombre le hizo entender muchas cosas que el jamas habría pensado haciendo que dentro suyo naciere un sentimiento hacia un ser que muchos llaman Dios.

Pero Manuel fue diferente a muchos que su tío enseñaba. Su devoción iba mas allá que un simple cristiano, pero a causa de que solo fue un viaje de vacaciones, Manuel al regresar fue victima de los mismos abuso que siempre le deprimían e inclusive mas por su credo causando que el solo tuviera refugio en su madre y ese libro y el solo hecho de verlo le recordó todo el tiempo que paso con su tío y lo regreso en si.

- ¿que es lo que hice? - se pregunta a si mismo mientras se limpia la sangre en su boca.

Tras de perder la cordura el libro en el suelo le ayudo a recordar su credo y a volver en si, pero a la vez recordar todo lo que sucedió, lo que hizo y no hizo en los últimos días haciéndole caer de rodillas para lamentarse por su propia debilidad y cobardía deseando así estar muerto en vez de seguir sufriendo rodeado por el inmenso silencio.

Levantando la mirada mientras observa un cuchillo frente suyo, Manuel piensa seriamente en el suicidio y tomando el cuchillo lo apunta directamente a su cuello para acabar son su vida pero justo antes de hacerlo su reproductor mp3 al que ya se le había agotado la batería desde hace 3 días comenzó a reproducir una canción de las canciones de Alex Campos, "el sonido del silencio".

"El sonido del silencio, el que no quiero escuchar"

"Es aquella noche fría en la que quiero evitar"

"El sentirme descubierto cuando el sol me quemara"

Deteniendo el cuchillo en el ultimo segundo antes de atravesar su cuello Manuel recuerda las palabras que le dijo su tío hace tiempo cuando estaban sentados frente aquel campo dorado de arroz listo para cosechar " viste hijo, si pudimos a pesar de que nos dijeron que no crecería igual pudimos hacerlo, lo ves, jamas te des por vencido".

Manuel deja caer el cuchillo mientras lagrimas caen de sus ojos al recordar el rostro de su tío y el poder en aquellas sabias palabras.

Tomando valor de ese recuerdo junto con la canción deja caer el cuchillo al suelo para ponerse de pie y registrar cada estante, gabinete, escritorio y caja del lugar, en busca de cosas útiles pero solo detergentes y utensilios de limpieza junto con medio litro de queroseno.

Manuel revisa el ultimo estante, esponjas de baño en el primer gabinete, solo detergente en el segundo, un paquete de galletas de crema en el tercero y mas abajo.

- espera - dice Manuel mientras regresa su mirada hacia el tercer gabinete, en donde se encuentra un paquete de galletas de cremas en perfectas condiciones.

-¿de donde salio esto?- se pregunto dado que no lo vio mientras buscaba ratas para almorzar.