CAPÍTULO 15- Niños abandonados. (Inicio del arco: "La reina loca.")
Sei Molfer. Es conocida por sus métodos de tortura y sus dolorosos interrogatorios. Ella se encarga de entrenar a las guardias y guerreras.
Sus entrenamientos son dolorosos y complicados. La mayoría no soporta el entrenamiento y se rinde.
Ella odia a los débiles, no los soporta.
Ella también entrena a sus hijos. Sus hijos mayores no soportaron el entrenamiento y se rindieron casi inmediatamente. Kei y Mei fueron los únicos que soportaron su entrenamiento infernal. Ella tenía grandes esperanzas en ellos, así que aumentó el grado de dificultad.
Sei Molfer es una mujer loca y sádica. La mayoría de las personas le tienen miedo y respeto.
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Tiempo atrás.
—¡Madre, ya sabía que estabas loca, pero esto es demasiado!
—¡No nos dejes aquí!
Kei y Mei, de 5 años, están amarrados y acostados en el suelo.
Están en la isla "Kinga", una de las islas más peligrosas del mundo.
Sei Molfer los amarró y tiene planeado dejarlos aquí.
Detrás de ella, hay un barco.
—No sean llorones, solo estarán aquí por un mes. Mi madre me dejó aquí a los 5 años también y pasé la prueba. Si yo pude, ustedes también podrán.
—¡¿Por qué nuestra madre y nuestra abuela son unas locas?!
—¡Madre, al menos déjanos navajas y papel de baño!
—No. Espero que sobrevivan.
Salta y sube al barco.
—Buena suerte, hijos.
—¡Maldita loca!
—¡Si sobrevivo, te golpearé!
—Son muy maduros a pesar de su corta edad, estoy segura de que sobrevivirán… Supongo.
—¡¿Supones?!- Dijeron los dos enojados.
El barco comienza a moverse y Kei logra liberarse.
—¡Espero que te ataque un tiburón gigante!
Kei libera a Mei.
—Un mes… Debemos sobrevivir… ¡Maldita loca! ¡¿Qué clase de mujer deja a sus propios hijos en una isla peligrosa y por un mes?!
Sei Molfer es esa clase de mujer. Loca y extremista.
—Hermano, ¿qué hacemos?
—Lo primero que debemos hacer es buscar comida y construir un refugio… Espero que los monstruos sean débiles.
Un enorme duende de 3 metros se acerca a ellos. Tiene enormes músculos y… enormes pechos… Es una mujer duende.
—Niño… lindo…
Se para frente a ellos.
Kei y Mei levantan la mirada nerviosos.
—Una reina duende…
—H-hermano, escapa. Si te atrapa, te va a violar. Yo pelearé con ella.
—¡Es cierto! ¡No existen duendes hombres! ¡Y los duendes de este mundo violan hombres! ¡Debo usar "eso" rápido!- Pensó asustado.
La reina duende intenta capturarlo y Kei sonríe.
—Hola, linda.
La reina duende se sonroja y se detiene.
Mei queda en shock por esas palabras. Ella está realmente confundida. ¿Por qué le dijo linda a una reina duende?
—¡¿P-por qué le dices linda?!
—Mei, guarda este secreto. Yo puedo domesticar monstruos… Confía en mí.
Obviamente, Kei activó su habilidad "Seducir mujeres" para conquistar el corazón de la reina duende.
—Bien… ¿Podrías llevarnos a un lugar seguro?
En la isla hay pequeñas montañas y un enorme bosque. Las únicas opciones de refugio son: Construir una casa en un árbol, para evitar a los monstruos mientras duermen. Acampar en la cima de una montaña. O buscar una cueva.
—Lugar… seguro.
Ella se aleja caminando y Kei la sigue.
Mei duda un poco, pero decide seguir a Kei.
—¿N-no nos atacará?
—No. Si no la atacamos, no nos atacará.
Eso es cierto. Las mujeres que se enamoren de Kei no podrán hacerle daño y harán lo que sea para que Kei sea feliz.
—Esta habilidad es muy útil… Y funciona mejor con monstruos… Podremos sobrevivir.- Pensó Kei.
Kei y Mei sobrevivieron gracias a la ayuda de los duendes que viven en la isla. La reina duende evitó que los duendes atacaran a Kei.
Lograron sobrevivir sin problemas y aprendieron las debilidades de los monstruos mientras estaban ahí. Para Kei, esa experiencia fue bastante buena para él.