Emociones complejas

"Yo, bueno... Soy Adán, el primer humano, Padre de la humanidad, un gusto"

Con una sonrisa amistosa, Adán inclino levemente la cabeza, en señal de saludo.

Dejando a toda la sala estupefacta con su revelación.

"T-tu... Si no quieres decir quién eres, solo no lo digas"

Con un breve tartamudeo, Rias respondió, sacudiendo la cabeza con decepción por haber esperado mucho de un desconocido.

Con una mirada divertida al ver la reacción de Rias, Adán respondió seriamente.

"Querida Rias, no te confundas, yo no miento"

Mirando la seriedad de sus palabras, Rias dudo, después de todo es demasiado extraño que un chico de 16 años, venga diciendo que es el primer humano, un ser que existió hace miles de años, sin contar que se conoce como el hermano de Issei, y ella está segura que Issei, no es un ser milenario.

(Pero no veo ningún signo de mentira en su cara, además ¿Qué ganaría mintiendo sobre ser el primer humano? Mmmm)

Mientras Rias reflexionaba, Kiba con una cara vacilante, hablo.

"Entones... Adán, ¿Cómo estas vivo? No debería ser posible que un humano viva más de 150 años, ni mucho menos miles de años, sin contar que eres hermano de Issei, y según nuestras investigaciones, Issei no supera los 16 años de vida, simplemente no veo como puedas ser el Adán que confirmas... Disculpa si mis preguntas son intrusivas"

Al escuchar a Kiba, Adán suspiro, dándole una mirada de reojo al aun aturdido Issei, explico.

"Veo tu duda. Haber, mmmm, como explicar... Mira para empezar tienes que definir lo vivo, la verdad es que cuando la gente muere de forma carnal, no dejas de existir, si no que te vas al reino de las almas, y en cierta forma sigues viviendo, no entrare en detalles más profundos por ahora porque sería una molestia, solo tienes que saber que la única forma de morir de verdad es que mueras en tu forma de alma, ósea que tu alma deje de existir directamente, en resumen la única forma de morir de verdad es que te maten en tu vida de alma, o la destruyas tú mismo, es por eso que antes dije que, si Issei muriera, lo buscaría en el reino de las almas para traerlo devuelta, pero eso en cierta forma tomaría mucho tiempo y seria aburrido. Y bueno, esa es la razón por la que incluso después de que Eva y yo muriéramos de forma física, seguimos juntos en la muerte, viviendo la misma vida normal, alejado de todos y disfrutando del uno al otro. Y referente a por qué estoy vivo de forma física ahora... Bueno es una historia mucho más larga y dudo no tengo ganas de contarla, quizás otro día les cuente..."

Terminando sus palabras murmurando, Adán dirige su mirada hacia Issei, sin percatarse del leve temblor en el cuerpo de Akeno.

Observando la mirada triste de Issei, Adán habla.

"Y tu hermanito... no tienes que pensar demás, después de todo si algo aprendí a lo largo de la vida, es que la familia no siempre es con quien compartes sangre. La familia son todas las personas con la cual puedes compartir tu vida, y a la vez personas que te quieren en su vida, solo aquellos que te aceptan por quién eres, aquellos que harían cualquier cosa por ti y aquellos que te aman, son a los que puedes llamar Familia. Y para mí, Issei, eres parte de mi familia, al igual que nuestros padres, ahora la pregunta es, aun sabiendo esto ¿Aun nos consideras tu familia?"

Con una suave sonrisa, Adán pregunta.

Issei, ya tiene la mente en un caos aun mayor, todo el día fue muy estresante para él, una persona que hasta hace 1 día era completamente normal.

Desde saber todo lo sobrenatural, hasta saber que su hermano que hace unos días se veía completamente normal, aparte de su apariencia perfecta, ahora dice ser Adán, el primer humano, e incluso técnicamente es su Ancestro.

Toda esta información lo deja sin saber que hacer o decir, incluso sintió ganas de llorar por alguna razón.

Pero al escuchar a su hermano hablar, y saber que aún lo considera como familia, le calentó el corazón.

Issei no es ningún genio, ni un gran talento, e incluso su personalidad deja algo que desear, pero pese a todo, es una persona de corazón amable, y siempre considero a sus queridos como prioridad, y gracias a esta mentalidad, sin que el supiera, se ganó el respeto y el cariño de su hermano, Adán.

Y gracias a este pensamiento sencillo, no dudo, ni por un segundo, en confirmar la hermandad con Adán.

Mirando la suave sonrisa de su hermano, mientras sentía que sus ojos se le nublaban, Issei respondió.

"*Sniff* S-sí, siempre serás mi hermano y Eva mi hermana"

Con una gran sonrisa Adán responde.

"Eso pensé"

Con un giro de su cabeza, Adán observa la reacción de toda la 'Nobleza' de Rias, y lo único que ve, lo preocupo un poco, las miradas esperanzadas de Kiba, koneko y Akeno, solo pueden traer un futuro mortal si no les obligaba volver a la realidad, después de todo hacia donde se están dirigiendo sus pensamientos es un camino muy peligroso para ellos ahora mismo, sin esperar a que su hundan más en la felicidad y falsa esperanza, les habla.

"Ni siquiera lo piensen, puedo ver sus miradas Akeno, Kiba y Koneko, me da a suponer que perdieron a alguien importante, y comprendo su dolor, incluso yo he sufrido por ello, pero si piensan ir al reino de las almas ahora mismo, solo sería su muerte, después de todo el reino de las almas tiene su guardián, con su fuerza intentar entrar a la fuerza, solo les espera la muerte, y no esperen que el solo les deje entrar y llevarse un alma, después de todo está ahí para evitar eso, aunque..."

Akeno, que por un breve momento tuvo esperanza de recuperar a su madre, después de escuchar Adán volvió a caer en la desesperación.

Aunque no les dijo que es imposible sacar un alma, les dijo que existe un guardián, y si está ahí es porque debe ser muy poderoso, claro ellos podrían conseguir fuerza, pero según las palabras de Adán existe el riesgo de que mueran de verdad en su forma de alma en cualquier momento, dejándola en una profunda crisis.

Pero al escuchar su última palabra, le dio otra breve esperanza, con un rápido movimiento, se mueve del lado de Rias, y mueve hacia el sofá de Adán sentándose a su lado, tomando sus manos fuertemente le pregunta.

"¿¡Aunque!?"

Observando atentamente la expresión afligida de Akeno, junto a sus hermosos ojos nublados, causaron de forma inconsciente un pequeño sufrimiento en Adán.

No le gusta ver sus seres queridos con expresiones similares, cada vez que ve sus expresiones, su corazón se estremece de dolor.

Siempre fue sobreprotector con su gente, aunque sabe que el dolor los puede hacer crecer, prefiere cargar el peso de todo, a ver que sus cercanos sufran.

No es un héroe, pero tampoco un villano, siempre estuvo en sus ideales de que, si puede ayudar a un ser querido, lo hará.

Lo que más le molesta es que no comprende porque siente este dolor, al ver la cara de una persona, que conoció hace no más de 30 minutos, dejándolo completamente indefenso.

Aunque en lo más profundo de su corazón, puede ser que sepa perfectamente porque, solo que se niega a aceptarlo, ya sea por miedo o por precaución, solo el tiempo lo dirá.

Pensando un poco, Adán le habla a Akeno.

"Aunque no se si en este mundo sea igual, el guardián de dónde venimos nosotros se llamaba Hades, una persona que prefiere la soledad, pero extremadamente fuerte, al menos si lo medimos en fuerza solo está un poco más debajo de Zeus y Poseidón, pero sé que puede destruir un mundo pequeño con solo un golpe si quisiera, para que tengan en cuenta la idea de su fuerza... A lo que voy es que, si él guardián de almas de este mundo es el mismo que el mío, podría conversar con él, cuando morí físicamente, y entramos al reino de las almas, tuve unos pequeños problemas con Hades, quería separarme de Eva, por lo cual nos llevó a pelear, al final nos dimos cuenta de que teníamos mucho en común y dejamos la pelea a un lado, de vez en cuando lo íbamos a visitar con Eva... Si es el mismo puedo mediar con él por las almas que buscan, pero no puedo prometer nada, después de todo no sé cómo se rige todo por acá, sé que puede sonar confuso el hecho de que hable como si no fuera de este mundo, pero dejemos esa conversación para otro momento, tiempo tendremos mucho"

Terminando de hablar, mientras Akeno asimila la información, Adán le habla a Rias, sacándola de su silencio.

"Rias, te escuche decir que eres un demonio ¿Me puedes explicar un poco?"

"¡S-si! Mmm para empezar debemos hablar de los orígenes, es algo parecido a lo que se explica en la biblia, nuestro ancestro Lucifer, solía ser un ángel, pero se terminó rebelando contra Dios por razones desconocidas para nosotros, algunos dicen que fue porque Dios lo oprimía, y otros porque se aburrió de ser un ángel, incluso existe el rumor de que no quiso someterse a Dios ya que eran igual de poderosos, pero nunca lo trato como un igual, pero como dije antes todo son rumores, después de que se rebeló y fue derrotado junto a los ángeles caídos que lo acompañaron en la guerra, muchos murieron, dejando solo un puñado de ángeles caídos que fueron expulsado de los cielos hasta el inframundo, después de la guerra los ángeles caídos empezaron a odiar a Lucifer, culpándolo de todo, después de todo muchos ángeles caídos terminaron muertos, dejando solo un puñado de ellos, gracias a esto, los ángeles caídos también se enemistaron con Lucifer, declarándole la guerra abiertamente. Después de que Lucifer fuera desterrado se convirtió en un demonio y se casó con Lilith, la primera humana, y con ella tuvo 72 hijos que dieron inicio a las grandes casas del inframundo hasta que..."

Antes de que Rias pudiera seguir explicando, sintió que todo el aire de la habitación se solidificaba, haciendo que todos dentro dejaran de respirar, en pánico miro hacia Adán, percatándose inmediatamente del problema, reuniendo fuerzas intento disculparse.

"A-adán yo n-"

Pero antes de que pudiera seguir explicándose todo volvió a la normalidad, como su nunca hubiera pasado en realidad, seguido por las palabras de Adán.

"Rias... Dime, esta Lilith de la que hablas... ¿Cómo se ve? ¿Me la puedes describir?"

"S-sí, ella es muy hermosa, voluptuosa, aproximadamente mide 1.70, cabello negro y largo que le llega hasta la cintura, levemente ondulado, junto con ojos de un azul claro brillante y tiene una piel muy blanca, junto con un pequeño lunar bajo el ojo, adem-"

"Basta, *suspiro* me quedo claro, es ella"

Con una mirada nerviosa, Rias intento ver algún enojo o tristeza en la cara de Adán, pero se sintió completamente sorprendida al solo ver decepción en él, así estuvo durante unos 5 minutos, creando una atmosfera muy incómoda con todos, hasta que junto a un pequeño suspiro volvió a hablar.

"¿Tan bajo callo? ¿Todo por qué? ¿Un estatus inservible de 'Reina'? *suspiro* que estupidez, dime Rias, ella... ¿Sigue viva?"

Escuchando murmurar a Adán, Rias se movía nerviosamente, hasta que escucho su pregunta, a lo que ella dudo.

Rias no sabe qué hacer, para empezar, no sabe cómo reaccionara Adán con todo, ya se ve que algo lo afecto todo esto, y si habla algo de que no debe puede ser considerada una traidora en su raza, cosa que no quiere.

Pero después de pensarlo bien, el hecho de si ella está viva o no, no es algo oculto para las demás facciones, si Adán no se entera por mí, igual se enterará por otra persona.

Pensando en eso, miro hacia Adán y respondió.

"Si... sigue viva, después de la última guerra, cuando se pensó que los demonios iban ganando, Dios personalmente bajo y derroto a todos los Reyes demonios junto a Lucifer y Lilith, hiriéndolos gravemente en menos de 5 minutos, pero por alguna razón no los mato y se fue tan rápido como llego, ese día... acabo toda la guerra, dejando algo de paz hasta el día de hoy, Lucifer y Lilith siguen reinando hasta hoy..."

Cuando escucho eso, Adán llego a entender que al parecer Lilith también abandono su humanidad, creando muchas emociones complejas.

"*suspiro* ¿Quieren que les cuente una pequeña historia?"