La pantalla que mostraba el atractivo rostro de Li Sicheng se oscureció de repente. En la sala, donde se habían apagado las luces, se volvió misteriosa. Todos miraron a la pantalla y un grito repentino sonó a través de los altavoces. Todos se sorprendieron puesto que nadie esperaba algo así. Sin embargo, Tang Mengying, parecía cada vez más satisfecha. Miró la cara de terror de Su Qianci y, sacando un dedo y luego poniéndolo hacia abajo, gesticuló:
—Vete al infierno.
Viendo su mirada de seguridad, Su Qianci sintió pena. En algún momento, sonrió a la mirada triunfante de Tang Mengying. Había sarcasmo y puro odio en su sonrisa. La mirada de Su Qianci era muy fría. Tang Mengying sintió de repente que un escalofrío le recorría la espina dorsal.
"Chica arrogante, veremos qué haces después de ver el video".
Unterstützen Sie Ihre Lieblingsautoren und -übersetzer bei webnovel.com