Capítulo ll. Otro asesinato más.

Anaya , había visto la ventana abierta. La hermana María y el doctor Daniel se habían ido. Tenía que salir de ahí , lo bueno es que no era demasiada alta la ventana, salió con cuidado de ahí.

Su respiración mejoró mucho , volvió con las demás chicas al comedor, pero cuando iba entrando , el doctor Daniel estaba ahí con ellos. Estaba sentado con los varones en la otra mesa separada de las chicas.

Anaya mejor retrocedió para irse a la habitación, pero una mano la detuvo. Era una mujer casi aparentaba los cincuenta años de edad. Era la madre superiora.

--- Mi niña, dime ¿porque no estás en el comedor?

--- La verdad madre Helena, el doctor Daniel me pidió que descansará un poco, pero yo quiero...

¿...?

--- Espera ¿Doctor Daniel?

--- Si , él dijo que ese era su nombre

La madre superiora Helena se puso una mano en el mentón. Estaba un poco confundida.

Anaya la miró por un momento.

--- Madre superiora ¿Que sucede?

--- No es nada ... mmm ... pensé que se llamaba Joaquín, bueno, creo que lo escuché mal , jajaja sabes que ya estoy vieja y que no estoy escuchando muy bien

Anaya estaba un poco más nerviosa, pero no lo demostró , solo quería volver al dormitorio.

--- Madre superiora, yo volveré al dormitorio a descansar un poco...

--- No no , primero debes comer algo y después ve a descansar

Anaya no pudo seguir insistiendo, así que solo podía obedecer la palabra de la madre superiora, o si no , iba a lavar los platos por un mes. Ya la habían castigado antes por haber puesto cucarachas en la comida del conserje y la habían puesto a lavar los platos. Pero no los lavaba muy bien , ya que los dejaba con olor detestable, con suciedad o con una nata de aceite en los vasos.

Entraron al comedor, las chicas le hicieron señas para que se sentará con ellas.

A lo lejos , el doctor Daniel estaba con una mirada un poco seria.

<< Esta niña no ciuda su salud >>

La madre superiora Helena se acercó al hombre que no despegaba la vista de Anaya. Al parecer la madre superiora lo notó de inmediato.

--- Me da gusto tenerlo aquí doctor , así mis hijos van a tener medicina para que esten sanos.

¿?

--- ¡Eh si! ... Es mi deber como doctor de mantener la salud de los niños

--- Si , al parecer, vino muy temprano, pensé que vendría la semana entrante

...

--- Madre superiora ¿Puedo hablar con usted en privado?

???

--- Si , vamos a la sala Este ... niños ya volvemos

Anaya miró al doctor Daniel levantarse de la silla y caminar a fuera del comedor con la madre superiora.

No pudo resistir a espiarlos.

Los otros solo agacharon la cabeza , Anaya los metería en problemas por escuchar conversaciones privadas.

Al llegar en un lugar , para poder escuchar bien , detrás de las maceteras de arcilla ahí , después se deslizó hacia la gran puerta de la sala Este. Ahí estaban ellos platicando.

--- Madre superiora, la verdad es que no me llamo Joaquín

--- Ya veo ¿Cual es la razón de mentir?

--- Busco a mi sobrina aquí , he investigado en todos los orfanatos en busca de mi sobrina, pero siempre he tenido la búsqueda errónea, los mismos nombres pero los apellidos son distintos

¿..?

--- Ya veo ...

--- Pensé que la había encontrado aquí , pensé que era la niña Anaya , pero no lo es

¡¿...?!

--- ¿Cual es el nombre de su sobrina perdida?

---- Anaya Mabel Cortés Ortiz

¡¿...?!

<< ¡¿Tío?! ¡¿Tengo un tío?! >>

La madre superiora Helena y Anaya estaban sorprendidas. Anaya aún más, no sabía que tenía un tío.

Anaya lloraba , porque jamás supo de sus familiares, y ahora aparece un hombre que le causa escalofríos diciendo ser su tío.

La madre superiora, lo miró, no sabía si decía la verdad, tenía que comprobar que decía la verdad antes de decir que anaya es la sobrina perdida.

Cambiaron todo lo relacionado con Anaya cuando la encontraron desmayada en el armario bañada en sangre. Por alguna razón el asesino la dejó con vida.

--- Ya veo ... lo lamento mucho, es muy doloroso perder a un ser querido

<< Madre superiora... ¿No le cree? Entonces es un impostor >>

--- Si , he buscado por mucho tiempo a mi sobrina

--- Eso debe ser frustrante la verdad

Anaya miró que volvían al comedor, así que salió corriendo de ahí , para no ser atrapada.

El doctor Daniel, miró la figura de Anaya desparecer de ahí.

<< Niña traviesa >>

Llegó al comedor, no podían comer hasta que la madre superiora llegara. Las chicas le pidieron a Anaya le contarán que había escuchado. Anaya tuvo que decir que había ido al baño.

La tarde cayó en el orfanato de La Nueva Esperanza, las chicas estaban sentadas en el patio mirando a los varones jugando futbol. Había un chico que Anaya admiraba mucho , ya que este de niño había consolado a Anaya , ya no se podía adaptar recién llegada al orfanato, tenía la misma valentía de su hermano mayor Alexander.

A lo lejos miró al doctor Daniel que estaba mirando en su dirección. Anaya estaba nerviosa, no quería que la mirara a ella.

El joven se acercó a Anaya y la saludo con una sonrisa.

--- Hola Anaya --- el joven tenía cabello rubio , ojos cafés y piel blanca

--- Hola Leo --- Anaya le devolvió el saludo con una sonrisa

Anaya se levantó para limpiarse el polvillo de su vestido.

Cuando volvió a mirar , ya no estaba el doctor Daniel. Leo también hizo lo mismo.

--- También notaste al doctor Daniel ¿cierto?

--- Es muy extraño la verdad --- Anaya estaba confundida porque jamás había conocido a ningún tío ni padre ni de madre

--- La verdad es que tenía un buen rato , ahí --- dijo Leo limpiando su sudor con una toalla

¿....?

--- ¿Hace rato?

--- Si , ese hombre me da mucho miedo no te mentiré ... me pone la piel de gallina

Anaya , se quedó con dudas , porque no es la única que siente escalofríos del doctor Daniel.

La noche había caído en el orfanato de La Nueva Esperanza. En esa misma noche se miraba a lo lejos como caían relámpagos, avisando la llegada de la lluvia.

Las niñas eran guiadas por las hermanas del orfanato, de fila en fila para ir a sus dormitorios.

Anaya fue al baño.

Estando ahí , hubo un apagón en el orfanato. Las hermanas y la madre superiora estaban a tientas en la oscuridad.

Buscaron las velas para ir a ver a los niños.

Unas gotas gruesas de agua cayeron en el techo y luego varias, hasta que cayó la tormenta en la cuidad de Valle de Ángeles. Era cubierta por una tempestuasa lluvia infernal. Anaya en oscuras recordó la noche en que su familia fue masacrada, en una noche como está.

Se deslizó por la pared , hasta tocar el piso.

De pronto miró una figura masculina, la misma figura de aquella noche. Asustada se cubrió el rostro.

--- ¡No ... Papi... mami... Alexander, Eleonora! ¡Aaawww wooo! Woooog!

Anaya lloró como una niña pequeña, ya no quería sentir esa impotencia.

Lo único que quería era tener a su familia de vuelta.

La voz de Leo la trajo de vuelta.

--- ¡Anaya reacciona! Ven te llevaré al dormitorio

--- L-leo~ ... Leo

Los dos se fueron. La lluvia cayó todo la noche, hasta la madrugada. Parecía no querer parar.

Amaneció en el orfanato de La Nueva Esperanza. Aún no volvía la luz.

Llegó el periódico de la mañana. La madre superiora estaba sentada , cuando la hermana María traía el periódico.

--- Siempre es la misma historia

La madre superiora la miró con la cara pálida.

--- ¿Cual es su mortificación hermana

--- Esto madre superiora... esto --- la hermana María señaló la primera plana del periódico.

« Otro asesinato más en Tegucigalpa Honduras. Entre la noche de ayer y la madrugada de hoy 15 de Mayo del 2019... Las víctimas fueron encontradas descuartizadas de la misma manera igual que los otros 45 casos sin resolver...

Aún la policía na han dado con el asesino descuartizador »

¡¿...?!

Hasta el próximo capítulo.