El Estado de los Demás y Reunión

Julio se encontraba en la ciudad donde salvó y vió a Juan Carlos por primera vez.

Actualmente se encontraba reuniendo zombies para hacerlos pelear entre sí y hacerlos evolucionar con mayor rapidez.

Gracias a que era un Rey Zombie había logrado reunir unos cuantos miles de zombies en menos de una semana.

Cuándo Juan Carlos le pidió que hiciera esto sintió curiosidad por saber porque estaba tan ansioso por esto. Era tan curioso que se lo preguntó directamente, pero a cambió solo recibía un 'Cuando sea el momento te lo diré'

Sabiendo que no obtendría una respuesta sin importar cuánto preguntara se retiró y comenzó a reunirlos en la ciudad.

Después de un mes había obtenido algunos resultados.

Cien zombies evolucionaron al nivel cuatro, de los cuáles uno había llegado al nivel cinco. El único Líder Zombie que había, lo estaba ayudando a mantener el control de los nuevos zombies que habían llegado.

Según la velocidad a la que subían de nivel dentro de otro mes habrían otros dos Líderes Zombie y más de doscientos en el nivel cuatro.

Mientras tanto en Ciudad del Sol, Sara y los chicos se encontraban registrando su cuota de caza mensual.

Era una cuota que todo residente de la base debía pagar por permanecer en ella. Era una especie de renta de vivienda.

Cada uno había juntado alrededor de siete núcleos de nivel cuatro, de los cuales entregaban tres y se quedaban con el resto. El pago mensual no era tan alto debido a que los núcleos de nivel cuatro no eran abundantes como los de nivel inferior.

Debido a que recientemente habían aparecido potencias de nivel seis la frecuencia de los núcleos inferiores no había aumentado tan drásticamente.

Si las cosas seguían a ese ritmo su frecuencia se duplicaría dentro de un año cómo mínimo. Para ese entonces ya debería estar apareciendo una primer potencia de nivel siete.

Por otro lado gracias a la batalla entre el Jefe de Base y el Rey Zombie los habían mantenido en custodia durante al menos cuatro días. Durante todo ese tiempo les hicieron preguntas por separado.

Después de todo gracias a los increíbles sentidos de la Jefa de Base supieron que el Rey Zombie los había estado siguiendo desde hace bastante tiempo.

Todos ellos se sorprendieron bastante, no podían creer que un Rey Zombie estuviera siguiéndolos todo el tiempo y aún así hubiesen sobrevivido. De hecho tampoco había atacado a la Jefa de Base a pesar de tener una gran oportunidad.

Su extraño comportamiento y el hecho de que los siguiera mantenía desconcertado al grupo. Eso hasta que recordaron como ese mismo zombie se había llevado a la pantera.

No sabían porque pero sus instintos les decían que tenían algo que ver entre sí. Lamentablemente no habían visto a la pantera desde hacía un mes y aunque lo vieran ahora, no sabían si podría responder sus dudas.

Después de todo era un animal mutado, a pesar de demostrar una gran inteligencia no debería ser capaz de comunicarse escribiendo. Opción que habían considerado para interrogarlo.

En cuánto a la Jefa de Base después de la batalla y cuando su adrenalina se redujo una inmensa ola de dolor la invadió. Gracias a que comprimió la energía de rayos dentro de su cuerpo, éste sufrió una gran presión.

Y el precio de utilizar la energía de esa manera era una inmensa cantidad de dolor e incapacidad para moverse, mientras que todo su cuerpo se llenaba de espantosas heridas por el daño. Gracias a que era una potencia en el nivel seis su regeneración era mucho mayor a la de un humano normal y su recuperación no tomó más de dos semanas.

Con esa experiencia uno pensaría que ella no volvería a usar de tal manera su poder, pero era todo lo contrario.

Al igual que Juan Carlos ella sintió los cambios en su cuerpo al comprimir la energía. Además debido a que la cantidad que ella comprimió fue alrededor de cinco veces más que la de Juan Carlos el efecto sobre su cuerpo fue mayor.

Desde el momento en qué pudo volver a moverse comenzó a comprimir la energía para aumentar su fuerza.

Debido a que podía atraer los rayos del cielo no necesitaba obtener núcleos para ello.

Lamentablemente para sus subordinados gracias a esa peculiaridad ella tenía muchas horas extra para hacerlo, lo cuál significaba más trabajo para ellos.

"Jefa"

Su asistente personal se paró en la entrada de la sala de entrenamiento mientras la llamaba.

Su nombre era Kyle, tenía el cabello oscuro, sus ojos emitían una agudeza que solo veteranos en combate tendrían y llevaba puestos lentes que resaltaban su apariencia seria. Iba vestido con ropa de oficina muy elegante.

A pesar de tener una gran presencia de alguna forma lograba ocultar a la perfección su vibra. Si lo demás llegarán a sentirla sería porque Kyle así lo quiso.

"¿Que sucede?"

"Uno de nuestros observadores detectó el movimiento masivo de una horda de ratas en el bosque hace unas horas."

Ante tal suceso ella abrió los ojos, se levantó y acercó a la salida.

"Sigue."

"Al menos una horda de mil ratas se movieron al mismo tiempo en dirección al éste hacia la ciudad vecina.

El observador fue tras la horda para obtener más información".

"Bien, llama a todos los Jefes Adjuntos para una reunión."

"Entendido"

Carla se dirigió a la sala de reuniones mientras Kyle informaba a los Jefes Adjuntos y Generales de División sobre el requerimiento de su presencia.

Poco después llegaron y tomaron sus lugares habituales. La base estaba conformada por la Jefa de Base, tres Líderes Adjuntos y cuatro Generales de División.

Los Jefes Adjuntos ayudaban a la Jefa de Base a mantener la gestión y protección de toda la base, todos se encontraban en el nivel cinco. Los Generales de División estaban encargados de administrar y entrenar el ejército, se encontraban en el nivel cuatro.

La población de la base era de ciento veinte mil, de los cuáles cuarenta mil eran del ejército. Al ser cuatro generales las divisiones tenían un máximo de diez mil miembros cada una.

Una vez todos estuvieron allí fijaron su vista en Carla esperando a que mencionara el tema central.