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¿DÍA LIBRE?

Han pasado días… desde el incidente de Tekubi, La diosa esmeralda… se auto-proclamó, Hades, ella ha hechizado a Hikari para aligerar su carga respecto a las espíritus especiales… aparentemente ha estado funcionando, porque Hikari está echado en su cama, está totalmente dormido, ninguno de los sonidos de la residencia Itsuka parecen molestarlo, que por cierto…

-¡Tohka! ¿¡Dónde está tu mochila!?

-¡Ah! ¡La dejé en el comedor! –Nia que estaba cerca se acerca, coge la mochila y se la lanza, ella la atrapa y se dirige a la puerta.

-Shidou-san, no encuentro mis lapiceros…

-¿¡Alguien ha visto los lapiceros de Kurumi!? –Todos se ponen a corretear buscando los dichosos lapiceros.

-"¿¡Cómo es posible que todos nos quedásemos dormidos!?" –Kotori suspiraba mientras logró encontrar los lapiceros y se los dio.

-¿Todas listas? –Shidou se paró frente a la puerta para hacer recuento de todas y sus materiales…

-¿S-Shidou-san…?

-¿Sí, Yoshino?

-¿Y…. Hikari? –Shidou suspiró y no fue el único.

-No bajó, ¿eh? Entonces se salvó de ir a clases hoy… tardaríamos en despertarlo una media hora y además otros minutos más en convencerlo de que vaya… ah… bien, se salvó. –Todos salen corriendo de la casa.

Hikari por su parte, acaba de despertarse, ¿El motivo? Su celular, acaba de sonar.

-¿Eh…? ¿Q-Qué pasa…? –Hikari mira el celular vibrando. -¡AHH! ¡NO! No… maldito celular… estaba soñando que dormía… -Hikari contesta. -¿Hola…?

-A juzgar por tu tono de voz, recién despertaste, estás cansado y no te hace ninguna gracia que te llame.

-Hola madre, ¿Qué pasa? –Hikari se acomodó en la cama a una posición más cómoda.

-Bueno… es algo grande, hemos descubierto una peligrosa criminal en los barrios bajos de Japón.

-¿Y? Rose o Juniper pueden encargarse de ella, ¿Qué tengo que ver en todo eso?

-Una cámara de seguridad la captó entrando a un edificio.

-Encima, novata, ¿Qué tiene de impresionante una delincuente de baja categoría?

-En la imagen se pudo ver una tableta que tenía… en ella estaba la foto de Tohka y varios datos que no pudimos distinguir.

-Voy para allá. –Hikari se levantó de un salto, usó sus poderes para cambiar su pijama y se tele-transportó frente a Madre. Estaba sentada en su oficina, todo estaba oscuro porque las cortinas estaban cerradas.

-Wow… no tardaste tanto.

-¿Y bien? –Madre le mostro una serie de imágenes holográficas alrededor de él, una chica de largo cabello rubio, ojos azules, lentes de espionaje y visión nocturna verde, traje blanco de espía, labios rojos.

-Nombre desconocido, Alías, Gato Blanco, como puedes ver, tiene buena presencia, además de que no es plana… y tiene bastante retaguardia…

-¿Podemos ir directo a lo importante? –Madre rió y asintió.

-Claro, claro, esta chica ha sido vista en numerosos puntos de la ciudad, nada importante, algunas tiendas, transeúntes, nada importante hasta la pasada semana, donde atacó una de las bases de la DEM y otro laboratorio clandestino que supuestamente tiene algo que ver con las espíritus, la científica a cargo de dicho laboratorio fue identificada como Horua Takani, del AST.

-Je, típico, ¿Nadie del SSS? –Hikari sonaba burlón, pero se sorprendió cuando Madre asintió.

-Ya que lo mencionas… se encontró una tableta en lo que quedaba del laboratorio sobre Artemisia, creo que la conoces.

-Claro que la conozco, es una amiga, como sea, tengo bastante trabajo al parecer, vamos a cazar a esa gatita. –Hikari desaparece y reaparece en la azotea de un edificio cercano a la DEM.

Hikari chasquea y toda la luz del edificio se apaga, entra por una ventana haciendo transparente y se dirige a una de las oficinas directamente. Se vuelve humo y entra por debajo de la puerta.

-¡Kya! ¿Q-Que es eso?

-La muerte, Elena… -Elena salta de su silla y se acuclilla en esta, temblando.

-¡N-No quiero morir!

-O tal vez sea solo tu viejo amigo. –Hikari se materializa.

-¡T-Tonto! ¡Tonto, tonto, tonto! –Elena le comienza a lanzar todo lo que tiene a mano, Hikari esquivado todo y se hace bolita para que la chica se apiade de él, cosa que sucede y luego de calmarse se sienta.

-Perdón, perdón…

-¿Y-Y bien…? ¿Qué pasa? Casi nunca vienes solo a saludar… al menos no a la oficina… -Hikari se sonroja un poco y finge tos.

-C-Cómo sea Elena, tienes razón… necesito tu ayuda, ¿Podrías darme información sobre aquel ataque a una base de la DEM? –Elena se veía muy sorprendida.

-¿Hmm? ¿Ataque? No me informaron nada… -Hikari quedó más boquiabierto.

-Demonios…. Ni siquiera tú sabes del tema… ¿Puedes investigar? –Ella asintió y comenzó a buscar datos en su computador.

-"Elena…" -Sonó el comunicador de Elena, Hikari se sorprendió y se quedó calladito.

-¿S-Sí, Wescott-sama?

-"Dígale a su… visita que vaya a verme, si tiene la amabilidad…" –Hikari se sorprende.

-S-Sí… y-yo…

-Voy para allá Ike, ¿Me puedes preparar un café? –Elena está sorprendida y Hikari está con tono burlón, la respuesta de Wescott es una pequeña risa.

-"Sí, sí, claro, solo ven".

Hikari se volvió humo y pasó por el sistema de ventilación de la oficina, recorriendo los ductos hasta llegar a la oficina de Wescott, entonces entró por un ventilador y se materializó en una silla frente a Wescott.

-Siempre me sorprenden tus entradas.

-¿Gracias? Como sea, ¿Querías decirme algo? –Wescott estaba por hablar cuando su secretaria entro con dos cafés, uno se lo dio a Wescott y otro a Hikari.

-Primero, ¿Ves? Sí te di tu café, segundo, ¿Te podría pedir por favor no hablar del tema de Gato Blanco? Es algo delicado…

-¿Delicado? Explícate. –Hikari apretó un botón de BB y comenzó a grabar todo.

-Je, bueno, verás Takani-san es una de nuestras mejores investigadoras en el área del uso de energía espiritual, pero… también es la madre de las hechiceras del Triunvirato. –Hikari no se mostraba sorprendido, de hecho, se limitaba a mover su café.

-Oh, oí de ellas… las pequeñas prodigios de las agencias de hechiceras, se dice por ahí que son más fuertes que Ellen, ¿verdad?

-Se dice, se dice…

-Je, ya veo, así que no quieres dejar salir a la luz este… pequeño incidente, para no tener que revelar a tus… niñas consentidas, ¿eh? -Wescott terminó su café, al igual que Hikari y cruzó los brazos.

-Tú me entiendes, puedo proporcionarte información sobre el tema de Gato Blanco, porque yo tampoco me siento muy conforme con la desaparición de nuestra investigadora.

-¿Una tregua momentánea con uno de mis mayores enemigos? ¿Cuándo se ha visto?

En un lugar distante, en otra ciudad, sobre los tejados descansando, tomando el sol.

-Achú, hay… hay… -Yami se limpia la nariz. –Creo que alguien habla de mí… como sea.

-Pero viendo que no tengo opciones… -Hikari suspira. –¿Por qué no?

-Sabía que entenderías Hikari, eres un hombre… ser… ente… racional. –Hikari le da una mirada burlona. –Como sea, entenderás que no puedo revelar toda la información por… cuestiones laborales, no dudo que otro día vendrás a hackear mi base de datos como sueles hacerlo, pero hasta entonces, mejor ocultarlo, el caso es que Gato Blanco, estuvo merodeando los laboratorios una buena temporada, pero como civil, por la entrada, se vistió de turista y tomaba fotos de todos los alrededores, las cosas parecían… relativamente normales, pero surgió la desconfianza, el segundo día ya instruí a las hechiceras de turno para que no la dejaran tomar fotografías… pero ella vino de noche, cuando el turno de las hechiceras con esas órdenes había terminado, el tercer día, alerté a todo el personal, no quería ni una fotografía más, pero fue en vano, se fue al edificio de enfrente a tomar las fotos, sobra decir que en vano fue perseguirla después, al cuarto día… se dio el atentado, robó cada pizca de energía espiritual almacenada, secuestró a la investigadora Takani-san y vació la base de datos de ese laboratorio, por suerte su infiltración fue detenida a tiempo, supongo que tenemos práctica gracias a que tu entras cuando se te da la gana, aunque contrario a ti, a ella pudimos detenerla antes de que saque muchos datos.

-¿Qué datos logró sacar?

-Planos. –Hikari lo miró confuso.

-¿Planos? ¿De qué?

-Mmm… prototipos, de armaduras de batalla pesadas, de armas experimentales y… datos de Artemisia-chan y de Ryouko-chan. –Hikari se levantó y miró a Wescott.

-Gracias por todo, si necesito algo más vendré.

-Qué descaro… pero no te atrevas a pedir otro café. –Hikari ríe.

-No te preocupes, pediré un té. –Hikari se tele-transporta a otra parte de la ciudad. –Tch… necesito más datos, no es suficiente… espero que Elena haya logrado sacar más jugo de la situación que yo… por ahora, debería ir a ver a Ryouko…

Mientras Hikari está pensando, alguien le lanza un ladrillo a la cabeza, Hikari siente una alerta y esquiva el ataque, al afinar la vista con la prótesis, ve a una chica, orejas de gato, cola de gato, traje de espía… pero negros, todo negro, se veían sus ojos verdes y su cabello negro.

-Je, asumo que tú eres Gato Negro.

-¿Oh? ¿Tan fácil fue? Es una pena… Nya. –La chica saltó hacia un callejón, Hikari para no llamar mucho la atención, corrió hacia ese callejón saltando por las azoteas y la vio entrar a una casa.

-Oh vamos, yo que no quería hacer ruido. –Hikari transforma su prótesis en un lanzagranadas.

-¡Ah! ¡No tienes que llegar a tales extremos! –Hikari se da vuelta, otra chica, de orejas de gato, cola de gato, traje de espía… pero todo violeta, además de su cabello celeste y sus ojos miel.

-Adivinaré, Gato Violeta, ¿no? –Entonces Hikari recibe una alerta en BB.

-¡Hikari! ¡Hikari! ¡El AST fue atacado!

-Yei, logramos hacer tiempo. –Hikari mira algo enojado a Gato Violeta mientras celebra y se tele-transporta al AST, ahí puede ver que una armadura enorme de batalla parece estar atacando. Le triplicaba el tamaño.

-Así que no solo robaron los planos… los construyeron….- Entonces el aparato ese se centró en él, Hikari se estiró un poco. – Veamos que tienes para jugar.

El aparato se paró frente a él, salieron dos ametralladoras rotativas de cada brazo y se acomodaron a los costados de este, la mano se hundió, dejando paso a un lanzallamas, el pecho, las hombreras, las piernas y la espalda se abrieron mostrando misiles y pinchos salieron en cualquier espacio libre.

-Oh…

-¡Origami! ¿¡Dónde está esa cosa!? –Ryouko llegaba con un grupo de hechiceras armadas, mientras Origami señalaba hacia la ubicación de la máquina, vieron a Hikari corriendo sobre los techos de las instalaciones.

-¿¡Hikari!?

-Mala idea, mala idea, mala idea, recordatorio mental… -La máquina también tenía propulsores en la espalda y volaba para atacarlo, entonces golpeó el tejado, Hikari logró saltar a tiempo del borde, pero antes de caer, recibió un misil en la espalda que lo impulsó contra una reserva, atravesando la pared y cayendo sobre todas las municiones. –N-No molestar… al robot… auch.

Hikari se incorporó y vio las cosas a su alrededor y la máquina que se le venía encima, entonces agarró una de las granadas, la lanzó a la boquilla del lanzallamas, este explotó, destrozando todo el brazo, Hikari aprovechó la confusión para escapar y volver al campo abierto de la base.

-¡Hikari! ¿¡Estás bien!? –Ryouko y Origami aterrizaron cerca de él.

-¿Oh? Sí, sí, un misil no me haría tanto… bueno, al menos el misil que él tenía…

-Tu espalda… está sangrando, te falta… algo de carne. –Hikari miró extrañado a Origami por decir eso, pero por la mirada preocupada de ambas, asumió que era verdad.

-"¿Cómo es eso posible? El factor curativo que tengo actualmente debería ya haber cortado el sangrado… además… mi resistencia mejorada no debería dejar que haya perdido carne…"

-¡Está de regreso! –Una de las hechiceras gritó y todo el grupo de Ryouko comenzó a disparar, pero sus balas no le hacían nada, ni siquiera una abolladura, esa cosa aunque con un solo brazo aún tenía una cantidad de misiles suficientes para desaparecer una buena parte de la base, pero ese no era su interés, se volvió a concentrar en Hikari y le disparó otra serie de misiles, Hikari saltó hacia atrás para esquivarlos con unas volteretas.

-¿Por qué no estás volando?

-Quiero ver de lo que es capaz cuerpo a cuerpo, por eso no usé ninguna de mis habilidades hasta ahora, pero ¿Por qué sigue concentrándose en mí? –El robot de un empujón destrozó uno de los autos verdes de la base, acercó el hombro del brazo destruido a los restos del auto y una especie de bracitos salieron de ahí, agarrando partes del auto para reconstruir el brazo, pero aparentemente el proceso sería demasiado largo y optó por construir una púa enorme y puntiaguda. –Okey, eso… no me lo veía venir, además nunca me gustó ser el centro de atención… centro de atención… ¡Eso es! ¡Ryouko! ¡Revisa que nadie esté entrando al sistema del AST!

-¡S-Sí! –Ryouko hizo una llamada para que las hechiceras que no estén en batalla comenzaran a monitorear la red del AST. -¡Tenías razón! ¡Alguien ha estado tratando de sacar información! ¡Hay un intruso en alguna terminal del AST!

-G-Genial… ahora… detenla. –El robot había estado tratando de aplastarlo con su brazo suelto, Hikari esquivaba los manotazos saltando de un lado a otro y no podía perder su concentración.

-"¡Ey! ¡Sweetheart! ¿Necesitas ayuda?"

-"¿¡Eh!?"

Un proyectil cayó del cielo, sobre el robot, levantando una nube de polvo, todos se cubrieron los rostros, al levantarse el humo se vio a una chica parada sobre un montón de chatarra.

-Fu, fu, fu, solo era lata.

-¿Q-Quién es esa…? ¿Otra espíritu? –Ryouko y su grupo estaban listos para el combate, pero Hikari hizo una señal para que se calmen.

-Casi, ella es Código Cero, una Semi-espíritu, amiga mía.

-¿Oh? ¿Solo amiga? ¿No le contarás nuestras… pequeñas salidas juntos? ¿Solo fue otra aventura para ti?

-¿Aventuras? –Ryouko miraba fijamente a Hikari y no era la única.

-No me esperaba eso de ti, Hikari. –Origami sonaba muy decepcionada, pero con su típico tono de voz.

-Y cómo te encanta causar malentendidos, ¿verdad? –La chica rió y Hikari no pudo evitar sonreír.

-Lo sé, lo sé, perdón, perdón. Ya, ya, me calmo, cómo sea, veo que tienes un pequeño problema con máquinas, ¿eh? ¿Qué acaso el problemático de… agente 9029 no puede estarse tranquilo en su retiro?

-Ja, ja, viniendo de la chica que cae del cielo para aplastar un robot. –La chica rió, Hikari simplemente suspiró y las hechiceras se miraban entre ellas confusas.

-Touché, pero ya hablando enserio, estaba volando a una misión en Japón, pero vi un par de explosiones y decidí saltar, ¿Quieres que te de una mano?

-Si tienes tiempo libre.

-Claro que tengo tiempo libre, no sería la primera vez que cambio de objetivo en medio de una misión y lo sabes. –Hikari suspiró al oírla.

-No deberías estar orgullosa de eso, Cero. No importa, hora de escanear la zona. –Hikari trató de crear unos clones, pero no pudo, se concentró un poco más y logró hacer un clon. –Mmm… curioso, no interesa, hora de ir, Ryouko, envía a todas a investigar.

Ryouko asintió y todas las hechiceras se dispersaron para buscar al intruso, Cero y Hikari buscaron juntos.

-¿Dónde crees que esté, Honey?

-Mmm… no lo sé… pero creo que perdemos el tiempo buscando afuera, debemos buscarla dentro, ¿Puedes hacer una puerta? –Cero sonrió y de un golpe agujereó la pared, entonces se vio a una chica, de orejas de gato, cola de gato, traje de espía… pero todo amarillo, además de su cabello blanco y sus ojos violeta. -¿Gato Amarillo?

-¡Hya! –La chica se asustó y lanzó una bomba de humo, Cero movió el humo con los brazos para dispersarlo, pero no había nadie.

-Tch… se escapó.

-Nope. –Hikari corría decidido por los pasillos, Cero lo siguió, ahí al final del pasillo donde aparecieron, estaba Gato Amarillo, Hikari suspiró y continuó la persecución.

-Hikari… ¿Tus heridas no deberían de haber sanado ya?

-¿Aún no sanan? Que extraño… Lánzame. –Cero se sorprendió, pero obedeció, lo lanzó con todas sus fuerzas, Hikari se acercó rápidamente a Gato Amarillo, pero algo que no tenía contemplado en sus planes era que ella entraría a un cuarto, Hikari pasó de largo dando un suspiró, Cero por el contrario logró entrar al cuarto, se escucharon sonidos y para cuando Hikari llegó había un gran hueco en la pared del cuarto, Cero estaba en el suelo y no había señal de Gato Amarillo.

-L-Lo siento… huyó…

-Lo puedo ver. –Hikari se acercó a ella y la ayudó a pararse.

-Lo siento…

Hikari ni siquiera la escuchaba, se puso a investigar la zona, buscando algo que pueda ayudarlo, pero aparentemente no había nada, entonces miró a Código Cero.

-¿Cero?

-¿S-Sí?

-Tendré que buscar algo de información en otra parte, tú quédate y busca por tu cuenta, te llamaré y me dices lo que encuentras. –Código Cero asintió y Hikari se alejó volando, ahora lograba volar tranquilo.

-"Artemisia, ¿Estás en tu cuarto?'"

-"¿E-Eh? ¿H-Hikari? N-No… estoy en casa, no en las instalaciones, pero… estoy en la cocina, ¿Por qué?"

-"Okey… despeja tu cama"

-"¿¡E-E-Eh!?"

Hikari se tele-transportó a la cama de la casa de Artemisia, ya que ella estaba en Inglaterra, el transporte fue agotador y se quedó ahí quietecito unos instantes, hasta que ella entró al cuarto, con un delantal blanco y una cuchara en la mano.

-H-Hola… déjame descansar un poco…. –Ella se sentó en una silla del cuarto.

-¿Te tele-transportaste? Bien… c-creo que esa fue una pregunta estúpida… ¿Puedo saber por qué? –Hikari le hizo una señal con la mano para que espere, él seguía echado recargando.

-Y-Ya… ya está… -Hikari se sienta lentamente, Artemisia le ofrece una taza de té, él la acepta y toma un sorbo.

-¿Qué te trae aquí, Hikari?

-Negocios, otro día vendré para llevarte al cine. –Ella se sonrojó y Hikari rió un poco. –Por el momento, necesito que me lleves a la base del SSS.

-¿Eh? B-Bueno… aunque sabes el revuelo que causas al ir allí, además de las confusiones que causa que Artemisa venga a hablarte cuando estoy cerca…

-Lo sé, lo sé, pero esta vez es importante… -El comunicador de Artemisia suena, ella lee un mensaje y mira preocupada a Hikari.

-Hikari, no vas a creerlo…

-Mmm… hay uno o más robots enormes armados por cada centímetro que tengan y es posible que alguien se haya infiltrado a su base de datos, si tienen cámaras probablemente sea una tipa disfrazada de gato, ¿me faltó algo? –Ella se quedó atónita y negó, Hikari la tomó de la mano y aparecieron en las instalaciones del SSS.

-Okey… pues me falló algo… -Frente a ellos hay cinco enormes robots. Casi 5 veces el tamaño humano –Además… estos son blancos, el del AST era negro… me pregunto que cambia. –El robot más cercano le da un golpe, que lo envía a volar lejos, atravesando dos almacenes. –Okey… es más… fuerte… es más grande, más malo… y más feo. –El robot llegó a él atravesando todo en su camino. –Oh… je… mentirita era…

-¡Hikari!

-¡Estoy algo ocupado! –Hikari saltó por una ventana e hizo una voltereta para pararse y volver a pasar por el campo abierto de las instalaciones, entonces los cuatro robots que molestaban a las hechiceras lo vieron y dejaron de un lado a las hechiceras. -¡Por favor! ¡Sois más pesados que Yami!

-¡Achú! ¿¡De nuevo!? –Yami seguía en el mismo lugar, leyendo una revista.

El primer robot que lo persiguió también aparece y suelta su lluvia de misiles, Hikari esquiva por los pelos los misiles, pero en la confusión de explosiones, los cuatro robots que estaban lejos se habían acercado mucho, liberando una lluvia de balas, Hikari levantó las manos para crear un escudo, pero las balas pasaron el escudo, él se llevó una sorpresa enorme y creó una barrera de viento, las balas fueron desviadas por la barrera, pero no lo suficiente, unas balas rosaron sus piernas, Hikari sintió un piquete ese instante y se tele-transportó a unos metros de las máquinas.

-¿Hikari…? –Artemisia vuela cerca de él y lo oculta a la vista de los robots detrás de unos autos. –N-No…

-Agh… auch… me… me debí venir eso… -Hikari está lleno de agujeros por todo el cuerpo, las balas lo habían alcanzado. –Ahh… debes irte… ellos…

-¡Artemisia-san! –Los robots habían estado escaneando el lugar en busca de Hikari, su visión pasaba a través de los objetos y los habían encontrado, dispararon sus misiles para pulverizar el auto, allí, vieron a Hikari, extremadamente débil y a una Artemisia muy asustada.

-N-No… ¿Q-Qué hacemos…?

-Tranquila…..Artemisia…. yo…. –Un montón de humo negro apareció, viniendo desde la ciudad, pero se dirigía hacia ellos, deliberadamente. –Je… él…..viene…..

-¿Quién…?

Las maquinas se dirigen hacia ellos, listos para matarlos, pero el humo negro se interpuso en medio de ellos y unas manos salidas del humo los agarran del hombro y los sumergen en el humo, entonces este humo desaparece tan repentinamente como había aparecido, pero no había señales de Artemisia o de Hikari.

-Mo… algo anda mal, no se supone que debería pasar eso… mmm… pero tampoco se supone que él deba morir…. Tan pronto….. Creo. – Dijo una chica, de orejas de gato, cola de gato, traje de espía… pero todo celeste, además de su cabello naranja y sus ojos negros.

-¿Q-Qué pasa…? –Artemisia despertó en una sala de esperas de un hospital, estaba amarrada a la silla, miró a su alrededor, pero no había señal de aquel humo que era lo único que recordaba, solo había un robot frente a ella.

-Respuesta: Clasificado.

-¿Clasificado? ¿Por qué clasificado? ¿Dónde está Hikari? –Ella trataba de soltarse.

-Respuesta: Clasificado.

-¡Pero es mi amigo! ¿¡Qué le han hecho!?

-Respuesta: Clasificado.

-Por supuesto… -Ella sonaba muy molesta, pero al robot no le importaba. Solo se escucharon sonidos raros, ella se preocupaba y trataba de soltarse con más intensidad.

Los minutos pasaron, ella seguía intentando liberarse a toda costa, el robot por su parte no apartaba la vista de ella, los sonidos continuaban, entonces una chica aparece.

-Oh, lo lamento, se me hizo tarde. –La chica se puso una bata.

-Lo entendemos Dr. Lumia, suerte. –La doctora entró a la sala, Artemisia intentó ver el interior del cuarto, pero no vio nada.

-Tranquilo, se me dan bien las autopsias.

-"¿¡Autopsias?! ¿¡Qué le hicieron a Hikari?! ¡Él llegó vivo! Estaba mal… pero…. Pero… tal vez se podía salvar….Hikari…."

-Oh, oh, este cadáver está muy dañado… demasiado, lo llenaron de balas, pobre…

-"¿¡Es Hikari!? No… no quiero creerlo…"

-¿Quién te hizo esto? ¿Cómo quedaste así? ¿No contestas, Hikari? Bueno, ahora ya no podrás contestarme… -La doctora salió con la bata llena de sangre, una tripa chorreando y una sierra, con sangre y vísceras en la mano. Se vio el interior del cuarto, era una sala parecida a un quirófano con un cadáver con el estómago abierto, las costillas cortadas y sangre en todas partes. –Necesito un desatornillador con una broca para atravesar cráneos…

-"¿¡Qué hacen ahí!? ¿¡Qué es este lugar!? ¡Quiero salir! Perdóname Hikari… no debí dejar que…"

-Oh, doc. ¿Qué cuenta? –Hikari salió del cuarto, enterito, sin un raspón, con las heridas totalmente curadas.

-¡Ah! Hikari, es bueno tenerte de regreso con los vivos.

-Oh vamos doc, no estaba muerto cuando Ghost me trajo, el viejo sigue teniendo su sentido del humor después de todo, ¿eh? –Artemisia estaba sin habla, pero prefería no decir nada y se quedó quietecita.

-Sí, sí, Ghost ha cambiado gracias a… cierto Novato, como sea, pienso que dejarte en el sector de la morgue fue de muy mal gusto.

-¿Y eso? Tenía una charla amena con mi compañero de cuarto hasta que llegaste. –Lumia rió un poco.

-Sí, él tuvo una muerte rara, un Semi-Espíritu Monstruo lo hizo, revisé su cuerpo para ver qué le pasó exactamente, estábamos en esa misión cuando recibimos tu mensaje, tienes suerte de que Idol no fuera la que estuviese cerca porque habría llegado rompiendo todo. –Hikari asiente y comienza a estirarse.

-Me contarás más del nuevo Semi-Monstruo, pero eso será para mañana, hoy tengo que acabar con un complot terrorista hasta antes de la media noche, porque tengo que ir a ver una película con Artemisia. –Ella se sonrojó un poco. –Pensar que Idol hubiese venido… fiu, tengo suerte, gracias por curarme.

-Oh no es nada, lo que sea por un compañero de Mano Negra, pero tus heridas eran muy profundas y letales, por eso quedaste dormidito mientras hacía la revisión de tu compañero de cuarto, aun así hable contigo y con él, para causar chiste cuando veas las grabaciones.

-"¿¡Era una broma!? ¡Yo me asusté!" –Artemisia suspiró aliviada.

-Por cierto, tendrás que llevarla con Wilson antes de irte…

-Lo sé. –Artemisia lo miró confundida, entonces él la liberó y la cargó, para vergüenza de ella, que se puso rojita, Lumia sonrió y continuó su trabajo…

-¿Artemisia-san?

-¿Eh? ¿Q-Qué pasó? –Artemisia estaba en el campo de la base de la SSS.

-Eso es lo que queremos preguntarle Artemisia-san, luego de que ese humo se los llevará, los robots perdieron el interés y se fueron, recogieron a la intruso de un tejado y se fueron, entonces usted apareció de la nada inconsciente, acaba de despertar.

-N-No recuerdo mucho… recuerdo que esas cosas dispararon a Hikari… y nada más, lo demás lo tengo en blanco… -Artemisia revisó una nota en su bolsillo. –"Estoy bien… nos vemos en el cine a las doce de la noche". –Artemisia sonrió coloradita.

-¿Artemisia-san…? ¿Qué es eso…? ¿Es la letra de Hikari?

-¡N-No! ¡A-Aléjense! –Las hechiceras persiguieron a Artemisia y ella huía por las bases.

-¿Aún estás seguro de lo que hiciste? ¿Borrarle la memoria a tu amiga con mi maquinaria? –Wilson habla con Hikari en un cuarto raro.

-Sí, no era prudente que ella conociese sobre Mano Negra o aquél Semi-Monstruo que investigan, suerte con eso por cierto, no importa, es hora de que vuelva a casa… es hora del almuerzo. –Hikari se tele-transporta a su cama, como la distancia es larga, estaba muy cansado y estaba echado en la cama.

-Hikari… Shidou me envió para ver si estabas bien… -Kaguya abrió la puerta del cuarto.

-H-Hola Kaguya…

-Oh, perdón, seguías durmiendo, Shidou tenía razón, dijo que cuando duermes no despiertas para nada, bueno, te cuidas. –Kaguya se fue rápidamente a la escuela de nuevo, porque aún no terminaban las clases, ella se había escapado con sus poderes probablemente.

-Sí… sigue pensando que soy un vago y un flojo hermanito…

-¡Hikari! ¡Código Cero dice que encontró algo! –BB sonó con una alarma.

-Je, sacaré una lata de gaseosa del refrigerador y salgo… -Hikari se levantó y comenzó a recuperar fuerzas mientras bajaba, las recuperó cuando ya logró sacar la gaseosa del refrigerador, la cual se tomó de un solo trago. –Okey… a ver qué hay.

Hikari se tele-transportó con Código Cero, que estaba a las puertas de una fábrica, ella apenas llegó tiró abajo las puertas y pasaron, la fábrica era enorme y producía en masa los robots que atacaron a Hikari.

-Okey… esto es lo que hay…

-¿Listo para abollar un grupo de robots? ¡Vamos a pulverizarlos! –Los robots guardias se prendieron y centraron su visión en Hikari.

-Corrección Cero… ¿Lista para abollar ese grupo de robots antes de que me pulvericen a mí? –Hikari creó una pistola de gancho con BB y se impulsó arriba de la fábrica, las máquinas lo siguieron y Cero saltó a la más cercana para destrozarla.

-¿Interrumpí tu almuerzo 9029?

-Ahora que lo mencionas Cero… Mi almuerzo fue una lata de gaseosa, súper equilibrado, ¿no crees? –Ella rió y saltó al otro robot, Hikari seguía saltando de metal en metal con su pistola de gancho.

-¡Tenemos visitas! –Hikari se detuvo un momento en una viga para ver quién hablaba, vio al grupo de las cinco Gatos, Gato Amarillo, Violeta, Negro, Celeste… y Blanco… esta última lo miraba con algo de picardía al hablar. Ellas estaban del otro lado de la fábrica, detrás suyo había una puerta enorme. –Es él… mmm… no está nada mal, pensé que él sería más feo… lastima, lastima.

-¿Lastima? ¿Por qué? ¿Querías que te invite una copa? –Hikari se volvió a concentrar en la realidad y esquivó a las máquinas.

-Ja, ja, eres todo un galán, ¿no? –No eres el primero en hablarle así a Blanco, pero… tampoco serás el último. –Violeta reía un poco mientras hablaba, Amarillo negaba con reprobación mientras la oía.

-Claro que no pretendía ser el último, ¿Nunca viste a un Gato? No pueden estar en el mismo lugar siempre.

-Oh, pero hay algunos gatos que se la pasan el tiempo durmiendo, ¿Quizás soy así? –Blanco entonces se despidió con la mano y comenzó a huir por una puerta detrás de ella, gato Amarillo se sentó en una silla con rueditas y sacó su laptop, comenzó a presionar algunos botones y más máquinas se prendieron para atacar a Hikari, Violeta y Celeste se pararon a su lado, Negro caminaba de un lado a otro.

-Demonios no puedo dejar que se vaya…

-No podemos, Hikari, no me dejes fuera del juego. –Cero había derrotado a la primera oleada de máquinas, pero la segunda, activada por Amarillo, se acercaba a ellos.

-Bueno, tú solita te metiste al juego, ¿verdad? –Cero saltó y destrozó dos robots de un solo golpe.

-"Son menos resistentes… pero son más… ¿Cambiaron calidad por cantidad?" –Hikari miró como Cero avanzaba sin detenerse, destrozando robots de un solo golpe. –"No… hay algo más…"

Entonces una bala fue disparada, por Gato Negro, Hikari la esquivó con facilidad, pero no se esperó que la bala al explotar creara humo multicolor, Hikari saltó para evitar olerlo, pero fue golpeado por el robot, que lo envió hacia las Gatos.

-Mío, nya. –Negro saltó a atacarlo con una espada que tenía en la mano, Hikari quiso usar sus poderes, pero no le respondían, entonces usó su prótesis para crear una espada y detener el ataque.

-Nope, lamento decepcionarte, pero no será así, será algo más difícil. –Hikari crea un cañón de pistola en una parte de la prótesis, Negro lo nota y salta antes de que Hikari dispare, luego él convierte la espada en un gancho, que lo lanza hacia ella, Negro lo salta para evitar el ataque, pero Hikari tenía un plan de respaldo, cambia la dirección y atrapa la silla de gato Amarillo.

-¿¡EH!? ¡Nya!

-Tengo un premio de consolación. –Hikari la jala hacia él, con su silla, todas las gatos reaccionan, pero es tarde, Hikari la atrapa y la inmoviliza con las manos. –Cero, transporta.

-Entendido. –Cero salta y le toca la espalda, ambos aparecen en la azotea de un edificio.

-Ahora… Cero, tengo que encargarme de ella, necesito… -Una espada le atraviesa el pecho. –C-C-Cero… -Ella le atravesó el pecho con la espada de Negro, pronto el resto de las gatos aparecen.

-Mal, mal, mal, confiaste en quién no debías, ¿verdad? –Incluso Gato Blanco estaba ahí.

-Sí, que mal, Hikari, mal, mal, mal.

-C-Cero… -Trata de decapitarlo, pero Hikari revela que tiene decenas de explosivos en su interior y se explota a sí mismo, llevándose con él toda la azotea.

-¿D-Dónde estoy? Nya… ¿Q-Qué harás… conmigo? Nya… ¡Ayuda! –Hikari está en un laboratorio, allí había colocado en una celda a Gato Amarillo.

-Bien, verás, tengo planes para ti.

-¿C-C-C-Cuáles… P-p-p-p-planes? –Hikari la encadenó a la pared. –N-N-Nya… ¿M-M-Me vas… a … matar?

-Oh, no, no, solo te voy a dejar… muy, muy herida.

-¿¡H-H-H-Herida…?! –Hikari se acerca a ella y usando su prótesis crea un bisturí, ella se pone pálida y lo mira. –¡NO! ¡POR FAVOR! ¡NO!

-Entonces coopera conmigo y seré… piadoso, ¿Sí? –Ella asiente rápidamente, desesperada. –Eso es, eso es, ahora… dime, ¿Quién contrató a esa Semi-Espíritu que se hizo pasar por Cero?

-L-La jefa… Takani-san…

-¿Takani? ¿No es la hechicera que fue secuestrada por Gato Blanco? –Amarillo asiente desesperada. –Quién diría que la querida doctora estaría detrás de eso, peor… contrató a la Semi-Espíritu equivocada, Cambia Formas es muy peligrosa, de hecho, tengo que encargarme de ella.

-¿P-Por qué es tan peligrosa…? ¿C-Cómo supiste que era falsa? –La chica respiraba muy agitada.

-Porque ella está loca de remate, tanto o más que Yami, puede conocer mucho de las personas que ve y que mata, probablemente haya eliminado a Código Cero, pero eso no es lo importante, ella al transformarse en alguien adquiere información y cuando regresa a la normalidad se olvida de todo, por eso deja escritos de lo que ha conseguido… la sacaré del juego antes de que ocurra, me enteré porque mezcló información a la hora de hablar, ahora Amarillo, ¿Por qué trabajan para la doc?

-E-Es… por la paga… p-p-pero no solo el dinero… ella… ella les dio unos juguetes… a las otras… hoy se supone que me los daría a mí…

-Ya veo, ya veo, pero si te pago más que ella, ¿Te vendrías a mi equipo?

-N-N-No… t-tenemos principios…. –Hikari suspira.

-Lo sabía… ahora… -Comienza a cantar la canción de Miku a baja frecuencia, poco a poco Amarillo… va sintiéndose extraña. -¿Qué decías?

-¡H-Haré todo para ayudar! ¡En verdad! ¡Pídeme lo que sea! Y-Y no es necesario que pagues… de verdad, lo hago por… por gusto.

-"Me siento mal por hacerle esto a una chica… aunque sea criminal, pero… el fin justifica los medios, tengo que encargarme de Cambia Formas, antes de que sea demasiado tarde…"

-Y bien, Amarillo, ¿Quieres ayudarme?, empecemos, necesito saber por qué esos robots me afectan tanto y por qué se enfocan en mí, además, dime si hay más fábricas de construcción. –La chica asintió de inmediato.

-S-Sí, te diré lo que sé, b-bueno… de hecho soy la que mejor sabe… Takani-san, ha dado instrucciones precisas para la construcción de esos robots… nosotras… nosotras solo conseguíamos información y piezas, por lo que sé, solo hay una fábrica de robots… y… bueno… el asesinarte… creo que ella lo programó…

-Entonces el trabajo está hecho, cuando Cambia Formas nos transportó, robé algo de energía de ella, lo suficiente para crear un clon mío que vaya donde ella quería ir y nosotros a mi escondite, el clon tenía suficientes explosivos encima para cargarse esa fábrica, dados los datos que BB recopiló, la azotea donde apareció, fue la de la fábrica, así que está hecho…

-¡¿Y mis hermanas!?

-¿Hermanas? ¡Oh! ¡El resto de gatos! Ellas aún viven y están bien, tras la explosión BB no reconoció ningún elemento animal en la zona, así que escaparon a tiempo o las salvó Cambia Formas, de cualquier modo, la fábrica no existe, Takani tendrá que esconderse en las sombras por un tiempo, por cierto Amarillo, hasta entonces, ¿Te quedas trabajando conmigo? –La chica asintió inmediatamente, Hikari sonrió. –Bien, por qué hay algo en lo que estoy trabajando.

Hikari soltó a Amarillo y la guió por los pasillos del laboratorio, hasta llegar a una enorme sala de computadores, pantallas y centrales de información, todas las pantallas tenían imágenes de crímenes, asesinatos en su gran mayoría, las computadoras estaban conectadas a cámaras de seguridad que le permitían ver la ciudad.

-W-Wow… Nya…

-Sí, creo que es algo impresionante, pero ese no es el caso, ya que podemos descansar un poco de Takani y el asunto de sus robots… probablemente la veamos en un futuro, pero eso es asunto de otro día, necesito que me ayudes en esto, tú que eres tan hábil en sistemas y esas cosas.

-¿E-En qué…?

-Responder a esta pregunta… -En todas las pantallas las pantallas aparecieron círculos encerrando alguna zona de la imagen y se pudo ver qué es lo que tenían en común, en todas aparecía alguien. –Quiero saber, quién es en realidad Akarui Yami. No puede simplemente haber aparecido así… de la nada…

En un lugar muy lejano de allí, la hechicera/doctora, conocida como Takani, caminaba por las ruinas de su fábrica de robots, completamente destruida y convertida en casi ruinas.

-Tch… maldito Anti-Espíritu… pero no importa, nos volveremos a ver las caras, no estoy dispuesta a dejar que ganes, no… oh no, no, no, ¿Crees que por ser humana no puedo ser una amenaza para ti? Bien, si no puedo ser una amenaza, por lo menos seré una piedrita muy molesta en tu zapato…

-Así, se habla Takani-chan, así, se habla. –De entre las sombras, una figura sale, saludándola alegremente.

-¡M-Maestra!

-Sí, soy yo Takani-chan, mira el desastre que has hecho, te di los instrumentos para matar al chico, pero no pudiste eliminarlo, bien… supongo que me pasa por confiar en alguien novato en el área, después de todo… soy una experta en el ámbito de… intentar asesinar a Senpai, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, está vez… lo haremos a mi modo… -Una sombre envuelve el lugar y ambas desaparecen.

-¡Tohka! ¿Puedes llamar a Hikari? –Shidou y las chicas acaban de llegar a casa, es algo tarde, pero aún no es de noche.

-¡Okey! –Tohka sube las escaleras hasta el cuarto de Hikari y entra. –Hikari… oh… -Tohka baja las escaleras, sonriente, todas la miran confusas.

-¿Tohka?

-Está dormido, no quise despertarlo, se veía muy cansado… -Shidou suspiró.

-Siempre está dormido… es un vago…

-Ciertamente... –Dijeron al unísono todas las chicas, excepto Kotori, que asintió y prendió el televisor.

-BB… pon el despertador antes de nuestra cita con Artemisia… -Hikari hablaba lentamente, estaba bastante cansado.

-Acabamos de llegar hace unos segundos…

-Lo sé y Tohka entró apenas llegamos… ese segundo… curioso… debió pensar que estaba dormido… porque tengo los ojos cerrados… pero de hecho sí voy a dormir…

-S-Shidou… -Kotori señaló el televisor, estaban dando unas noticias. –Extraña explosión en una fábrica supuestamente abandonada… se cree que se realizaban maquinarias ilegales, grabaciones muestran que un tipo se suicidó junto con un grupo en el techo usando unos explosivos…

-Esperen… ese se ve como… -Shidou y las chicas se acercaron a la pantallas, reconocieron la vestimenta de Hikari.

-¡HIKARI! –Hikari al escuchar el grito de todas, se ocultó bien en sus mantas, no saldría de su cama… al menos hasta la cita con Artemisia… bueno… ella y el resto de hechiceras que reconoció la letra de Hikari…

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