Una profecía señalaba mi fin. La luz extinguiría a las tinieblas. Pero la oscuridad es algo que jamás desaparecerá. Pero ese pensamiento cambió cuando ella llegó y supe que podía derrotarme ya que con solo verla quise tenerla, su luz me atraía. Y sin darse cuenta la oscuridad se enamoró de la luz. Y el ángel le dió al demonio la redención.