Cap. 29 Conexión con el pasado.

Era una tarde después de finalizar las clases y las espíritus se habían ido a su casa, mientras que Shidou en su casa preparaba la cena y Kotori miraba la televisión.

-Mmm… es la tercera vez ¿no? –Kotori sonaba visiblemente molesta y miraba el reloj de la sala.

-Sí, así es. –Shidou respondió un poco triste mientras seguía haciendo la cena, entonces la puerta de la casa se abrió y entraron las gemelas Yamai, ellas caminaban tranquilamente hacia sus respectivos asientos en el comedor.

-Lo sé, Yuzuru, debo estudiar más para los exámenes, pero le pediré un poco de ayuda a Shidou o a Hikari cuando vuelva.

-Comentario. Si lo vemos hoy. –Las gemelas sonaban tristes, lo cual era raro viniendo de ellas.

-¿H-Hikari-san tampoco vino hoy? –Detrás de las Yamai entró Yoshino, ella igual se veía triste.

-¡Oh, por favor, es ya son tres días seguidos! –Tohka, que entró detrás de Yoshino y seguida por el resto de las espíritus, se veía un poco molesta, aunque también era porque ella también necesitaba algo de asesoramiento en los estudios.

-Lo sé, no sé lo que está pensado Hikari… pero cuando lo vea… me va a escuchar. -Kotori se veía muy molesta y nadie quería pensar en lo que le diría a Hikari.

-Pero él viene en las noches, yo dejo un plato en la cocina en las noches y al amanecer el plato está vacío y lavado.

-Pregunta. ¿Solo viene a comer? Ni siquiera nos saluda.

Entonces la pantalla del televisor se puso negra y luego Diva apareció en la pantalla saludando con las manos.

-¡Hola!

-¡Diva! –Las chicas corrieron al sofá de la sala mientras Diva aún saludaba mientras sonreía.

-¡Hola a todos! ¿Cómo están? Bueno, llamaba para contarles que Hikari apareció caminando en los barrios bajos de la ciudad, ya saben esos sectores peligrosos, aunque aún no sabemos lo que hace ahí, Haruka fue a investigar. –La noticia sentaba como vaso de agua fría en verano, aunque todos se veían visiblemente molestos, en el fondo les preocupaba que Hikari no les dijera lo que pasaba y desapareciera así.

-¡Qué alivio! Pensé que nuevamente nos ocultaba algo…

-Tohka-san… creo que aún nos está ocultando algo y por eso no ha venido. –Nia sonreía de forma un poco forzada para no hacer sentir mal a Tohka, lo cual funcionó porque ella simplemente respondió asintiendo.

Mientras, en un barrio abandonado, Hikari caminaba por las calles visiblemente vacías, aunque como era de esperar de ese tipo de lugares, muchas personas lo observaban dentro de las sombras.

-"Hikari, creo que estamos perdiendo tiempo, ¿no deberíamos buscar a ese tal Bruma por los métodos convencionales?" –BB tenía un calar psíquico con Hikari, todo lo que ella decía se transfería directamente a la mente de Hikari, es más fácil comunicarse con la mente.

-"Los métodos convencionales no funcionarán, han pasado muchos días y no sabemos nada de él, Ratatoskr podrá ser una buena organización, pero si una de las mafias está ocultando a Bruma, ni siquiera Ratatoskr podrá encontrarlo, ahora… llegamos". –Hikari se detuvo enfrente de un colegio abandonado, empujó débilmente la puerta y entró, los pasillos eran fríos y oscuros, llenos de grafitis.

-"¿Dónde era la reunión, Hikari?"

-"En la sala de música". –Hikari caminó directamente a la sala de música, al entrar pudo ver que en medio del gran salón había una mesa con dos sillas, el resto del salón estaba destruido y lleno de basuras, una de las dos sillas estaba vacía y en la otra estaba un sujeto de unos veinte años fumando un cigarro, al ver a Hikari hizo una seña para que este se sentara. Hikari bajó las gradas del salón y se sentó enfrente del sujeto.

-Así que… usted es el que ha estado impidiendo nuestros tratos en la ciudad durante los pasados dos días ¿eh? –El hombre sopló el humo del cigarro en la cara de Hikari.

-Sí, fui yo.

-Vaya, tienes agallas para decirme eso frente a frente, reconozco eso, además no sé si eres muy valiente o un increíble estúpido al aceptar reunirme conmigo aquí, alejado de todos… solo…

-Solo vine a pedir algo. –Al escucharlo el sujeto rió fuertemente.

-¡Eso es no es tener agallas! ¡Es ser descarado! Ja, ja, ja, primero arruinas dos días de negocio y luego… ¿quieres mi ayuda? Ja, ja, ja, ¿Qué crees que soy? No estás en posición de pedirme nada, viniste desarmado, pero yo, tengo a cinco hombres que te están apuntando y por lo menos veinte fuera de este salón listos para entrar. –Al terminar de hablar el sujeto apagó su cigarro frotándolo contra la mesa que estaba entre Hikari y él, entonces se dispuso a sacar otro cigarro de su bolsillo, Hikari sonrió y le quitó el cigarro de las manos, se lo puso a la boca y lo prendió creando una flama en la punta de su dedo.

-Mira, no estoy aquí para jugar, lo que tengo que hacer es algo serio y cuando me pongo serio. –BB se transformó en revolver y Hikari apuntó al sujeto enfrente de él. – ¿Tienes cinco hombres apuntándome? Yo contaría mejor mis números antes de hablar. –Sonaron cinco disparos y cinco cuerpos cayeron y rodaron por la sala de música. –Me pregunto si los veinte hombres de afuera llegarían a tiempo para salvarte ahora. –Hikari aún sonreía mientras apuntaba al sujeto, este se veía muy nervioso, sabía que su vida peligraba y miró a Hikari enojado y serio.

-¿Y bien? ¿Qué quieres?

-Un pequeño favor nada más, verás hay un sujeto que me causa problemas y simplemente me quiero deshacer de él. –El sujeto miró a Hikari con sospecha y sacó otro cigarro del bolsillo, Hikari ofreció prenderlo a lo cual el sujeto aceptó.

-¿Una sujeto causándote problemas a ti? ¡Vaya! Debería contratarlo, supongo que quieres que hagamos el trabajo sucio ¿verdad?

-No, ustedes no podrían eliminar a mi amigo, es especial, aunque creo que estás acostumbrado, no te sorprendiste cuando creé esa flama, de todas formas este es diferente, solo quiero que me den la ubicación y yo haré el resto.

-¿Y qué hay para mí?

-Te dejo vivir, me hago de la vista gorda de tus negocios de lavado de dinero ¿te parece? –El sujeto soltó una risa.

-Sí, sí, si así me deshago de ti, trato hecho, ¿Cómo se llama el sujeto? ¿Cómo se ve?

-Se ve igual a mí, pero su cabello es blanco y sus ojos son rojos, con esas características será fácil de encontrar, además no creo que mi cara se te vaya a olvidar fácilmente, has correr la voz entre todos los criminales que conozcas que además el primero que lo encuentre tendrá una bonificación, ¡Ah! Se me olvidaba, si alguno de tus hombres me ve por la ciudad, que no se metan en mi vida o con mis amigos, porque… será lo último que tú y tu grupito hará ¿Estamos claros? –Hikari dejó de apuntar con el revolver al sujeto y sonrió más.

-Claro que no, socio, no queremos ensuciar tu imagen, distinguido señor, todo será como pediste. –Hikari se levantó y caminó hacia la puerta, pero el sujeto se levantó y sacó una pistola y apuntó a Hikari, luego disparó, pero en ese instante Hikari desapareció y apareció detrás del sujeto.

-Oh y una cosa más… No me gustan las traiciones. –Hikari susurró al oído del aterrorizado criminal y usando a BB como revolver, disparó en la rodilla del sujeto, haciéndolo gritar de dolor y caer al suelo.

-S-Sí, señor, nunca más… señor…

-Oh, yo en tu lugar empezaría a intentar caminar, porque no creo que tus hombres vengan por ti. –Hikari se fue caminando lentamente y con la mano alzada en modo de despedida, el sujeto sabía lo que Hikari quería decir con eso, seguramente todos sus hombres que estaban fuera de la sala estaban ahora muertos y así era, así que el sujeto intentó pararse.

-"Hikari, no creo que esto haya sido una buena idea".

-"BB, estos sujetos venderán a Bruma por la suficiente cantidad de dinero y además… para salvarse a sí mismos, después de todo, son predecibles".

Hikari continuó caminando de regreso por donde había venido, mientras caminaba sus Asisto-Bots se reunían con él.

-"Algunas personas usan sus Asisto-Bots para sus compras, para ayudar en casa, tú los usas para matar a los criminales de la zona ¿eh?".

-"BB, ¿Detecto celos? Ah, querías disparar ¿verdad? Otro día te dejaré hacerlo". –Hikari sonrió y BB se transformó en reloj, segundos después Hikari se tele-transportó a la zona "linda" de la ciudad, estaba en la azotea de un edificio y pudo ver como Haruka volaba al parecer con un objetivo.

-Haruka-chan.

-¿Eh? ¡Onii-chan! –Haruka se había detenido al oír a alguien decir su nombre y al ver a Hikari voló a toda velocidad para abrazarlo, Hikari sabía que de nada serviría resistirse y la recibió con un abrazo.

-Hola, Haruka, ¿Qué haces aquí? –Haruka sin dejar de abrazar a Hikari lo miró.

-Buscarte, todo el mundo estaba preocupado por ti, no aparecías en ningún lado. Ni siquiera fuiste a la academia y ya es temporada de exámenes. –Haruka chocaba sus mejillas con las de Hikari y este sonreía un poco avergonzado.

-Ya veo… así que ya estamos en esa época, supongo que las chicas quieren algo de ayuda ¿verdad?

-Sí, cerebrito tienes que ayudarles a estudiar. –Haruka quiso jalara a Hikari, pero él no se movía. -¿Onii-chan?

-Adelántate, te alcanzaré luego, tengo que hacer algo importante antes. –Haruka quería ofrecerse para ayudar a Hikari con ese asunto importante, pero sabía que probablemente era algo que Hikari quería mantener en secreto. –Si algo sucede, puedes confiar en mí, Onii-chan.

-Sí, sí, no te preocupes, no pasa nada. –Hikari sonrió de forma falsa, pero Haruka se lo creyó y se fue volando.

-Compañero, ¿crees que fue buena idea ocultarle esto a tu hermanita? –Hole se materializó en la mano de Hikari para hablar.

-¡Ey! No cuestiones a Hikari, él sabe lo que hace. –BB hablaba desde los parlantes que puso en el reloj que estaba en la otra mano.

-El 90% de las veces. –Hik se materializó también detrás de Hikari y le dio un leve empujoncito.

-Je, je, con ustedes cerca no puedo tener un segundo a solas ¿verdad? Bueno, es algo bueno, porque tengo que decirles que esta noche iré a ver a una… amiga y no quiero que ninguno de ustedes aparezca, son humanos y no quiero que tengan conocimientos de nada relacionado con espíritus, anti-espíritus, seres inter-dimensionales o Asisto-Bots, ¿entendido? –Los presentes se callaron por unos instantes y luego todos confirmaron que habían entendido el mensaje.

Hikari se sintió aliviado y se preparó para volar, Hole y Hik desaparecieron y Hikari emprendió rumbo hacia la residencia Itsuka.

-Ya llegue… -Hikari abrió la puerta, esperaba que no hubiera nadie, pero…

-¡Hikari Kusakariki! ¡Tienes muchas explicaciones que dar! –Haruka estaba en medio de las espíritus con una sonrisa forzada.

-Vaya, vendido por mi propia hermanita, Ouch. –Hikari no pudo decir nada más, porque fue jalado al interior de la casa por Kurumi y Nia.

-¿Y bien? –Hikari fue obligado a sentarse en un lado de la mesa del comedor, mientras en el lado opuesto las espíritus estaban paradas y Kotori estaba sentada y hablaba en representación de las espíritus.

-Bueno, supongo que si pongo alguna escusa mala no me van a creer.

-Así es, no puedes ocultar la verdad de la poderosa Kaguya.

-Bien, lo que estuve haciendo es bastante simple, estaba buscando a Bruma en patrullas nocturnas, supuse que si las anti-espíritus no lo habían encontrado era porque lo buscaban de día. –Hikari fingió una sonrisa, todas lo miraron como tratando de encontrar algo que no estuviese bien.

-¿E-Eso es verdad, Hikari-san? –La prueba definitiva era la ternura de Yoshino.

-"Siempre te tienen que usar a ti, ¿verdad? No importa, ahora estoy lleno de determinación". –Hikari sin cambiar la expresión de su rostro asintió, esto parece que convenció a las chicas y dieron un suspiro.

-¡Ahora ayúdame a estudiar para el examen! –Tohka jaló a Hikari y se lo llevó a rastras a la casa de los espíritus, tras ella las espíritus regresaban caminando tranquilamente y charlando.

Shidou quedó solo en la casa, pero algo le molestaba, él mejor que nadie conocía a Hikari, algo no anda bien con la actitud del anti-espíritu, entre todo el alboroto de la repentina salida de las chicas, Shidou recién pudo notar que Haruka no había salido y estaba sentada en el sofá, se veía muy deprimida, Shidou se acercó a ella y le tocó un hombro.

-¿Haruka?

-Oh, hola Shidou, perdón, pero creo que estoy algo distraída… je, je, je. –Haruka fingía una risa, pero Shidou pudo reconocer el engaño y se sentó al lado de Haruka.

-¿Qué pasa?

-Oh, N-no, no pasa nada… -Shidou puso su mano en la rodilla de Haruka, esto la sorprendió y la hizo mirar a Shidou.

-Dime, Haruka, puedes confiar en mí. –Haruka dejó su imagen fuerte, se le escaparon unas lágrimas y sollozos y abrazó a Shidou en ese instante, no paraba de llorar y Shidou prefería no decir nada, sabía que lo que ocurría probablemente era demasiado grave para ella y no quería hacerla sentir mal.

-N-No puede ser… Onii-chan está, está… ocultando cosas… n-no es que no le crea… pero, pero… -Shidou acarició la cabeza de Haruka, esta poco a poco dejó de llorar y se volvió a sentar, aunque ya había dejado de abrazar a Shidou, aún tenía su mano en la rodilla del chico.

-Yo también creo que no nos está diciendo algo, Hikari siempre se ha guardado algunas cosas para sí mismo, pero no creo que sea algo muy importante, si fuera así ya nos hubiera dicho. –Haruka asintió al oír a Shidou, entonces el celular que tenía Haruka sonó.

-¡Ah! ¡Me olvidé que teníamos que seguir buscando a Bruma! ¡Gracias, Shidou! –Haruka salió corriendo de la casa con una sonrisa, Shidou también se despidió con una sonrisa falsa.

-"Así que no estoy loco, Hikari se veía distinto, algo… algo no encaja, me pregunto qué tienes pensado hermanito…". –Shidou trató de despejar su mente y se fue a cocinar.

La tarde pasó tranquila, Hikari se pasó la tarde explicando todos los ejercicios que habían practicado en clases, lo curioso era que pudo resolver los ejercicios que habían dado mientras él no estaba en clases, esto asombró a Kaguya y a Tohka como de costumbre, luego al llegar la noche, salió caminando hacia la casa de Shidou, solo para encontrar que este lo esperaba en la puerta de la casa.

-¿Shidou?

-Hikari, debemos hablar. –Shidou le hizo una señal a Hikari para que caminaran juntos un momento, Hikari entendió el mensaje y se acercó a Shidou, juntos caminaron por las calles, que ya comenzaban a vaciarse porque ya empezaba a anochecer.

-Supongo que no me voy a escapar de esta charla de hermanos ¿no?

-Si quieres puedes hacerlo, no sería nada nuevo, pero antes de que lo hagas Hikari, ¿podrías decirme lo que me ocultas? –Hikari dejó de caminar, Shidou también se detuvo y dio vuelta para mirar a Hikari, la calle por la que estaban está totalmente vacía.

-¿Ocultarte?

-Sí, hay cosas que no me dices, cosas que no dices a nadie, ¿por qué?

-Porque… quiero mantenerlos lo más lejos posible de cualquier cosa que los pueda lastimar, solo les diré lo que necesiten saber, nada más. No quiero involucrarlos. –Hikari bajaba la cabeza y sonaba serio, Shidou se acercó a él.

-¿Y quién te dijo que nosotros no queremos involucrarnos? Mira, tú te enfrascas en protegernos y te estoy muy agradecido por ello, pero también queremos protegerte, no estás solo. –Hikari levantó la vista asombrado y se pudo ver que estaba llorando.

-H-Hablas como ella, igual a ella…

-¿Igual a quién?

-Mi… mi… mi pareja.

-¿P-Pareja? –Shidou se alejó un par de pasos de la sorpresa.

-Sí, mi pareja de formación, ambos fuimos creados al mismo tiempo.

-¡Debiste haber comenzado por eso! –Shidou dio un suspiro después de hablar, pensaba que su hermanito ya había tenido una pareja.

-Ah… pensaste en la otra definición de pareja… bueno, no importa, me hiciste recuerdo a ella, además… también es por ella que prefiero ser así.

-¿Puedes contarme? –Shidou estaba viendo si había convencido a Hikari para ser más abierto, él en respuesta suspiró.

-Primero, sé que el Fraxinus está monitoreando esto, para que te lo cuente, quiero que dejen de escucharnos. –Shidou asintió y se quitó el comunicador. –Gracias, Shidou, ahora, te contaré de mi pareja, ella en el momento de su creación era demasiado inestable y para hacerla estable se fusionó con otra anti-espíritu inestable, yo le dije que empezaría a enfrentarme a Lucifer y a Ezequiel, ella quiso ayudarme, pero Ezequiel se enteró de esto y la disfrazó en una misión, no contaré los detalles porque es muy doloroso, pero el caso es que yo terminé matándola.

-Entonces tú…

-Sí, la maté, no lo supe hasta que me enteré de regreso a los cuarteles de Ezequiel, ella… ella habría vivido si no hubiera sabido de mis planes y… y… lo peor es que la maté yo… a la que confió en mí, a la que… me dijo que quería protegerme y que no me dejaría solo… -Shidou se acercó a su hermanito y le despeinó el cabello.

-No tienes que parecer fuerte todo el tiempo, Hikari, si quieres llorar, llora, pero por favor, no nos alejes de ti. –Shidou se alejó de Hikari, él asintió y lo miró fijamente.

-B-Bueno, son mi familia, ¿no? S-Supongo que… bueno el tiempo lo dirá, pero lo tendré en mente, ahora Shidou, debo irme a buscar a Bruma.

-Bueno, te dejaré la cena en la cocina y les diré a las chicas lo que haces. –Hikari asintió y se fue volando, ya era de noche y Shidou caminó a casa pensando en que tendría que tener más charlas como estas con Hikari para que se abra un poco más.

-"¿Dónde vamos a ir?" –BB se había mantenido callada todo este tiempo, sabía que intervenir sería de muy mal gusto.

-"Corrección. Yo, solo, voy a ir a ver a esa amiga". –Hikari voló por la ciudad hasta llegar a las instalaciones militares del AST.

Hikari aterrizó en el centro del campo de entrenamiento del AST, era de noche, por lo que nadie estaba en las instalaciones… bueno, casi nadie, Hikari caminó lentamente por el campo sin rumbo aparente, estaba haciendo tiempo por algo.

-¿Eh? ¿Kusakariki? –Una de las chicas de AST que estaba de patrulla se acercó a Hikari apuntándolo con un arma, pero al verle la cara había bajado un poco el arma.

-Oh, buenas noches, ¿soy tan conocido? –La chica asintió y se acercó a Hikari con algo de timidez y bajó totalmente el arma.

-S-Sí, ¿Puedo preguntar por qué vino?

-Vengo a ver a Ryouko, hay algo importante que le tengo que decir. –La chica asintió y le hizo una señal a Hikari para que la siga, ella lo llevó por el campo hasta lo que parecía ser un dormitorio y tocó la puerta.

-¿¡Qué quieren!?

-C-Capitana… hay, hay alguien que quiere verla. –La chica sonaba asustada de la reacción de su capitana, pero a la vez se veía normal, seguramente ya sabía que a la capitana no le gustaba que la molesten.

-¡Qué se aguante! No estoy en servicio ahora.

-Es una pena Ryouko-chan. –Hikari alzó su tono de voz cuando habló para que la capitana lo escuchara, se escuchó un ruido del interior del dormitorio y pasos en dirección a la puerta.

-¿Hikari? –Ryouko abrió la puerta, se pudo ver que seguramente ya estaba durmiendo, tenía puesto su pijama y estaba algo despeinada.

-Hola, Ryouko-chan, ¿Puedo pasar? Hay un par de cosas que tengo que hablar contigo. –Ryouko notó que Hikari sonaba serio y le dejó pasar, mientras que la chica que lo había traído se despidió y se fue a su cuarto.

-Y bien… ¿Qué pasa? –Ryouko hizo sentar a Hikari en una silla frente a una mesa pequeñita que tenía y le sirvió una taza de té.

-¿Tuvieron suerte en encontrar a Bruma?

-Nosotras no, pero tal vez las del SSS o las del DEM tienen algo, podrías hablar con Artemisa o Mina, si quieres yo hablo con ellas para preguntar, aunque… no creo que hayas venido solo por eso, de ser así podrías haber llamado en lugar de venir. –Hikari respondió con una sonrisa y asintió.

-Tienes razón Ryouko, vengo a hablarte de la estabilidad dimensional, estoy al tanto de que tienes acceso a esos datos, ¿podrías decirme si hay alguna información sobre eso?

-¿Tú no deberías saber de esas cosas? Bueno tienes razón, últimamente se han detectado leves cambios en la estabilidad dimensional, no son tan pequeños como para pasar inadvertidos, pero no son tan grandes como para tratarse de un nuevo espíritu, ¿Por qué? –Hikari terminó su té y se levantó luego de agradecer el té.

-Porque tengo una hipótesis de lo que está haciendo Bruma y de ser así… necesitaré más cosas, gracias por todo Ryouko. –Hikari se despidió y luego desapareció, se había tele-transportado enfrente de un edificio.

-"Ella era la amiga que no querías que nos viera, ¿verdad?" –BB sonaba impaciente por volver a su forma Chibi.

-"No, no era ella, estamos a punto de ver a esa amiga, así que aguanta un poco más". –Hikari caminó hacia el edificio que tenía enfrente de él.

Hikari entró como si se tratara de su casa sin importarle mucho, en la entrada había una recepción con una secretaria que lo miraba de forma amenazante.

-Disculpe, civiles no pueden entrar aquí. –Hikari no contestó nada y sacó una granada de gas de su bolsillo y se lo lanzó a la recepcionista, que no pudo reaccionar y quedó dormida por el gas.

-¡Señora, hay un intruso en el edificio! –En el último piso del edificio una secretaria había entrado para dar la noticia a su jefa de la llegada de Hikari.

-¿Un intruso? ¿Aquí? No durará mucho tiempo.

-L-La verdad señora, el individuo ya está en el piso cinco y nadie ha podido detenerlo, está armado con pistolas tranquilizantes y granadas somníferas. –La jefa, que hasta hace algunos segundos se distraía mirando la ciudad, se dio vuelta para ver en el monitor de su escritorio las cámaras de seguridad, ahí pudo ver como Hikari avanzaba sin ser detenido por nadie.

-¿Quién es ese sujeto? Las balas lo rozan y cada disparo o lanzamiento que hace es totalmente preciso. –Entonces como si Hikari la escuchara miró a la cámara y saludo con la mano y una sonrisa, luego disparó y destruyó la cámara, que perdió la señal ese instante.

-¡Jefa, perdimos contacto con el piso siete! –La jefa se veía nerviosa y se mordisqueaba los dientes, faltaban solo un piso para que el intruso llegue donde ella estaba, pero algo en ese sujeto le era familiar.

-Juniper tiene permiso para matarlo. –La secretaria asintió y salió del cuarto.

Mientras, Hikari acababa de llegar al piso número ocho, allí al final del corredor pudo ver a una chica de cabello celeste, con ojos amarillos, vestía un traje entero de color negro y lo apuntaba con dos pistolas, parecía de la edad de Hikari.

-Detente ahí, no avances ni un paso más.

-Supuse que te encontraría aquí Juniper, siempre has estado cerca de ella ¿no es así? No importa, eso es obvio, pero por ahora no vengo a hablar contigo, vamos, déjame pasar, tengo que verla a ella. –La chica, Juniper, lo miró extrañada, ese tipo hablaba como si la conociera, pero ella no daría su brazo a torcer y dio dos disparos, Hikari se había movido segundos antes de los disparos y los había logrado esquivar.

-¿¡Qué!? ¿Cómo? ¡Ningún humano puede esquivar balas! –La chica se veía más que todo molesta, pero Hikari sonrió y la miró fijamente.

-Cómo has visto, no llegaremos a ningún lado si me sigues disparando, arreglemos esto de forma más simple. –Hikari sacó dos dagas de sus bolsillos y miró a la chica, ella asintió y también sacó una daga de su traje.

Hikari corrió con las dagas hacia la chica, ella reaccionó de la misma forma, Hikari chocó sus dagas con la de Juniper, ambos se empujaban en ese choque de dagas, ninguno daba señales de rendirse, Hikari parecía tranquilo mientras que la chica usaba toda su fuerza, entonces repentinamente Hikari soltó las dagas y se movió a un costado, Juniper no reaccionó a tiempo y debido a que no bajó la fuerza que usaba al empujar, se impulsó hacia adelante y parecía que caería, Hikari la agarró de la cintura antes de que eso pasara y antes de que la chica lograra hacer algo, él le dio una palmadita en la cabeza y otra en la espalda.

-Punto para mí, ¿Jugamos otra ronda, Jun? –La chica quedó atónita después de lo ocurrido, Hikari entonces la soltó cuando ella ya se paró bien.

-N-No… no puede ser… tú… estás desaparecido, estás muerto y… y… no te veías así… -La chica agarró la cara de Hikari con ternura y lágrimas en los ojos, sin pensarlo dos veces lo abrazó y lloró un poco.

-Perdona que no viniera antes a verte, han pasado muchas cosas y… no quería que te involucraras.

-E-Ella seguramente quiera verte, está en la habitación al final del corredor. –Hikari asintió y caminó hacia esa habitación. Hikari abrió la puerta y entró de forma seria y decidida.

-Oh, ha pasado mucho tiempo ¿no, chico?

-Je, claro que si... Madre.