Cortejarlo de una manera adecuada

Saya se despertó con el sol dándole en el rostro, acostumbraba dormir con las cortinas descorridas, pero como se despertaba temprano nunca había despertado debido al sol, confundido a su alrededor, su boca se sintió seca y sus músculos se sentían un poco flojos, se talló los ojos y rutinariamente siguió su rutina.

Cuando bajaba las escaleras aún se sintió un poco aturdido, tal vez estaba un poco ebrio anoche, pero sus recuerdos eran borrosos, sus pasos hacían ruido en el pasillo solitario, aún no se acostumbraba a la soledad abrumadora de esa casa, de hecho, prefería un apartamento pequeño.

Quería llamar a Delia, pero se sintió avergonzado de gritar en esa casa, al llegar a la sala se encontró con Olivia bebiendo jugo mientras observaba la televisión, frete a ella había una bolsa con desayuno recién comprado

-Hola

Saludó Saya incomodo, el sol ya estaba bastante alto así que Erick habría salido a trabajar

-Buenos días- Olivia se puso de pie rápidamente y comenzó a poner los platos para el desayuno- el je… el señor Moore llevó a Delia al hospital, hoy yo seré quien le asista

- ¿Delia está bien? ¿Su pie sigue mal?

Saya sintió como el sueño restante se desvanecía, durante el tiempo que había estado en la casa, Delia había sido su única acompañante además de Erick así que sintió algo de afecto hacia ella. Olivia recordó el ligero cojeo de Delia por la mañana

-No debería ser grave

Saya suspiró aliviado. Fue a la cocina para traer la vajilla a pesar de la negativa de Olivia, en la barra se encontró con un espléndido desayuno, obviamente era la artesanía de Delia, a pesar de su pie lastimado parecía seguir haciendo el desayuno, una nota con los nombres de los platos y su ubicación estaba en el lugar más visible. Saya sonrió y llevo todo a la mesa en una bandeja como había visto hacer a Delia repetidas veces, había trabajado como mesero antes así que su postura era bastante natural.

Olivia experimenta al chico volver de la cocina con un desayuno completo, haciendo ver a sus panqueques recién comprados bastante deslucidos, la sonrisa de Olivia se volvió antinatural, "Por eso se quedó la vieja" farfulló en su corazón disgustada, esta oportunidad de compensar su mala imagen hacia el joven parecía que sería imposible de aprovechar, guardó la bolsa de comida y ayudó a acomodar los platos en la mesa, bajo la repetida insistencia de Saya también comieron juntos.

-Si estás aquí ¿Quién ayuda a Erick?

Pregunto Saya mientras comía despacio, Delia siempre cocinaba cosas deliciosas

-John también es bastante bueno. Si es solo unos días confió en que puede hacerlo bien

Respondió con naturalidad Olivia, disfrutando del desayuno que esa anciana cascarrabias había preparado

- ¿Cambió de secretaria? Espera… ¿Erick salió de viaje? ¿No fue al hospital?

Saya levantó la vista desconcertado. Olivia sonrió rígidamente

-Bueno, el je… el señor Moore se encontró con un contratiempo, puedo asistir… asistirlo… fui elegida como su asistente temporal, por favor no dude de mi profesionalismo- Hizo hincapié en la palabra temporal - el señor Moore acompañará a Delia por un tiempo

Saya sintió que la comida era menos sabrosa, suspiró algo apesadumbrado, tal vez no podría ver a Erick o Delia por un tiempo. "Aunque ayer dijo que cenaríamos en el jardín" Saya hizo un puchero, sus mejillas se inflaron dándole un lindo toque de infantilidad a su rostro, el instinto maternal de Olivia fue activado y quería darle unas palmaditas para calmar al chico, pero rápidamente retrajo su mano pecadora ¡Si hacía algo así podrían despedirla!

Así, Olivia acompañó a Saya a ver sus verduras, dieron un paseo en el invernadero, sirvió té mientras él leía, remplazando a Delia a la perfección.

Saya aún se sintió un poco perdido al no ver a la linda anciana a su alrededor.

Por otro lado, en el laboratorio, Erick se encontró en un cuarto hermético, sentado en una única silla de la habitación, trabajando como si no estuviese en celo. Afuera, tras el cristal, Leah estudiaba la concentración de hormonas en el aire

-Hay algo extraño, parece que su celo actual es más ligero que los anteriores, pero en la mañana era bastante agresivo

Recordó los músculos apretados y el ceño fruncido del alfa, no podías subestimar a Erick Moore, su tolerancia al dolor era casi inhumana, si algo podía hacer que mostrara un rostro doloroso debería ser algo grave, también había tomado la concentración de feromonas en ese momento y era comparable a sus celos anteriores aún bajo una gran cantidad de inhibidores, eso significaba que la magnitud de ese ciclo era al menos el doble de lo habitual.

-No podemos administrar inhibidores- Dijo Joseph limpiando el aire de la habitación por tercera vez, las muestras de sangre eran tomadas cerca de la glándula así que contenían un ligero rastro de feromonas- su cuerpo no durara más de dos años si sigue consumiéndolos como agua

Delia que había estado callada en un rincón le dirigió una mirada penetrante al médico, Joseph pareció sentir un escalofrió, pero lo ignoro, concentrándose en lo que traía entre manos

-Escuche que pueden controlar el celo con feromonas ¿No pueden hacer lo mismo? Entonces no debería que usar inhibidores

Preguntó Delia, Leah quería poner los ojos en blanco, si fuera fácil el alfa dentro de la habitación habría estado curado hace mucho tiempo, ese procedimiento era una marca falsa. Cuando un Omega queda marcado entonces solo su pareja podría verse afectado por sus feromonas, su celo se haría regular y sería menos intenso, los alfas no podrían quedar marcados, pero era posible simular una marca mediante procesos artificiales.

Ese había sido un tratamiento experimental propuesto por Joseph durante su universidad y en los últimos años el procedimiento se había popularizado

-Los experimentos no han sido alentadores, la familia Moore se compone de alfas, solo generaría una reacción violenta

Delia no esperaba una respuesta afirmativa, sabía que era una tontería, pero eso no evitaba que aún se sintiera impotente.

-Aún está ese omega- la voz de Leah tentó a Delia como un demonio- su cuerpo no rechaza las feromonas, es una lástima que el señor Moore se muestre reacio a proporcionarnos su ayuda para conseguirlo

El corazón de Delia se saltó un latido, pero no cambio su expresión, si no se equivocaba su joven amo tenía sentimientos por ese omega, recordó su recorrido por el laboratorio y se imaginó al joven con una mirada tonta siendo estudiado bajo el frío cuchillo de esas personas con batas seguido de una imagen de la sonrisa de su joven amo.

-Si es la voluntad del joven amo

Comentó a la ligera, pero hizo que el rostro de Leah se hundiera

-Creo que conseguir una muestra de sangre podría ser de ayuda

Ayudó Joseph a un lado.

-Si el joven amo lo aprueba conseguiré la muestra lo antes posible

La expresión de Leah decayó aún más y salió de la habitación de mal humor, Joseph solo hizo un sonido de asentimiento y siguió trabajando en silencio sin querer perseguir a su esposa.

En la habitación hermética Erick engancho los labios, si bien la habitación estaba insonorizada y el vidrio era de una sola dirección aún vigilaba con su celular las grabaciones de las cámaras escondidas, nunca confiaría del todo su vida a otra persona. La conversación de hacía unos momentos sonaba en su mente, tenía la sensación de que si era Saya su cuerpo no lo rechazaría, pero entonces… ¿Tendría que contarle su situación?

No involucrarlo, sacudió la cabeza ligeramente, incluso sin él podría una manera, quería quería cortar al omega de manera adecuada, no quería darle la impresión de que lo hacía por su enfermedad.

Ha estado lloviendo últimamente, así que decidi escribir un poco (A pesar de que no he terminado las tareas).

La universidad me ha quitado tiempo este último mes pero terminará en diciembre, así que al menos en diciembre las actualizaciones serán más regulares, gracias a quienes leen la historia.

Recuerden abrigarse y beber agua.

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