—Cual de tus ojos te dijo que me gustaba, de verdad.
Lingling aún mantenía la misma actitud, estaba en negación.
—Lingling.
—¿Qué?
—¿Cómo puedo ponerlo? La broma sigue siendo una broma, pero como tu mejor amiga, debo decirte las cosas —respondió Huo Mian en total seriedad.
—Dime.
—En nuestra vida, uno no siempre tiene la oportunidad de conocer a alguien que los quiera también. Si conoces a alguien así, ¿cuán trágico sería perder esa oportunidad al final por razones triviales? Si aceptas esta relación, aún si al final no terminan juntos, no te arrepentirás de nada, porque ya lo experimentaste. Cuando seas vieja, no te arrepentirás de haber salido con alguien, si no, de no haberlo hecho.
—Mian... —Ante una Huo Mian tan seria, Zhu Lingling repentinamente no supo qué decir.
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