28 CAPÍTULO 26.5- Reima Molfer es una loca.

CAPÍTULO 26.5- Reima Molfer es una loca.

¿Por qué? Es que… No lo entiendo… ¿Por qué mi familia es tan rara?

Zius, mi nueva vida es buena, pero… En serio, ¿por qué mi familia es tan rara?

Lo acepto, gracias a mi madre me volví poderoso.

Sí, soy un protagonista cliché y muy poderoso, ¡pero tuve que esforzarme demasiado para lograrlo! ¡Mi loca madre casi me mata varias veces! ¡He vomitado sangre durante los entrenamientos! ¡No tuve una infancia bonita! ¡No tenía amigos de mi edad! ¡Lo único que hacía era comer, entrenar y dormir!

Tuve que sufrir demasiado para volverme poderoso.

Ser hijo de Sei Molfer fue muy beneficioso para mí, pero… ¡En serio, ¿por qué mi familia es tan rara?!

Aparte, ¡¿por qué mierda acepté tan rápido esta misión?! Básicamente me dijiste: "Derrota a una Diosa, por favor." Y yo básicamente te contesté: "Claro. Soy un chico sin experiencia en peleas, pero estoy seguro de que podré derrotar a una Diosa que ha vivido por miles de años. Dame habilidades únicas y la voy a derrotar por ti."

¡¿Qué mierda?! En serio… Me gustaría regresar al pasado y golpear a mi yo del pasado.

¿Por qué acepté tan rápido? Al menos podía reflexionar y pensarlo unas horas… Pero no… ¡Acepté rápidamente!

Soy un maldito cliché… Y mi familia es muy rara.

—¿Volverás a salir sin permiso?

—Abuela… No sé si te he dicho esto antes, pero… ¡Estás loca!

Mi abuela me amarró y me colgó como si fuera una piñata.

—¿Volverás a salir sin permiso?

—¡Siempre entreno por las mañanas! ¡Mi madre lo sabe!

—Yo estoy aquí. Yo mando ahora.

Juntó sus puños con fuerza y comencé a sudar frío.

—A-abuela… No quiero volverme más feo, así que no me golpees en la cara.

—Por supuesto, nunca lastimaría tu linda cara.

Y así, mi abuela me usó como saco de boxeo por una hora.

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Me dirigía a la escuela corriendo y Drin estaba en mi cabeza en su forma como gato.

Ella estaba furiosa. Podía sentir su sed de sangre.

—¡Kei, ¿puedo matar a tu abuela?!

—No, Drin, no lo hagas.

—¡Pero te golpeó brutalmente! ¡Perdiste demasiada sangre, Kei!

Sentí un escalofrío al escuchar eso.

Sí, perdí demasiada sangre… Como dos litros… Creo. Usaba mi magia para reponer la sangre, así que ya no importa.

—Mi abuela es así… De todas maneras, ya estoy acostumbrado al dolor.

Sí, acostumbrado… ¡Un niño no debería sentirse acostumbrado a eso! ¡¿Por qué mierda mi vida es así?!

A veces me arrepiento de aceptar la misión de Zius.

—¡Al menos déjame golpearla! ¡Sentirá el mismo dolor que sentiste!

—Si intentas atacarla, morirás… Ella es más poderosa que mi madre… Aunque esté retirada, sigue siendo poderosa… Los Orcos que derrotamos, ella podía derrotarlos también… Y en menos tiempo… Y sola.

—¿Realmente es tan poderosa? Escuché historias sobre ella, pero pensé que eran exageraciones.

—Sí, es muy poderosa… Creo que es dos veces más poderosa que mi madre. Por eso prefiero evitar problemas con ella.

A lo lejos podía ver la escuela… Bueno, otro día escolar empezó… Espero que sea un día normal… No quiero pelear con otro demonio… Por favor, que sea un día normal. ¡Quiero una vida escolar normal!