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Cap 103

Año ??? POV ??? Mundo ???

La ciudad era un desastre y el caos abundaba, la muerte llamaba la puerta de todos los presentes debido a la calamidad que descendía desde el cielo. Las madres lloraban a sus hijos en sus brazos, y los creyentes rogaban piedad.

Los edificios eran carcomidos por las llamas, del cielo lluvia ceniza que cubría todo el suelo.

Varios muertos adornaban el lugar, dándole una atmosfera lúgubre y tenue a la ciudad, nada comparado a su antiguo aspecto vivas y alegre.

Las estatuas estaban rotas, varias de ellas representaba un ángel con una espada que ardia en llamas.

En medio de todo este desastre, una hermosa mujer de pelo morado oscuro, casi como la obsidiana, sus ojos que eran del mismo color eran adornados por las lágrimas.

Acunado en sus brazos temblorosos, un hombre de edad avanzada de pelo canoso y ojos tristes.

La hermosa mujer podía sentir como el frío penetraba sus brazos, el hombre estaba muerto, debido a una gran herida en su cuello. La sangre todavía corría por la herida y caía lentamente sobre la mujer, ensuciando toda su ropa.

A ella no le importaba ese detalle, seguía abrazándolo con fuerza, intentando sentir el poco calor que quedaba.

El hombre en cuestión, era el padre de la mujer que lloraba desconsoladamente. Su muerte fue un duro golpe para ella, más cuando la muerte de su padre, fue causa de la batalla que tuvo con su hermana gemela.

Un gran arrepentimiento llenaba su corazón.

Si, todo este desastre fue causado por esta hermosa mujer, y su hermana gemela.

-"Hermana, estás feliz, ¿esto es lo que querías?, acaso la muerte de los retorcidos mortales incluía la de nuestro padre. El único crimen que cometió, fue apartarnos de nuestra madre, por temor a que fuéramos atacados, solo quería protegernos"

La madre de estas dos gemelas fue elegida para llevar una cruzada contra el mal y la injusticia. Pero con el tiempo, este deseo se volvía más fuerte, tanto que era en lo único que pensaba, por eso el padre de las gemelas decidió esconderlas, para que no sufrieran el mismo destino, no queria que siguieran el camino de su madre, y perdieran su humanidad.

Su hermana gemela permaneció en silencio, con su típica mirada aburrida, parecía que no sufría, que no importaba lo que había hecho, como si no fuera su culpa.

-"Responde hermana."

Grito la mujer, intentando sacar alguna relación de su gemela, lo más mínimo, algo que demostrara que estaba arrepentida de lo que hizo. Pero lo único que recibió, fue un aleteo de alas, su herma se marchó y la dejo sola con su padre muerto.

Eso la enfureció, y la obligo a creer que su hermana ya no los amaba. Que se había vuelto como su madre.

Hermana, te has vuelto como nuestra madre, ya no sientes nada, ya no amas ni sufres, que cruel destino, y todo es culpa de ella, por ceder su poder a nosotras, acaso no podía dejarnos en paz, y dejarnos vivir una vida tranquila. Pensó la mujer de cabello obsidiana, llena de pesar y odio hacia su madre, muy distinto de lo que pensaba su gemela, que solo buscaba la aprobación de su madre, y volver a verla, queria encontrarla.

Aunque en realidad, su gemela si estaba arrepentida de matar a su padre, ya que mientras volaba en el cielo, su gemela lloraba en silencio, solo sus lágrimas eran testigos de lo desolada y arrepentida que estaba, su gemela nunca deseo asesina a su padre, todo fue un accidente causado por su cruel batalla.

El padre de las gemelas intento detenerlos, y en ese intento lo logro, pero no como lo esperaba, lo único que detuvo la pelea de las gemelas, fue la muerte de este.

-"¡Hermana!, como puedes abandonarnos."

Grito, llena de odio, amargura y tristeza, recordando la promesa que hicieron cuando pequeñas.

-"Prometiste que nunca nos separaríamos, que siempre me cuidarías, que jamás me lastimarías, y míranos ahora, ya ni siquiera puedo reconocerte, desde el día en que esa espada cayó del cielo y la tomamos, nuestros caminos bifurcaron y nos separamos.

Sus palabras eran dolorosas y triste, ella no deseaba que nadie la escuchará, era su forma de liberar todo sus problemas, ella solo anhelaba decir lo que sentía.

Luego de enterrar a su padre, y darle una pequeña ceremonia.

Una vez terminado, ella intentó arrancar sus alas, que eran un doloroso recuerdo del pasado y del horrible poder que recibió.

Ella nunca anhelo ese poder, gracias a ese poder perdió a su madre, a su hermana, y ahora su padre, lo perdió de todo, por eso lo despreciaba.

Y a medida que pasaba el tiempo, la historia olvido a esta mujer, solo muy pocos la recordaban, algunos la llamaban la mujer del velo, otra la doncella del perdón, ya que perdonaba los pecados de los demás.

Estas dos gemelas eran iguales, bendecidas con el mismo poder, Justicia.

Pero el camino que forjaron era distinto, una creía en el perdón y la redención, que la justicia era más que solo castigar, era enmendar sus errores.

La otra gemela creía lo contrario, el pecado debía ser exterminado, los malos debían morir.

Y así es como el destino las separo, pero así mismo, el destino pretendía volver a juntar a estas dos gemelas problemáticas.

Solo el futuro puede saber como se comportaran cuando se reencuentren.

Y solo el futuro puede saber, que dolores de cabeza tendrá el hombre que tenga que mediar entre ambas.

(N. A. =Al principio de la historia conté otra cosa, ahora lo cambio, no afecta en nada, eso creo, existe posibilidad de ser editado.)

Pov Tercera persona - Cambio escenario

-"Ven y reclama mi cuello, y así ganarás el titulo de Héroe." Grito Atofe mientras golpeaba su cuello, como diciendo aquí estoy, la reina demonio tenía su confianza a tope.

León reía de buena gana, le parecía divertido la chica frente a él, para León solo era una hormiga con un gran regeneración y fuerza.

Ambos eran negligentes, y era porque son fuertes, y confían demasiados en su poder. Pero la verdad es que solo uno de ellos, tiene el poder para respaldar su confianza.

Atofe entrecerró los ojos, y exclamo con molestia:

-"¡Pareces muy relajado!, demasiado diría yo..., ¿acaso estás mirándome en menos?, ¿¡crees que no soy digna de que luches en serio?!"

Atofe observo la postura de León, y se molestó severamente, ella nuca había visto alguien tan descuidado y con tanto exceso de confianza.

La estrecha sala del trono sé oscureció levemente, y el ambiente se volvió pesado.

Los guardias de Atofe tragaban y sudaban a balas, hace mucho no veían a su jefa tan molesta, todos sabían que Atofe odiaba ser mirada en menos y que la despreciaran.

Atofe no espero la respuesta de León, apretó la empuñadura de su espada, se inclinó levemente sobre sus rodillas, y pateo el suelo con fuerza, dejando una gran cicatriz en el suelo, demostrado lo fuerte del golpe.

Se lanzó como una bala de cañón, la chica era rápida y fuerte, el viento acompañaba su movimiento haciendo que el fuego de las velas se agitara.

Levantó su espada sobre su cabeza y cuando solo estaba a un metro de León, lanzo un corte vertical.

León levantó el brazo y detuvo la espada, fue tan suave y preciso que no hubo sonido, su postura ni siquiera tambaleo debido a la fuerza, el único testigo de la fuerza era el piso, que fue destrozado debido a la fuerza cinética.

Atofe se estabilizó con sus pies en el suelo.

-"¡Tienes una mano dura y poderosa!" Rugió Atofe, ahora más contenta, su oponente tenía la fuerza para respaldar su confianza, y eso le gustaba, amaba las batallas.

León agarró su entrepierna y dijo con un tono vulgar:

-"¡Jeee!, y eso que no has visto lo que tengo dentro del pantalón"

-"Se ve prometedor, ¡muéstralo!" Dijo Atofe toda inocente, ignorando que su contrincante era un pervertido.

-"jajajaja, es nuestra primera cita y ya quieres verlo, ¡qué mujer más directa!, me gusta"

Las guardias que solo observaban, no sabían si reír o llorar, nunca antes vieron a alguien tan vulgar.

Atofe intento alejarse, pero su espada era sujetada con fuerza.

No tuvo más remedio que soltarla y girar su cintura mientras levantaba su pierna para dar una patada giratoria a la cabeza de León.

Leon no se puso nervioso, dejo la espada de lado y se inclino para esquivar la patada que rozo su cabello,

Mientras hacia eso, ajusto su postura y apareció frente a Atofe, su mano derecha se volvió borrosa por un segundo.

Atofe no supo como, pero estaba volando directamente hasta el techo. León le había dado un puñetazo en la barbilla.

"Booooommm" Como un meteoro impacto el techo, y lo atravesó, la mitad de su cuerpo quedo expuesto, la otra mitad estaba aplastada dentro del agujero.

Los guardias quedaron con la boca abierta, nunca antes vieron a su ama volar por los cielos.

León giró su cabeza y observo a los guardias, y pensó que no valían la pena, ya que entre ellos no había ni una sola mujer hermosa, así que decidió descartarlos.

Sus manos se juntaron y una pequeña onda se expandió, con él cómo centro. Todo se volvió gris, como si el tiempo se hubiera detenido, y así aprecia ser, los guardias de Atofe estaban quietos y su expresión no cambiaba, las velas que adornaban el lugar parecían pinturas.

Luego, León aplaudió y otra onda se generó.

Cuando la onda toco a los guardias, esto comenzaron a desaparecer. León los envió a otra dimensión, a la de StarCraft, al mundo donde viven sus mascotas Zerg.

Eran inmortales, así que serian buena comida para sus mascotas, o eso pensó León. Lástima para los guardias, serian comida y luego desecho de monstruos intergalácticos, y con su inmortalidad esto duraría mucho tiempo.

León ya había dominado el viaje dimensional, y no necesitaba ayuda de VIP(su sistema) para hacerlo, pero si necesitaba ayuda para detener el tiempo, o sea, León si podía controlar el tiempo, pero no en una dimensión completa, eso era más complejo.

Además, a pesar de que puede viajar por las dimensiones, León no puede viajar a mundos de animes, o novelas, ya que no conocía su ubicación, todavía dependía de VIP para eso.

De vuelta a la batalla.

Desde el techo comenzaron caer pequeños escombros.

Atofe intentaba salir, sus dos manos se apoyaron contra el techo, y comenzó a pujar, logrando con éxito su objtivo. Ya en el suelo, Atofe se sacudió como un perro, sacando todo el polvo y los escombros que quedaron sobre ella.

-"fufufufu, ¡maravilloso!, humano, eres digno de mis elogios, una vez que te derrote, trabajaras para mí, fufufufu"

Este hombre es fuerte, y digno de estar bajo de mí, ¡lo quiero!. Pensó Atofe.

Atofe agarro su espada del suelo, sus músculos se hincharon hasta que sus venas eran visibles. Nuevamente pateo el suelo y se lanzó contra León. Con un buen juego de piernas y cadera, León la esquivo con facilidad.

León tenía la fuerza de un bárbaro, la agilidad de un asesino y la defensa de un paladín, no tenía rival en combate cuerpo a cuerpo.

Atofe se dio media vuelta y durante el vuelo ajusto su postura, sus pies tocaron el suelo y se detuvo a solo medio metro de León, y con una fuerza bestia balanceo su espada de manera oblicua.

León admiró la capacidad de lucha de Atofe, y sonrió con picardía, mientras preparaba su siguiente movimiento.

El golpe era potente e iba dirigido a su cuello, Atofe era idiota, pero una cabeza de músculo, tenía buenos instintos y sabía como pelear.

Este chico es fuerte, dudo que muera si lo golpeo en el cuello, a los más se va a dormir, fufufufufufu, es genial, hace mucho no sentía este deseo de batalla, espero pueda durar, fufufufuf Pensó Atofe extasiada.

La espada estaba a unos centímetros de su cuello, y León todavía estaba quieto. Atofe sonrió, pensado que era su victoria, y cuando estuvo a punto de rozar su piel, León desapareció y volvió a aparecer debajo de Atofe.

Como si fuera Rock Lee, León dio una fuerte patada en la barbilla de Atofe, esta volo unos metros en el aire.

Atofe pudo sentir como su cerebro rebotaba y sus dientes eran destrozados, pero no soltó la espada, cuando estaba a mitad del vuelo, Atofe uso sus alas para detener el vuelo, y contraatacar a León.

Pero León era más rápido, volvió a desaparecer y aparecer sobre ella, sus dos manos se juntaron, sus dedos se entrelazaron, y con un fuerte movimiento hacia abajo, golpeo la cabeza de Atofe, destrozando su cráneo, cerebro, y columna vertebral.

"¡Boooomm!" Atofe golpeo fuertemente contra el suelo, creando un gran cráter de casi 10 veces su tamaño.

León apareció al lado de Atofe, y frunció el ceño mientras se cruzaba de brazos.

Atofe no tenía forma, sus piernas estaban doblados en sentidos imposibles, sus brazos que intentaron amortiguar el golpe eran pulpa de carne, a eso agrégale que su sangre formo un gran charco. Parecía sopa de Atofe, León esperaba que no muriera, y que pudiera regenerarse.

Suerte para él, la carne de Atofe volvía a juntarse y a recuperar su forma, le tomo varios segundos volver a su forma orinal.

-"fufufufufu, eso dolió, sin duda el humano más fuerte y digno, ¡es más!, ¡desde hoy te nombro héroe y el humano más fuerte!, fufufufufu"

Atofe no estaba enojada, ella estaba ardiendo de felicidad y de deseo de batalla, en su vida había recibido tal paliza, y lo mejor, es que su oponente se contenía.

Atofe inclino la cabeza, y ajusto su espada sobre su hombro, miro a León que parecía muy serio, y pregunto:

-"¿Impactado por las noticias?"

León no respondió, porque estaba mirando el cuerpo casi desnudo de Atofe. Su armadura fue destruida por el golpe, dejando al descubierto sus enormes pechos, eran más grandes de lo que pensó, y eso lo alegro.

La armadura y la ropa debajo de esta apretó el pecho de Atofe, no dejándolo mostrar su máximo esplendor, pero ahora, estaban libres y expuesto para que León los admire.

Eran redondos y gordos. Y se agitaban gracias a que Atofe no se quedaba quieta, eran el tipo de pecho que desafiaba la gravedad, además su piel morada le daba cierto encanto misterioso, y lo mejor eran sus gruesos pezones, que tenían una aureola con forma de corazón.

-"¡Vamos héroe!, muéstrame todo tu poder, y se dignó de tu título."

Atofe como la cabeza de músculo que era, volvió a lanzarse contra León, con un gran impulso. León apretó su puño y golpeo la espada que se acercaba a él, "¡crack!", la espada no aguanto el golpe y exploto en cientos de pedazos.

-"¡Im-imposible!" Grito Atofe anonadada.

Nunca pensó que su espada, su preciada espada se rompería por un puño desnudo, Atofe se asombró de muy mala manera.

-"Deja la espada, y ven con los puños, ¡no seas cobarde!" Se burló León.

Esta reina demonio es fácil de controlar, es demasiado emocional. Pensó León.

Atofe rugió como una bestia, sus ojos eran feroces. Su espada era una reliquia y lucho muchas batallas con ella, era como su amiga inseparable.

Atofe se puso en cuatro patas y corrió como una bestia, usando su cuerno para penetrar el abdomen de León. León solo lo agarro y la detuvo, las uñas de Atofe marcaban el suelo, debido a la fuerza que ejercía.

Leon que agarraba el cuerno, levanto su rodilla y le golpeo el plexo solar, viendo que no se rendía, volvió a golpear una y otra vez.

-"fufufu, ¡eso es todo héroe!" Atofe se reía como loca, mientras grandes cantidades de sangre salía de su boca y nariz. Sus órganos internos estaban siendo destrozados.

Pero no ser rindió, Atofe abrazo el abdomen de León y lo sujeto con fuerza, lo levanto y con un giro brusco lo lanzo contra el piso.

"Booomm" León golpeo el piso con su cabeza, tuvo que admitir que fue un buen movimiento de luchar libre.

-"Con eso debería dormir un..."

Atofe que estaba de pie con su torso desnudo, vio a un León ileso frente a ella, como si nada hubiera pasado, solo pudo abrir y cerrar la boca un momento.

¡Que tipo mas duro! grito internamente

-"¿Eso es todo?" Dijo León con desinterés.

-"¡Recién empiezo!" Atofe no se dejaría intimidar tan fácil.

Atofe uso toda su experiencia, postura, brazos, caderas, y fuerza concentrada, puso todo lo que tenía en el siguiente puñetazo."¡Puummmm!" León recibió el golpe de lleno en el pecho, el aire en sus pulmones desapareció y salió expulsado como una bala.

León se descuidó un poco, por eso recibió el golpe.

Antes de chocar contra el muro, León ajusto su postura en el aire, y en vez de chocar con su cuerpo, León amortiguo el golpe con sus pies y rodillas. El muro quedo intacto, un hecho increíble, considerado con la fuerza que fue mandado a volar.

El puño de León brillo, varias habilidades se comenzaron a juntar, ahínco, porrazo, sacrifico, etc, todas habilidades que aumentan el daño. León, que seguía parado en la pared como ninja de Naruto, dio una mirada desafiante a Atofe, y no defraudo, Atofe levanto su dos brazos y los cruzo sobre su pecho, estaba lista para el desafío y recibir el golpe de frente.

Que es este sentimiento, mi cuerpo se entumece y mi bello se eriza, un escalofrío recorre mi cuerpo..., ¡pero me gusta!, ¡qué sentimiento más agradable y complejo!, sé que podría morir, pero todavía quiero recibir ese golpe, fufufufu, ¡siento que mi inmortalidad está en juego!. Pensó Atofe, llena de felicidad, miedo, anticipación, y un poco de lujuria escondida.

"Fiiusssss" León que ignoraba los pensamientos internos de Atofe, se impulsó con una patada en la pared, y acorto los 20 metros que lo separaban de Atofe en un milisegundo.

Atofe que veía como el puño se acercaba a ella en cámara lenta, sintió que toda su vida pasaba en un segundo, pero a pesar del miedo, no dudo en sonreír ferozmente y rugir con todas sus fuerzas.

Aumento toda la defensa en sus brazos con Touki, y reforzo sus pies para no salir volando.

Nada de eso sirvió, cuando Atofe recibió el puñetazo serio de León, exploto en cientos de pedazos pequeños, no suficiente con esto, el puño era tan potente que genero una ráfaga de aire caliente que evaporizo todos estos pedazos, Atofe fue borrada de la faz de la tierra.

Atofe era un rey demonio inmortal, y claro esta que no moriría, e incluso podría resucitar.

León preparó un jugo con pajita, y comenzó a beberlo como si estuviera en un parque, esperando que Atofe se volviera a regenerar, aunque ahora sería más difícil, ya que su cuerpo era polvo.

Minutos después.

Una hermosa reina demonio inmortal, estaba desnuda frente a León, toda su ropa desapareció debido al puñetazo serio de León.

-"¡Bien hecho héroe!, superaste mis expectativas a pesar de ser solo un humano, sin duda los humanos son algo a lo que se debe temer, son perseverantes y superan todo, a pesar de ser tan débiles, nuca dejan de sorprenderme."

Atofe era muy seria, y tenía una inteligencia nunca antes vista, haciendo que León se preguntara si Atofe solo fingía ser idiota.

-"Estás desnuda, ¿eres exhibicionista?" Pregunto León, mirando el pelo de Atofe, que tapaba uno de sus pechos. La mujer tenía una figura de reloj de arena, que era bien ocultada por su armadura.

Atofe levanto su mano y golpeo su pecho, haciendo que sus tetas ondularan. Y dijo:

-"Fufufu, en el campo de batalla nunca importa eso, lo único que importa es la victoria"

-"Pero perdiste."

Atofe se quedó quieta, mirando la nada, pasaron 5 minutos, y volvió en sí.

-"Ah, cierto."

Leon suspiro, seguir el ritmo de Atofe era difícil, pero divertido.

A la reina demonio no le importaba su desnudez, muchas veces perdió parte de su armadura y su cuerpo quedo expuesto, tantas que ya perdió la cuenta. Para los luchadores eso no importaba, cuando luchas a muerte no interesa si la otra parte te muestra sus pechos, solo importa ganar y salir vivo.

Solo un pervertido se fijaría en la desnudez de una mujer durante la batalla, en especial cuando solo un segundo puede significar tu vida o tu muerte.

-"Deja de llamarme héroe, con León bastará"

Atofe levanto el pulgar y rio con ganas.

-"Fufufufu, Está bien, León, y..." Atofe se quedó mirando a su alrededor y noto que no había nadie más, y volvió a mirar a León, pero solo miro y no dijo nada.

León suspiró, otra vez y pregunto:

-"¿Querías preguntas por tus guardias?"

-"Si, eso mismo" Dijo Atofe, mientras se inclinaba un poco y se apoyaba contra su espada.

-"Ellos son comida para mis mascotas, un precio a pagar por tu derrota, espero no te moleste."

Atofe movía su trasero de un lado a otro, no estaba preocupado por sus guardias, mientras tuvieran contrato con ella no morirían. Lo que no sabía, era que no morir, era una maldición para ellos.

-"No, pero debes devolverlos, alguien tiene que cuidar del castillo."

Leon camino y se puso al lado de Atofe, mirando sus deliciosas curvas, y su pose que solo acentuaba su gran trasero.

-"Ahora..., es momento de tomar mi premio"

-"¿Premio?, si quieres algo más además de título, pídelo y te lo daré."

-"Quiero tu cuerpo"

-"Que extraño pedido, diré esto por si no lo sabes, pero comer mi sangre no hará que ganes mi inmortalidad" Dijo Atofe, mientras fruncía el labio.

-"jajajaa, sí que eres idiota, lo que deseos es…, como decirlo para que lo entiendas, ah eso, quiero hacer bebes, ¿comprendes?"

-"Imposible, esta reina demonio es casada"

Atofe no sentía nada por su antiguo esposo, ella se casó solo porque perdió, y prometió casarse si lo hacía, pero no sentir nada, no significa que no lo respetara, ella era fiel a su palabra, y cumpliría su trato a cabalidad.

-"Eres viuda, ya no debes respetar a tu esposo, ya murió..., y no, no estoy pidiendo tu opinión o tu autorización, ¡eres mía y no puedes negarte!" Dijo León, con una sonrisa retorcida y posesiva.

-"Fufufufu, si quieres obligar a esta, tendrás que derrotarme otra vez." Atofe agarro su espada, y tomo una postura de batalla." Dijo Atofe, que sintió un escalofrío en su espalda.

-"Fácil."

León apareció detrás de Atofe, su mano formo una garra y le atravesó la espalda, agarro su columna vertebral y se la quito.

-"¿Decías?" Dijo León, que tenía en su mano una columna vertebral cubierta de sangre morada.

Atofe cayó como una marioneta que le cortan los hilos, su cuerpo no respondía a su llamado y no podía sentir nada, solo sus ojos y boca. Los segundos pasaron y Atofe entro en pánico, su cuerpo no se regeneraba, y su maná desaparecía.

-"Q-que has hecho, mi cuerpo no se regenera, y mi mana..., ¡tu!, ¡acaso quieres matarme!, ¿¡Perugius fue quien te mando?!, no recuerda el trato que hicimos, ¡dice que nunca intentaríamos matarnos!, ¡ve y dile a ese cobarde que venga y lo haga el mismo!"

Atofe no paraba de gritar, y de maldecir a Perugius, ella pensaba que leon fue enviado por el.

-"No, no soy el perro de nadie, y no recibo ordenes de nadie, lo que acabo de hacer, es sellar tu inmortalidad, y ahora, transformaré tu cuerpo al de una pervertida, jejeje"

-"Imposible, nadie puede hacer eso humano, ¡ahora libérame y déjame darte una paliza!, y estaremos a mano" Lloriqueo Atofe, todavía en el suelo.

-"No entres en pánico, solo pienso divertirme un poco, y creo que te gustara con el tiempo, tienes cierta vibra de ser masoquista, y creo que lo eres, pronto lo descubriremos, ahora, vámonos."

Un soplo de viento y León desapareció junto a Atofe, dejando la sala del trono vacía, y toda destrozada debido a su batalla.

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