Embarazada

La llamada se realizó rápidamente y el corazón de Su Wan latía con fuerza. —Jing Chen, ¿estás libre esta noche? ¿Puedes volver temprano?

—La compañía no está muy ocupada hoy. La voz de Jing Chen era tan suave como el agua. Luego, bajó la voz y bromeó, —¿Me extrañaste? Puedo volver ahora. Puedo dejar el resto a Zhao Lin.

—Está bien. Vuelve temprano después de que termines. Tengo buenas noticias que contarte personalmente. Es muy importante. Su Wan enfatizó las palabras "importante".

—De acuerdo. Después de la breve llamada, Su Wan sostuvo su teléfono y se revolcó emocionada en la cama, imaginando cómo reaccionaría Jing Chen cuando lo escuchara.

Cuando Jing Chen regresó a casa, el corazón de Su Wan latía descontroladamente. Estaba muy nerviosa en ese momento. Quería traerle esta sorpresa a Jing Chen, pero también estaba en conflicto sobre cómo decírselo.