SARA
Me levante como de costumbre, estaba desnuda en mi cama y él ya no estaba a mi lado, las imágenes de lo sucedido la noche anterior llegaron a mis ojos, me sentí avergonzada pero feliz, recordar todas esas sensaciones me hizo estremecer, salgo de mi trance y entro al baño, me aseo, me visto, una minifalda de jean, blusa blanca de tiras, peino mi cabello y salgo de mi habitación, sé que él está durmiendo justo frente a mi habitación, pero no puedo entrar, bajo y mis padres están por salir con mi hermano, se van al mercado, ellos ya desayunaron, mi madre me dice que prepare el desayuno para Carlos y para mí, me advierte: has algo rico, no vayas a hacer sándwiches, le respondo que eso es lo más rápido, me dice perezosa, antes de cerrar la puerta, obviamente no voy a preparar un desayuno tan sencillo, entro a la cocina, busco que hay para preparar, veo tostadas, leche, queso, huevos, entonces preparo unos huevos rancheros, tostadas con mantequilla, chocolate, queso y jugo de naranja, tardo alrededor de cuarenta minutos, subo y entro a su habitación, está profundamente dormido, admiro su rostro un rato y no sé qué está soñando pero sonríe, su sonrisa es hermosa, ya entiendo porque me enamore de él, esa sonrisa es adictiva; me siento en la cama y lo llamo, amor despierta, vamos a desayunar, pero no reacciona, lo llamo un par de veces más, estoy a punto de darme por vencida cuando abre los ojos, vuelvo y le digo amor, despierta vamos a desayunar, mis padres no están en casa, salieron al mercado y llegan tarde, casi no me deja terminar cuando ya estaba acostada en sus brazos y me dice quédate así cinco minutos, me quedo quieta y dejo que me abrace, luego de un tiempo le digo amor, vamos a desayunar, no tendremos otra oportunidad de desayunar juntos, ya que tenemos esta quiero aprovecharla, un poco de mala gana se levanta de la cama, entra al baño se asea y salimos juntos de la habitación, cuando llegamos al comedor, abre sus hermosos ojos como platos, me dice amor tu preparaste esto, como si fuera imposible, me enoje un poco y le digo si no tienes hambre pues no comas y me dispongo a tomar mi desayuno, llega hasta donde yo estoy sentada y me abraza, me dice mi reina no te enojes, es solo que me parece maravilloso poder desayunar algo que tu preparaste, cuando nos casemos y vivamos juntos yo seré quien preparé el desayuno para ti, este hombre sabe cómo coquetear y quitarme el enojo, de solo imaginarme despertar todos los días a su lado me pongo feliz, el desayuno es muy animado, terminamos juntos y el limpia la mesa y lava los platos, se ve tan lindo en la cocina, no puedo evitar suspirar, deseo tener unos años más para que mis padres puedan aprobar nuestra relación, ser felices si tener que escondernos, para amarnos libremente, cuando el termina con la cocina, me ve sonríe, se acerca y me abraza, me susurra al oído, quisiera despertar así todos los días, desayunar contigo y poder abrazarte en cualquier momento y le digo que yo también deseo eso, una vida así juntos.
Nos sentamos en la sala y vemos cuentos de los hermanos Grimm, a ambos nos encanta verlos, por momentos nos besamos, me encanta que me abrace y él lo sabe, por lo tanto lo hace, me siento segura en sus brazos, veo la hora y son casi, las once, es raro que mis padre no hayan llegado, por lo tanto empiezo a preparar el almuerzo mientras él hace el aseo, parecemos una pareja de recién casados, jugamos mientras hacemos todo y escuchamos un poco de salsa, se supone que llevamos el baile en la sangre, pero mi coordinación es nula, por lo tanto no se bailar, pero me gusta mucho cantar, al igual que él, es amante de la música, toca guitarra y batería; es paso el medio día cuando mis padres regresan, la casa está organizada, el almuerzo está listo, la ropa en la lavadora, mi mamá organiza las compras mientras yo sirvo el almuerzo, nos sentamos todos a almorzar, es un día bastante soleado, mi amor propone irnos al rio y todos nos ponemos de acuerdo, así que nos a las dos salimos de la casa en el carro, no hay mucha gente en el rio cuando llegamos, buscamos un lugar cómodo donde acomodarnos, mi papá dice que hoy tengo que aprender a nadar, es algo vergonzoso pero no se nadar, me quito los zapatos y el short de jean que me puse, quedo en un short tipo cachetero rojo, una blusa de tiras blanca y me encamino al agua, puedo sentir unos ojos pegados a mi espalda y mi trasero, sé que es el, estoy segura de eso y sonrió, me siento en una piedra grande y meto los pies en el agua, la temperatura es perfecta, estoy perdida en mis pensamientos, cuando alguien se sienta a mi lado, no reconozco su olor, por lo que volteo a ver, es un chico del colegio, un par de grados más adelante que el mío, me saluda y hablamos un poco, pero siento una mirada asesina acercándose, entonces le digo a mi amigo, porque somos amigos solamente, que mi papá me va a enseñar a nadar y que ya viene, para que se vaya, todos en el colegio saben que mi papá es celoso al extremo conmigo, por lo tanto el pobre sale corriendo de mi lado, mi amigo se fue y llega mi amor y se sienta a mi lado, muy entretenida con ese niño me dice en un tono para nada agradable, sé que esta celoso, pero no es mi culpa, además él sabe cuánto lo amo, le digo: es solo un amigo del colegio y no tengo ojos para nadie más que no seas tú, Carlos te amo demasiado, tú lo sabes, anoche por poco y fui tuya y ahora estas dudando de mí, eso no es justo, él iba a decir algo, pero no lo dejo, me levanto y camino hasta dónde está mi mamá, había olvidado ponerme protector solar, él se quedó con la palabra en la boca, me pongo el protector en todo el cuerpo y vuelvo al agua, aunque no se nadar bien, ya me defiendo, así que por la parte donde veo que la corriente no es peligrosa, empiezo a nadar y me cruzo al otro lado del río, quiero estar sola, estoy realmente indignada.
CARLOS
Pase toda la mañana con mi princesa, hicimos aseo, organizamos la casa, ella hizo almuerzo, sus padres llegaron realmente tarde, ya me estaba muriendo del hambre, pero decidimos esperarlos para almorzar, llegaron y mi Sara empezó a servir el almuerzo, después de almorzar propuse ir al rio, todos estuvieron de acuerdo, se cambiaron, a mí me prestaron una bermuda y una camiseta, Sara lleva un short de jean y una blusa blanca, se notan bastante sus senos y el brasier rojo que lleva, me incomoda un poco que su short sea tan corto, llegamos al rio y ella se quita el short de jean, casi me da un infarto, tiene un short mucho más corto, parece un cachetero, es de color rojo, no puedo evitar mirarla, entra al agua y se sienta en una piedra, luego de un rato veo a un muchacho unos tres o cuatro años mayor que ella sentarse a su lado, me hierve la sangre de la rabia, siento muchos celos, ese lugar es mío, ella no debe hablar con nadie más, creo que ella se da cuenta de mis miradas, porque voltea a ver un par de veces y el idiota ese solo sabe coquetearle y reírse, quiero matarlo, no me aguanto y me levanto de donde estoy, camino hasta donde están, él se levanta y se va, ella se queda sola y cuando llegó no puedo evitar reclamarle, muy entretenida con ese niño le digo en un tono para nada agradable, a lo que ella me responde es solo un amigo del colegio y no tengo ojos para nadie más que no seas tú, Carlos te amo demasiado, anoche por poco y fui tuya y ahora estas dudando de mí, eso no es justo, iba a decirle algo más, pero se levantó de forma abrupta y se fue, me quede con la palabra en la boca y pensando en lo que me dijo, sé que tiene razón, ella me ha demostrado que me ama, tanto como yo a ella y no debo desconfiar pero los celos me invaden y no puedo evitar comportarme como un idiota, la veo a lo lejos aplicarse protector solar y hablar con su mamá, luego camina hacia el agua y creo que viene para donde yo estoy, pero en cambio me evita y empieza a nadar para el otro lado del rio, donde no hay nadie, me siento impotente, no quiero que este enojada, la veo salir del agua y sentase con la cabeza entre sus rodillas, no puedo ver su cara, pero sé que está llorando, maldita sea soy un idiota, ella me ama, yo sé que me ama y aun así no puedo evitar lastimarla, veo hacia dónde están sus padres, ni siquiera han notado que ella está al otro lado, están hablando con unas personas que no conozco, dándole la espalda al rio, me meto al agua y nado hasta el otro lado, donde está ella, no puedo verla así, me rompe el corazón verla llorar, llego y me siento a su lado, vete me dice quiero estar sola, no quiero verte, te odio Carlos, tu no me amas, crees que soy una cualquiera, me haces daño, él es solo un amigo del colegio, pero tú ya piensas que tengo algo con él, yo quiero una pareja que me ame y me respete, que crea en mí y tu no lo haces, tus malditos celos me lastiman, nunca te he dado motivos para desconfiar de mí, daría mi vida por ti y a ti no te importa, tus celos te tienen loco, vete por favor, me siento aterrado, tengo miedo como nunca antes había tenido, no quiero perder a la mujer que amo, a la única que he amado de verdad.