En cuanto todos se percataron de que Goku parecía estar hablando solo, se acercaron para ver qué hacía. Se llevaron una gran sorpresa.
"¡Eso es fantástico Kaiō-sama!" exclamó Goku entusiasmado, "¡Me sorprende mucho que hayan llegado incluso más rápido que yo a tu planeta!"
'Oh, llegaron medio mes antes que en la serie original' pensó Gohan con una sonrisa, eso era bastante bueno realmente. Un buen cambio.
"Son más fuertes que tú cuando llegaste" dijo Kaiō-sama sonriendo, "Están muy ansiosos por comenzar el entrenamiento, ¡¿verdad que sí?!"
"¡Sí! Quiero volverme igual de fuerte que Goku" Yamcha exclamó con una sonrisa, pero Piccolo quien estaba a su lado apenas mostró interés.
"Oye Kaiō, quiero hablar con Goku" dijo Piccolo acercándose a la deidad, quien se extrañó ya que hasta ahora no había proferido ninguna palabra.
"¡Es Kaiō-sama! ¡Sé más respetuoso conmigo!" le corrigió con una vena de enfado en su cabeza, "Pon tu mano sobre mi hombro y habla con él"
"Hpmf" Piccolo no le dio importancia e hizo conforme le dijo Kaiō-sama, "¿Me oyes Goku? Soy yo Piccolo, sigues entrenando, ¿verdad?"
"¡Claro que sí Piccolo! He de volverme más poderoso para ir a Namek" contestó Goku con emoción, "¡Espero que tú también entrenes!"
"No eres el único que se volverá fuerte... ¡eso también va para ti enano! Sé que dentro de muy poco te irás a Namek" dijo Piccolo sonriendo.
Gohan se emocionó al escuchar la voz de Piccolo, era mucho lo que había vivido con el namekiano durante el último año y medio...
"En efecto Piccolo, ¡espero que aproveches tu estancia ahí porque me volveré más fuerte de lo que puedas imaginar!" profirió el pequeño Son.
"Siempre presumiendo niño, ya ajustaremos cuentas cuando regrese" dijo Piccolo cruzando sus brazos, "Consigue las esferas del dragón"
"Eso ya lo sé, no tienes porqué decírmelo, te resucitaré para que puedas tener tu revancha" declaró el niño con una sonrisa en su rostro.
"Tsk, esperaré en este pequeño lugar, ve con cuidado" Piccolo se retiró una vez haber dicho tales palabras y Kaiō-sama le miró enfadado.
"C-cálmese Kaiō-sama, él es así" Yamcha se percató e intentó mediar, "Chicos, entrenen lo más duro que puedan, ¡haré lo mismo aquí!"
"¡Dalo por hecho Yamcha!" Krilin saltó feliz "Estamos aprendiendo una técnica con la que nuestros poderes se incrementarán mucho"
Mientras estos dos seguían hablando, Gohan aprovechó para alejarse un poco de ellos. Pero entonces, Goku evitó que siguiera alejándose.
"Eso que hacías antes era muy parecido a una Genki-dama" habló Goku con curiosidad, "¿Cómo es posible que puedas hacerla sin aprenderla?"
Gohan tragó saliva al oírle, había olvidado lo avispado que era su padre cuando se trataba de algo referente a los combates, ¡era un genio!
"Nos dijiste los principios básicos y aprendí más acerca del Ki con Kami-sama... así que lo intenté" contestó Gohan rascándose la nuca.
"Ya veo, pero deberías reunir la energía en tu mano para canalizarla mejor" le aconsejó Goku con la mano bajo la barbilla, y el joven asintió.
'Lo sé papá, pero mi objetivo no es ese' pensó Gohan con una gota de sudor en la cabeza, "De acuerdo, prosigamos entrenando el Kaiō-ken"
"Sí, aunque puedas usar la forma base todavía queda fortalecer tu cuerpo para que resistas los demás incrementos del Kaiō-ken" explicó Goku.
Padre e hijo volvieron con los demás. Tenían muy poco tiempo antes de que la aventura en el planeta Namek iniciara y debían aprovecharlo.
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"Aquí tienes, este primer prototipo contiene veinte semillas" dijo Bulma entregándole una bolsa, "Fue difícil recrearlas, ¡cuídalas bien!"
Habían pasado cuatro días desde entonces, y el entrenamiento continuó sin ninguna novedad relevante en el arduo aprendizaje del Kaiō-ken.
Gohan ya era capaz de reunir el Genki de las plantas y animales pero al no estar herido los efectos no se podían apreciar a simple vista.
Ahora había llegado el momento de partir a Namek. En este momento estaban reunidos en Capsule Corporation para despedirse de él...
"Sí, procuraré usarlas sabiamente" dijo Gohan sonriendo y guardó la bolsa. Se había cortado el pelo y vestía el gi naranja azulado de su padre.
"Éste es el radar del dragón, ya te enseñé como interpretar las coordenadas" Bulma le extendió el objeto al pequeño, "Sí... creo que eso sería todo"
A lo largo de estas tres semanas Bulma le había enseñado lo básico para que no tuviera problemas en Namek con la nave y demás.
"Gracias Bulma, en verdad te estoy agradecido" habló Gohan haciendo una pequeña reverencia y se giró hacia los demás, "Bien, ¡tengo que irme!"
"Cuídate hijo, ¡cuando vuelvas te cocinaré todo lo que quieras!" exclamó Chi-Chi con lágrimas en las cuencas de sus ojos y Gohan se sintió mal.
Prácticamente llevaba un año sin verle, a él, su único hijo, y ahora volvía a irse, para colmo a otro planeta. Chi-Chi era una mujer muy, muy fuerte.
Por lo tanto, corrió a rodearla con sus brazos y fundirse en un abrazo con ella. Chi-Chi cerró sus ojos y correspondió el gesto con todo su amor.
"Regresa pronto Gohan, te echaré de menos" comentó la mujer separándose de él, "Tu padre se irá en una semana, así que ve con cuidado"
"Estaré bien mamá" habló Gohan sonriendo, "Papá, tío Raditz, entrenen hasta superar sus límites, y espero que ambos se lleven mejor"
"¡Déjalo en mis manos niño! Tú preocúpate por incrementar tu fuerza" dijo Raditz con los brazos cruzados, "No olvides practicar la forma Ozaru"
"Ugh, sería algo peligroso transformarme en la nave, pero seguiré entrenando" contestó Gohan pensando en varias alternativas, "¿Modo Ikari?"
"Recuerda entrenar a una gravedad que tu cuerpo pueda resistir" añadió Goku alzando un dedo y Gohan asistió con seriedad ante eso.
"Confiamos en ti Gohan, reúne las esferas del dragón por nosotros" dijo Krilin con una sonrisa y Tenshinhan asintió apoyando tales palabras.
"No les decepcionaré amigos" espetó el niño caminando hacia la nave, y empezó a subir las escaleras, "¡Hasta pronto! ¡Cuídense mucho!"
Gohan compartió una última mirada con su padre, no se dijeron ninguna palabra. No hacía falta, los dos se entendían perfectamente...
Una vez dentro, Gohan caminó hacia el panel de controles y presionó el botón para iniciar la cuenta atrás antes de que despegara la nave.
Quedando pocos segundos se sentó y se abrochó el cinturón. Cruzó los dedos de sus manos mientras pensaba en varias cosas.
'Namek... allí me aguardan Vegeta, las fuerzas Ginyu, y claro, Freezer' pensó el niño, 'Sólo tengo cinco días, tendré que entrenarme como nunca'
"Iniciando despegue" una voz robótica hizo eco en la nave y al momento ésta se alzó a la termosfera a una velocidad estremecedora.
Tras haber salido de la órbita de la Tierra y, Gohan se levantó de su asiento e hizo algunos estiramientos antes de dar un par de pasos.
Y se detuvo frente al panel de gravedad que ocupaba el centro de la nave. Ahora, marcaba una gravedad de uno, que era la de la Tierra.
"No hay tiempo que perder, subiré la gravedad a quince" dijo Gohan sin miedo y pulsó el botón para aumentar la gravedad dentro de la nave.
No pasó ni medio segundo cuando su cuerpo sintió las consecuencias, pero no fue suficiente como para tumbarle. Pese a esto, no era fácil.
"¡Bien! Comenzaré haciendo ejercicios para adaptar mi cuerpo" dijo Gohan comenzando a hacer sentadillas, "Uno... dos... tres... cuatro"