Kat ahora estaba mirando a través de la mesa al Jefe. Kamiko temblaba en su lugar, mientras él la miraba fijamente y Kat podía sentir su propio aura intentando resplandecer para calmarla. *Simplemente no estoy segura de que eso sea apropiado... No quiero empeorar las cosas para ella... Tampoco es como si el Jefe intentara ser intimidante... o al menos no creo que lo esté...*
El Jefe, por su parte, simplemente observaba detenidamente a Kamiko como para asegurarse de que solo decía la verdad. La razón por la que esto ocurría era que Kamiko había mencionado los calcetines, probablemente valiosos. Lo confirmó preguntando de nuevo. —¿Calcetines? ¿En serio?
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