El gran día (+18)

Ha pasado ya una semana desde que Issei consiguió una novia, no solo se ha vuelto más animado, sino que parece que su nivel de pervertido se contuvo un poco, al menos ya no lo golpean a diario por espiar en la escuela.

Aunque todos en la casa están algo preocupados de que sea una broma cruel, han dejado de lado un poco las preocupaciones al saber que Issei habla a diario con ella por mensajes y diferentes plataformas, incluso mostró fotos juntos a la familia aliviando los corazones.

Hoy llego el día de la gran cita del joven, causando gran revuelo en la casa para el desafortunado que no puede dejar de avergonzarse.

"¿Hijo te bañaste?" Pregunta Miko

Al mirar lo grande que esta su hijo y al saber que al fin tendrá su primera cita no puede evitar estar emocionada y preocupada, después de todo ella es mujer y sabe que las mujeres pueden ser muy crueles cuando quieren.

Aunque una madre siempre amara a sus hijos sin importar que pase, no se miente a sí misma y sabe muy bien que su hijo puede ser algo especial, después de todo su perversión es algo conocido por todo su vecindario.

"Si madre, ya me duché, me lave los dientes, me puse perfume, incluso compre ropa nueva, ya me preguntaste todo 3 veces" Exclama Issei

Pese a su felicidad, Issei no puede evitar sentirse avergonzado, su madre lo ha estado agobiando todo lo que lleva de día.

No sabe que cada vez que le pregunta el mismo se pone nervioso por todo, maldición, incluso se bañó 3 veces del nerviosismo.

"Tranquila Mami ~♥, Issei se ve muy guapo hoy, después de todo yo misma escogí su ropa"

Eva también está muy emocionada con todo, cada vez que ve a su hermano le recuerda a Caín cuando consiguió su primera novia, una diosa menor de un panteón de batalla, aún recuerda lo nervioso que se volvió su hijo cuando se fue a proponer matrimonio, no importa la naturaleza agresiva de su hijo, pudo ver claramente que ese día se comportaba como un pequeño conejito asustado.

"¡Mph! Claro que si hija, mi Issei siempre se ve guapo, si la niña esa tiene buena vista no lo dejara ir" Dice Miko de forma orgullosa.

"¡Mamaa, me avergüenzas!" Exclama Issei con un rubor en su rostro.

"*Sniff* Mi hijo consigue otra mujer y ya se olvida de su madre"

Issei ya no ve la hora de irse, si se queda un tiempo más está seguro de que su tiempo de vida se agotará mucho antes.

"*Suspiro* Me voy madre, llegaré tarde hoy"

"Cuídate hijo, no te olvides de usar protección, aunque quiero nietos primero debes terminar la escuela~" Dándole un guiño Miko le responde a su hijo.

"Tehee~, a mí no me importaría cargar a mis sobrinitos antes hermanito~♥" Dice Eva juguetonamente

"¡MAMAAAA!"

"Oh, y este pequeño tomate porque grita"

Adán al bajar por la mañana, lo primero que ve es a su hermano gritando con un rubor furioso en toda su cara, sin duda es una mala manera de empezar el día.

"¡Adán~♥ nuestro querido hermano se va su primera cita! ¿Algo que decirle?"

"Oh ¿Es hoy?"

Adán observando a su hermano de arriba abajo solo pudo suspirar, aunque se vistió bien, todo lo que ve es un niño que le tiembla hasta las manos del nerviosismo.

Pensado un poco mira a Issei, frunce levemente las cejas, hasta que las relaja como su hubiera decidido algo, luego bajo las miradas de su madre y Eva, se acerca lo mira a los ojos para luego.

*Slap*

Bajo las miradas incrédulas que recibió por haber abofeteado a Issei, Adán le habla.

"Eres un hombre, compórtate como uno"

"A-dán"

"¡Cállate!"

Tomando a Issei del brazo, Adán lo lleva frente al espejo.

"Mírate, estás bien vestido, peinado, incluso perfumado, pero lamentablemente cuando te veo, no se ve ningún hombre, lo único que observo es un niño bien vestido y tembloroso"

"P-pero"

"Cállate y escúchame, vas a una cita, no a una guerra, levanta la cabeza y saca el pecho, deja de actuar como si fueras un ser inferior, si bien la niña es algo linda, no puedes rebajarte tú mismo, hazle saber que te valoras a ti mismo, jamás dejes que alguien vea tu debilidad mucho menos tu mujer, eres muy especial hermano mío, aunque no lo sepas ahora, tarde o temprano crecerás y serás como un dragón por los cielos, ahora compórtate como un hombre y dale a esa niña la mejor cita de su vida, no me hagas que me avergüence llamarte hermano"

Con una cálida sonrisa habla Adán, desde hace mucho sabe que su hermano es especial, después de todo puede sentir algo de energía divina dentro de él, aunque ahora esta dormida, solo es cosa de tiempo que despierte, aunque no sepa qué clase de energía sea, puede sentir que es fuerte, al menos al nivel de un dios de bajo nivel o incluso medio.

"*Sniff* S-si hermano" Responde Issei secándose las lágrimas, ahora mismo se siente muy cálido por dentro, aunque su hermano siempre lo metía en problemas, nunca lo abandono en los momentos que lo necesitaba, sintiéndose muy agradecido por dentro.

"Ugh aléjate, me mancharas con tus lágrimas, ten come una manzana te ayudara a relajarte, ahora lárgate rápido, no la hagas esperar"

"¡H-hai!" Recibiendo la manzana corre rápidamente hacia fuera con una gran sonrisa casi tropezando con una silla en el camino.

"*Suspiro* Este idiota"

Sentándose entre su madre y hermana, Adán suspira con cansancio.

"¿Adán era necesario golpearlo?"

Adán viendo a su madre que le daba una mirada llena de reproche, hablo.

"Él necesitaba volver en sí, no sé si lo viste, pero le estaban temblando las manos y piernas, tiene muy poca confianza en sí mismo, talvez que ahora que tiene novia crezca algo"

"*Suspiro* lo sé, ahora solo toca esperar. Voy la tienda a comprar ingredientes para el almuerzo, vuelvo como en una hora, les aviso cuando esté todo listo para que bajen a comer"

Con un pequeño suspiro Miko se levanta y se dirige hacia la cocina por su bolso, dejando a Adán y Eva solos.

Siguiendo la mirada de su madre saliendo de la caza, Eva no lo piensa dos veces y se levanta para sentarse en el regazo de Adán, enterrando la cabeza de este en sus grandes pechos.

"Si estás tan preocupado por él, porque simplemente no lo seguiste, sabes que para ti es fácil saber si alguien tiene malas intenciones o no"

Abrazándola suavemente por la espalda se deja descansar en sus suaves almohadas

"Podría, pero no puedo estar protegiéndolo siempre, estas situaciones son parte de crecer, si todo sale bien me alegro, pero si termina rompiéndole el corazón todo le servirá como experiencia, talvez lo ayude a madurar, es parte de la vida y solo le haríamos daño al evitar que lo experimente"

Adán no puedo evitar pensar en ello, por alguna razón siente que algo está mal, pero no comprende que es, el solo pensar que una niña se le acerque de la nada diciendo que se enamoró de su hermano le genera muchas dudas, pero cada vez que ve su sonrisa tonta mientras habla con ella no puede evitar dejar pasar el tema.

Mientras reflexiona, inconscientemente baja lentamente sus manos hasta alcanzar algo grande y esponjoso, causando que todas sus preocupaciones se alivien fácilmente.

[Por primera vez no seguiré mis instintos, solo espero no cometer un error] Pensó Adán, dándole un gran apretón al trasero de Evá.

"¡¡Mmmm~~♥!!"

Eva al sentir el apretón de su hombre, no pudo evitar excitarse, ha pasado tanto tiempo desde que pudieron jugar que el picor se vuelve más fuerte cada día.

"¡¡Mmh!!, estás tan animado querido~♥" Ronroneo Eva, sintiendo que algo duro le oprimía desde su área sensible.

Con un suave empujón, Eva comenzó a mover la cadera en círculos, moliendo la polla de Adán suavemente, causando que su pene se vuelva más grande, amenazando liberarse por sí solo de su pantalón captor.

"Sabes querido, se te ve tan guapo cuando te pones serio, el solo pensar en la cara que pusiste cuando abofeteaste a Issei me excita tanto ~♥"

"Fuuuu... ahora que pienso creo que llego nuestro momento, nos contuvimos mucho tiempo ¿no crees mi pelusa?"

Adán con sus manos apretando su trasero siente un deseo incontrolable de sentir su piel, metiendo su mano bajo su falda, aparta las bragas hacia un lado dando un gran apretón a esas burbujas que tanto lo atraen.

Al mismo tiempo, Eva siente olas de placer recorriendo todo su cuerpo, causando un lío mojado en los pantalones de Adán, que este sin pensarlo dos veces la toma fuertemente de los muslos y la carga hacia su habitación.

En el camino nunca cesaron sus juegos, besándose apasionadamente en el camino con sus lenguas bailando sin cesar compartiendo sus fluidos celestiales que tanto amán.

Adán abrió la puerta con una pata antes de caminar hacia la cama.

Eva siente que su corazón late salvajemente, quería seguir besándolo para siempre, pero Adán no le da esa opción dejándola en la cama él comienza a quitarse la camisa, dejando a vista su glorioso cuerpo que causaría envidia a cualquier hombre y lujuria a cualquier mujer, sin duda es el pecado original en persona.

Tirándola hacia un lado se posiciona sobre Eva, mirándola profundamente a los ojos mientras sus manos recorren suavemente su cuerpo, como si quisiera marcar cada centímetro de él en su mente.

Eva, sintiendo las manos de su esposo recorriendo su cuerpo suavemente, como si se temiera romperla, no puede evitar mirarlo con una expresión amorosa, que, sumada a su expresión excitada, la hace lucir tan linda y sexy a la vista de Adán.

"Te amo ..." Habla Eva con una voz sin aliento.

Adán le sonríe cálidamente mientras se acerca y le besa el cuello, dejando marcas rojas por donde pase, bajando lentamente hasta llegar a su clavícula.

Eva con una sonrisa tonta ve a su amado marcando su cuerpo, sus suaves manos se envolvieron sobre la cabeza de Adán jugando con su cabello sedoso que tanto le encanta.

Adán levantando un poco la cabeza empieza a quitar uno por uno los botones de su holgada polera, mientras su contacto visual nunca se rompe, Eva levantándose un poco, permite que Adán saque ágilmente sus sujetadores junto con su polera ya desabrochada, dejando libremente sus grandes senos.

Mirando la obra de arte frente a él, Adán no pudo evitar aturdirse, aunque lo ha visto muchas veces, nunca deja de impresionarse por la belleza de ellos, grandes montículos que, pese a su gran tamaño, siempre se mantuvieron erguidos, junto con su hermosa areola rosada, y su hermoso pezón del mismo color, causan grandes devastaciones en su mente.

"¡Ahh...!" De repente un fuerte gemido escapo de la boca de Eva, cuando sintió una sensación que tanto extrañaba en su pecho, tomando un puñado del cabello de Adán, Eva se retuerce mientras se muerde sus labios.

Su lengua recorría su hermoso pezón derecho, jugando ágilmente en círculos, succionando de vez en cuando sobre él, mientras con su otra mano masajeaba lentamente su otro pecho, aunque las manos de Adán no son para nada pequeñas, frente a los grandes pechos de su amada, sus manos no pueden cubrir ni un tercio de la redondez total.

Grandes pechos de copa E, increíblemente flexibles y blandos, junto a su sabor frutal que comparte todo el cuerpo de Eva, son simplemente la perdición de nuestro héroe.

"¡Mmmm ~~!" Ella gime en el momento que Adán muerde levemente su pezón, volviéndolos aún más duro de lo que estaban.

Soltando suavemente sus pechos, Adán, levanta su mirada para encontrarse con los ojos nublados y amorosos de su mujer, sonriéndole baja lentamente besando sus regordetes labios, saboreando su exquisito sabor a frutas, bajando lentamente hasta llegar a su cuello, succionando levemente todo a su paso hasta llegar a la parte baja de su abdomen, mientras más baja no puede evitar sentirse más embriagado, ellos son muy diferentes a sus hijos, para empezar el simple hecho de no tener que ir al baño los mantiene siempre limpios, todo lo que comen se transforma automáticamente en energía apenas toca su estómago, sin necesidad de digerir todo después, contando que todo su sudor tampoco tiene mal olor, sino que todo lo contrario, ya que, todos sus fluidos corporales comparten el mismo sabor dulce y frutal, junto con las feromonas que sueltan inconscientemente es simplemente la más alta droga para cualquiera.

Adán sin apartar la mirada de los ojos de su amada mientras baja, compartiendo con ellos todo el amor y cariño infinito que se tienen, hasta que se percata que está llegando a su preciado tesoro.

Tomando una profunda respiración en su parte baja, siente fácilmente incluso a través de su falda el exquisito aroma que desprende su hermoso gatito, haciendo que su miembro ya duro, se vuelva aún más duro, causándole un pequeño dolor.

Suavemente toma los bordes de su falda y los empieza a bajar lentamente, otorgándole la vista de sus hermosas bragas blancas ya transparentes por toda la humedad de su dueña, dándole un festín a sus ojos al ver sus hermosos labios rosados que simplemente lo invitan a probarlos.

Tirando la falda hacia al borde de la cama, vuelve su mirada hacia Eva.