La lluvia continuaba cayendo, pero el horizonte ya no era negro. La luz de la luna se podía ver a través de las nubes, y a lo lejos, el brillo del sol de la mañana se hacía visible. La noche comenzaba a desvanecerse, y la luz del sol se acercaba.
Cuando el sol reemplazó a la luna, la lluvia cayó y Meng Hao siguió adelante. Su expresión era tranquila, como si nada hubiera pasado. Este día lluvioso le hizo pensar en la nieve en el estado de Zhao.
No estaba seguro exactamente dónde estaba dentro del Dominio del Sur. Lo único que podía ver era una cordillera que se extendía en la distancia. Su única compañía era la lluvia que caía y el viento frío.
Su batalla con Zhou Jie había confirmado la destreza en la batalla de sus cinco Pilares Dao. ¡Definitivamente podría reprimir Dao Childs, el más poderoso paso de la etapa de Establecimiento de Fundación!
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