290 Destino: Ciudad de la Colonia Marciana

Los engranajes de la cabeza de Wang Baole giraban rápidamente. Esto no era un asunto menor. Era algo que podía decidir su futuro. Decidió que necesitaba pensarlo un poco.

El Señor de la Secta de la Universidad Dao Etéreo sabía que tales decisiones no podían ser precipitadas. Esperó pacientemente la respuesta de Wang Baole. Después de media hora, Wang Baole pensó por un rato y luego levantó su cabeza y miró al Señor de la Secta de la Universidad Dao Etéreo. Tomó sus puños e hizo una reverencia.

—Señor de la Secta, no tengo ni idea de cuál es el mejor para mí. ¿Qué piensa usted?

—¡Pequeño bribón! —El Señor de la Secta de la Universidad Dao Etéreo sonrió y miró a Wang Baole con aprobación.