Capítulo 24 - Veneno (2)

Jun Wu Xie comenzó a examinar sus piernas mientras ella aplicaba presión en algunas áreas.

—¿No eres capaz de sentir nada en absoluto?

—Ocasionalmente, algunos escalofríos, pero no muy fuertes —respondió.

Ella continuó examinando sus piernas y finalmente, después de un tiempo, levantó la vista y preguntó:

—Tío, ¿confías en mí? —Ella preguntó con calma.

—¡Por supuesto! —Él le sonrió cálidamente.

Jun Wu Xie miró a su alrededor y su mirada se posó en el estanque de lotos, mientras sus ojos destellaban un rastro de emoción.

—Estas flores de loto son tan hermosas, toma un momento este loto florecido. Hmm... Me pregunto si a tío le gusta comer semillas de loto —ella preguntó casualmente.

Jun Qing pensó rápidamente y respondió:

—Los como de vez en cuando.

—¡Acabo de recoger algunas ayer y pensé que sabían muy bien! ¿Te gustaría probar algunas también? —Ella preguntó de nuevo en un tono casual.

—Por supuesto que lo haría, ha sido escogido por ti —aceptó felizmente.

Su propia pequeña sobrina era ahora tan sensible. Si lo hubiera sido antes, incluso si alguna vez recogiera alguna semilla de loto, ¡la primera persona a la que se la daría sería a Mo Xuan Fei!

—Tío, abre la boca —agregó.

Jun Qing estaba sorprendido, aunque él no sabía lo que estaba haciendo, pero como un tío cariñoso, todo lo que quería era que su sobrina fuera feliz, así que la escuchó y obedientemente abrió la boca.

Tan pronto como hizo eso, Jun Wu Xie inmediatamente arrojó la semilla de loto en su boca y, antes de que pudiera reaccionar, ella cerró la boca e inclinó su cabeza hacia arriba, lo que lo obligó a tragarlo.

-... ...—De su método de "alimentación suave", casi se ahoga en lágrimas.

Justo cuando él pensó que finalmente se estaba volviendo más sensible, la forma en que hacía las cosas era todavía un poco... bruta.

No se puede culpar a Jun Wu Xie por el método tosco de dar la medicina. Es solo que nunca estuvo en sus genes para empezar. Con respecto a los pacientes que se negaron a tomar los medicamentos, ella siempre tuvo un solo pensamiento: que el paciente lo tomara y su método era bruto pero efectivo sin espacio para la oposición.

—¿No es delicioso? —Ella pregunto

Jun Qing la miró con una expresión de asombro. ¡Ella simplemente lo empujó por su garganta! ¿Cuándo se dio el lujo de probarlo?

—Mmm... Delicioso —la convenció.

—Entonces me iré primero —después de hacer lo que buscaba, ella regresó a su patio.

Jun Qing lo miró fijamente a la espalda, sintiéndose un poco desconcertado. ¿Esta niña vino hasta aquí y después de hablar tanto, fue simplemente para darle una semilla de loto?

—El cuerpo del Maestro todavía tiene algunos restos de veneno, ya que la semilla de loto es de naturaleza refrescante, ¿te gustaría que preparara un tazón de sopa de jengibre para calentarte? —El "sirviente" que había estado detrás de él durante todo esto, rompió el silencio. Si uno miraba de cerca, este hombre tenía una estatura alta y robusta, con su expresión serena, uno pensaría que no se parecía en nada a un sirviente.

Jun Qing levantó las manos.

—No hay necesidad de hacer un gran escándalo por una sola semilla de loto. No soy tan débil.

Ese hombre ya no siguió y expresó sus pensamientos en voz alta.

—La Pequeña Señorita parece un poco diferente últimamente.

Desde que Jun Qing se lesionó, había estado cuidándolo durante más de una década y había visto crecer a Jun Wu Xie. Él nunca tuvo una buena impresión de ella debido a su naturaleza elevada y arrogante, por lo que ni siquiera se molestó en saludarla cuando la vio.

—¿Tú también lo crees? —Los labios de Jun Qing se curvaron hacia arriba mientras pensaba profundamente. Con un rastro de nostalgia, él dijo distraídamente —: Verla ahora me recuerda algo a mi hermano.

—Por favor no bromees, algunas cosas no pueden ser comparadas —ese hombre frunció el ceño cuando respondió con severidad, no parecía estar de acuerdo con las palabras de Jun Qing.