Inicio del Destino de Steffanie (3)

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—Si yo fuera tú, deberías llamar a tu anterior gerente y hacer que confiese de una vez. Aunque la vida en prisión no es tan buena como la vida afuera, aún debería ser mejor que estar encerrada en algún lugar —Jia Yi se fue tan pronto como dijo esto.

Steffanie se quedó parada en medio del baño, sintiendo que el suelo se ablandaba bajo sus pies y lentamente la estaba tragando.

La sensación de desesperación, impotencia y vulnerabilidad que solía burlarse de otras estrellas para pisotear su dignidad, era ahora algo que también podía sentir. ¿No es esto irónico?

—¡Riing!

Steffanie se sobresaltó con el timbre de su teléfono y estaba a punto de colgar cuando vio que era su padre.

—¡Papá! ¡Sálvame! —Steffanie sabía que no había forma de que pudiera salir de esta situación con su propio poder, así que solo podía suplicarle a su padre que la ayudara. Era su única hija, era natural que él la ayudara, ¿verdad?