655 Nuevo y viejo

—¿No estipulen cuál es la verdad del mundo y cuál no la es?

Al escuchar la firme declaración de Lucien, Douglas, Fernando y Brook cayeron en un breve silencio. Era cierto que solo porque ellos creyeran que la verdad del mundo no era azar no significaba que ciertamente no lo fuera. Sus pensamientos eran solo sus propias ideas. No eran los portavoces de la naturaleza después de todo.

Tras diez segundos, Douglas lanzó un suspiro.

—Demostraré que la verdad del mundo no es azar con experimentos. De hecho, ¿alguna vez se te ha ocurrido que la nube de probabilidades no exista en absoluto? Aquello que indica la función de onda es la proximidad de electrones que coincide con tales probabilidades, pero un solo electrón. No existen en todas partes pero tienen una ruta fija que está estrechamente relacionada con la distribución probabilística. Solo están desordenadas después de pasar a través del monocristal porque no podemos observarlas y confirmarlas.