—Deja de desperdiciar el tiempo, ¿sí? ¿Beberemos o no?
Jiang Xiaowei fulminó con la mirada a Wei Liao.
—No es problema, no me importa porque no perderé.
Wei Liao había bebido en las buenas y en las malas. Cuando era un joven adolescente, él y Su Yu ya empezaron a robar el alcohol de sus padres. Él era invencible ante el alcohol. Un litro de baijiu no era nada para él. ¿Qué era un litro? ¿Cómo seis o siete vasos?
Además, Jiang Xiaowei ya estaba tan ebria que pronto caería. Aunque él no planeaba hacerle nada a Jiang Xiaowei, quería dominar su arrogancia. Ya que ella de por sí había bebido mucho, Wei Liao decidió que el bebería dos vasos por cada vaso que ella bebiera.
Jiang Xiaowei era una persona muy directa, ella instantáneamente tomó un vaso de baijiu y lo bebió todo de un trago. Entonces, agitó el vaso vacío en su mano, intentando provocarlo. Wei Liao no dudó e inmediatamente bebió dos vasos.
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