Capítulo 595: Perros y Gatos

"¡Ugh!"

Miku se sintió muy insatisfecha, la escena del baño la dejo en shock momentáneo y acuso de Yuki de un sucio pervertido, sin admitir que fue ella quien fue al baño sabiendo que ahora era un hombre por lo tanto, era su culpa sin embargo ella que aun es mujer por dentro, seguía siendo irrazonable, lo cual dejo indefenso a Yuki, pero otro pensamiento siniestro paso por su cabeza que no pudo evitar estremecerse y mirar a Yuki con frialdad..

"Tu... Tu... Me viste ¿cierto?"

"...."

Yuki no sabía cómo responder a esta pregunta, ya que si vio todo el esplendor del cuerpo de Miku, tanto sus pechos regordete y también su parte inferior cuando el entró al baño....

"¡¡Te atreviste a mancillarme!! ¡Hombre inmundo!"

Después de ver a Yuki girar la cabeza negándose a mirarla, Miku apretó los dientes con odio, esto era lo peor su cuerpo puro que no habia sido visto por ningún hombre hasta ahora ya fue visto por este hombre...

Debe saber que Miku tenia un alto cuidado en su cuerpo, ya que incluso se negó a acostarse con ese productor de mierda, incluso le costó su carrera como Idol, aun así Miku no se doblegó...

"Era inevitable, no puedes culparme por esto, yo tampoco sabía nada, además tu acabas de verme, estamos a mano..."

Yuki intento defenderse, pero era inútil, Miku no escucho.

Después de esta pequeña escena Miku una vez mas tuvo su ataque de Misandria, así mismo como no podía desquitarse con ella misma ya que le dolía si se hacia daño, Yuki fue su objetivo perfecto, pero esto también la dejó sin saber que hacer, ya que Yuki tenia su cuerpo y no quería dañar su cuerpo, además no podía ya que Yuki estaba unido a Gabriel y por consecuencia tenía sus poderes...

Pero habia otra cosa que molesto a Miku...

"¡Te ves terrible! ¡No tienes delicadeza!"

Yuki al no ser mujer, no le importaba su 'cuerpo' o mejor dicho no tenía la 'delicadeza y dedicación' de una mujer, por lo que sus acciones eran muy masculinas, esto hizo infeliz a Miku.

Nunca pensó que llegaría el día donde miraría su propio cuerpos actuar tan desvergonzada, Yuki se acostaba en el sofá sin preocupaciones y comía sin importarle el cuidado del cuerpo femenino, así mismo Yuki continuó con su rutina diaria de ejercicios que dejó sin palabras a Miku...

"Tu... ¡¿Que haces con mi cuerpo?!"

"Ejercitándome, lo hago todos los días, no te preocupes..."

"¡Pero es mi cuerpo!"

Ver su cuerpo colgada de un barra de metal así mismo su cuerpo cubierto de sudor, dejo estupefacta a Miku, pero...

(¿Me veo así de bien? ¡Soy tan sexy! )

Como una mujer a quien le gusta personas de su mismo sexo, Miku tuvo que admitir que su cuerpo estaba bastante caliente.

Era muy sexy y su cuerpo cubierto de sudor la atrajo aun mas, bueno esto era de esperarse, ya que actualmente era un 'hombre'...

(No, no, no... ¡Contrólate Miku! ¡Ese es un hombre!)

Miku se palmeo la mejillas y se obligó a calmarse, ese era su cuerpo, pero seguía siendo un hombre quien lo ocupa, Miku estaba perdida sobre que hacer ahora mismo, definitivamente le atraía su cuerpo, pero también sintió asco...

(¡Ugh!)

Esta es la razón por la cual estaba deprimida, odia a los hombres y ahora se convirtió en uno, además que su cuerpo hermoso ahora esta ocupado...

No fue hasta después del medio día que nuevamente Miku y Yuki hablaron, ambos ahora estaban tranquilos.

"Sugiero que vivamos juntos, hasta que descubramos como regresar a la normalidad..."

"¡Rechazado! ¡Sobre mi cadáver y permito que un hombre viva conmigo!"

Por supuesto el hombre ahora era ella, pero Yuki simplemente se encogió de hombros, esta casa le pertenece por lo que Yuki no podía hacer nada.

"Esta casa es muy grande, podemos vivir bien ambos, además será por poco tiempo, hasta que descubramos que esta pasando."

Yuki trató de convencerla nuevamente pero fallo.

"¡No! ¡Y es mi última palabra!"

Yuki suspiro y se encogió de hombros, se levantó y comenzó a caminar a la puerta, sin embargo fue detenido por Miku.

"¿A donde vas?"

" A mi casa, ya que no puedo quedarme aquí, quiero regresar"

Yuki no vivirá en la calle, por lo que era la acción mas lógica, aun así Miku frunció el ceño...

"¡¿Quieres regresar a esa perrera?! ¡No, me niego a que mi cuerpo viva allí!"

La casa de Yuki es un apartamento pequeños, no era lujoso pero tampoco grande, estaba bastante bien para alguien de su edad, sin embargo Miku lo encontró insoportable en especial a imaginarse a su cuerpo en ese apartamento, aun así Yuki ignoro sus palabras groseras ya que esta mujer era tan irracional.

"Entonces que quieres que hacer? ¿O eres tu quien vivirá en mi casa?"

Lógicamente no habia problema ya que Miku ahora tiene su cuerpo, sin embargo Miku volvió a negar con la cabeza.

"No, no regresare a esa perrera"

"¿Entonces que quieres hacer?"

"..."

Ambos se miraron por unos segundos hasta que Yuki se volvió a sentar...

"Bueno, viviremos juntos a partir de ahora, cuídame bien..."

"..."

Esta vez no hubo refutación por parte de Miku, aunque estaba insatisfecha, sabia que sus condiciones eran imposibles, no quería que su cuerpo viva en ese apartamento pero tampoco quería vivir allí, por supuesto también habia la opción de alquilar otro apartamento mejor, pero Yuki era demasiado perezoso para recordárselo a Miku.

Después de discutir su vida a partir de ahora, ambos aun no tenían pistas y como no recordaban nada, al final Miku decidió echarle la culpa a 'esa' cosa que le entregó el cristal Sephira, aun así no le dijo nada a Yuki, sobre como obtuvo sus poderes. .

Llego la noche.

Como era inevitable, a partir de ahora vivirán juntos, las reglas no podían faltar...

"¡Si vas a vivir en mi casa son mis reglas! Si te atreves a hacerme algo, te juro que te atacare..."

Amenazando con un cuchillo en la mano Miku desconfiaba al extremo de Yuki por lo que antes de entrar a su habitación amenazo...

Yuki puso los ojos en blanco, esta mujer ahora tiene su cuerpo y lo raro que se vio cuando un hombre amenaza con un cuchillo a una mujer por el intento de violación.

Aún así Yuki no le importa y entró al cuarto correspondiente, aunque quería enseñarle un lección a esa mujer, ese era su cuerpo y el no es masoquista para golpearse así mismo, por lo que tuvo que renunciar a su idea..

Y como perros y gatos, este día llego a su fin...

"Hm..."

A la mañana siguiente Miku abrió lentamente los ojos, ella era algo débil por las mañanas, por lo que se quedó en la cama por unos minutos...

"Efectivamente esto no es un sueño"

Miku se lamento después de mirar sus propias manos, realmente quería que esto fuera una pesadilla y que cuando ella despertará estaría de nuevo en su cuerpo.

Lástima que se que sus deseos no se cumplieron y aun siga en el cuerpo de un hombre.

"¿Hm?"

Afortunadamente sus lamentos no dudaron mucho, ya que una fragancia exquisita entro en su nariz que hizo que Miku no olvidara ese atractivo olor...

"¿¡Alguien esta cocinando?!"

Miku no recuerda cuando fue la última vez que toco la cocina aun así no pudo evitar seguir el rastro de comida deliciosa.

"Buenos días"

Y cuando llego se sorprendió cuando vio al chef, o mas bien se sorprendió al verse a sí misma en la cocina...

"Tu... ¿¡Que haces?!"

"Cocino....¿¡huh?!

Saliendo del shock momentáneo, Miku corrió y agarro ambas manos de Yuki, los reviso de arriba y abajo, solo cuando no encontró nada malo fue que suspiro de alivio..

"¿Estas loco?! ¿Qué haces en la cocina? ¡Que pasa si lastimas mis manos! "

Así es esto es lo que mas le preocupaba a Miku, como Idol su cuidado sobre su cuerpo siempre fue lo primero, así como su voz.

Por lo que miro a Yuki con rabia...

"No lo hare, estoy acostumbrado a cocinar..."

"¿Quién te cree? Es mi cuerpo que no se te ¿¡uhg?!"

Miku no termino de hablar hasta que Yuki no pudo soportarlo mas que metió a la fuerza comida en su boca.

Miku abrió los ojos sorprendida, hasta que su expresión poco a poco cambió, ya que ese onigiri estaba muy delicioso que no pudo evitar llevar una mano a su mejilla y masticar lentamente, ante una acción muy fémina, Yuki se estremeció así mismo juro en su corazón...

(¡Debo recuperar mi cuerpo!)

Se volvería loco a este paso...