Capítulo 244 - Es hora de hablar

El hombre era alto y atractivo. Su sola presencia atrajo la atención de todos. A contraluz, caminó hacia el hall con el rostro inexpresivo. Vestido formalmente, lucía distante y frío. Sin embargo, en cuanto Su Qianci lo vio, ella sintió que algo le nacía en el corazón. Con un sentimiento agridulce, salió corriendo hacia él inmediatamente.

Al verla, la mirada de Li Sicheng se volvió algo más dulce, mientras abría los brazos. Con un apasionado abrazo, su frialdad desapareció. Su Qianci lo rodeó con los brazos y mencionó, alegre:

—¡Has vuelto!

—Así es —respondió con una voz profunda y dulce, como la música del mejor chelo.

Su Qianci le miró la cara. Li Sicheng parecía muy cansado y tenía ojeras. Después de pasar solo unos días en Estados Unidos, su cara parecía aún más delgada. Debió haber perdido mucho peso. Su Qianci sintió lástima por él y le tocó la cara con los dedos:

—Debes estar cansado.

Li Sicheng le agarró la mano y la besó.