7 Una temporal despedida

"¡¿Dónde está ese asesino?!"

"El bastardo mató a toda su familia. ¡Merece el castigo capital!"

Números profesores recorrían los pasillos de la academia.

Detrás de ellos también se podían observar estudiantes entusiasmados.

"Ah… y este día finalmente llegó." Murmuró Reinhard.

Era de noche.

Él estaba ocultando su presencia.

Después de años de entrenamiento, el sigilo es uno de sus puntos fuertes.

Él estaba vestido completamente de negro y estaba cubierto con una capucha.

Él tenía consigo todo el dinero convertido en oro dentro de su abrigo oscuro.

"Rei…"

Pero alguien lo localizó después de buscarlo más que nadie.

Solo había una persona en toda la academia que le llamaba de esa manera a Reinhard.

Era la única persona con la que él se comunicaba todos los días.

Reinhard se giró y vio a Roanna.

"Bien, bien. Madame Roanna, has superado mis expectativas encontrándome antes que nadie." Dijo Reinhard mientras mostraba una sonrisa irónica.

Ella no apartó su mirada que estaba ligeramente más alta que la de él.

Ella nunca lo entendió.

A pesar de ser un codicioso, silencioso, sádico y algo pervertido, ella no podía negar su talento. Su talento con la espada era tan grande que ella nunca pudo ganarle, ni siquiera usando magia en una batalla. Él también tenía buenos modales (o eso aparentaba con ella) y era un hombre apuesto.

Ella quería negarlo, pero en todo el tiempo que llegaron a estar juntos, ella llegó a admirarlo y sentir algo extraño dentro de lo más profundo de su corazón...

"Por favor… dime que lo que dicen de ti no es verdad." Dijo Roanna con una voz ronca.

"Espera… sígueme." Dijo Reinhard mientras miraba a su alrededor.

Él sabía que no tenía lugar más en el reino de Beltram.

Él abrió delicadamente un aula vacía cercana y entró junto con Roanna.

Aunque estaba vacía, él sabía que no había mucho tiempo para charlar. Él podía irse en cualquier momento, pero dudo un poco al ver cómo algunas lagrimas comenzaron a formarse en el rostro de Roanna.

"Todo es verdad. Yo los maté." Dijo Reinhard en un tono neutral.

Los ojos de Roanna se enrojecieron aún más.

Las lágrimas empezaron a caer. Era como si un ídolo para ella, su modelo a seguir en su mente se derrumbará por completo.

Ella tenía ganas de gritar para sacar sus frustraciones.

Eso es lo que debería haber pasado…

Reinhard se colocó detrás de ella y colocó su mano derecha detrás de su boca.

Poco después, él la llevó a la fuerza detrás de una gruesa columna.

"No grites. Shhh"

Reinhard hizo un gesto con su mano izquierda al decir eso.

Al ver que ella se calmaba, él retiró su mano.

Ambos estaban sentados detrás de dicha columna.

"Por qué…" Era todo lo que Roanna podía decir en esta situación.

"Huh… si yo no lo hacía, de todos modos, iban a morir. Pero eso no es lo que buscas saber, ¿verdad? Entonces puedes tomarlo como una venganza personal. La familia Welt es una familia en donde sobrevive el más fuerte, yo gané mi derecho de sobrevivir matando a mis 'hermanos'. Ese fue el sistema creado por ellos. La familia Welt nunca me regaló nada, ni siquiera me dio un nombre, tuve que ganarlo todo yo, incluso pasé semanas sin comer antes de venir a esta academia." Reinhard explicó.

'Aunque todo eso es verdad… fue por orden de 'madre' por lo que los maté.' Él pensó.

"Lo que dices… ¿es verdad?" Ella se giró para verlo.

Ambos rostros estaban muy cerca.

Reinhard asintió.

Roanna pareció calmarse un poco. Estaba sorprendida por el pasado de Reinhard. Aunque eso no lo convertía inmediatamente en una persona inocente, ella pudo aceptar eso.

"Tus emociones son tan volubles que dan miedo." Murmuró Reinhard en voz baja.

"Dime… ¿qué harás de ahora en adelante? Si buscas esconderte en un lugar, puedo rogarle a mi padre para que encuentres una salida y…."

Reinhard la interrumpió.

"¿Ah? ¿Crees que el duque Fontaine hará algo así por mí? Él será el primero en entregarme. Y no te preocupes, tengo un lugar a donde ir. Estoy seguro que allí mi fuerza alcanzará un nuevo nivel." Dijo Reinhard.

Sus ojos mostraban seguridad y expectación al pensar en ese lugar.

'Bueno, no estoy seguro de qué lugar será, solo sé que tiene que ver con mi condición de Santo de Espada. Pero será mejor no informarle demasiado.' Reflexionó Reinhard.

Cuando Roanna estaba a punto de responderle, ella se estremeció un poco.

Ella sintió que algo la examinaba.

"<<Zona Revelare>> ¿eh?" Dijo Reinhard con una sonrisa irónica.

A pesar de que él podía evitar ese encantamiento mágico con sus habilidades, Roanna no podía. Él se reprendió a sí mismo por cometer un error tan básico.

'Parece que el área de búsqueda es muy grande. En la academia solo hay una persona que puede hacer eso…'

Segundos después, la puerta se abrió.

Dos personas entraron al aula.

Era una pequeña, pero una hermosa mujer de cabello plateado y un niño de la misma altura de ella que tenía el cabello negro.

"Roanna, ¿qué haces aquí sola? ¿No escuchaste que la academia ahora es peligrosa?" Habló Celia Claire, la maestra más joven y fuerte de la academia Beltram.

Ella caminó hacia la dirección de la columna de la pared

"Profesora Celia, deténganse por favor. No está sola, hay alguien más." Dijo Rio, el alumno más controvertido de la academia.

Celia se detuvo por reflejo ante las palabras de Rio.

"¿Alguien más? Eso es imposible, he verificado toda la academia con <<Zona Revelare>>." Ella explicó con incredulidad.

"No es muy difícil, sucedió algo similar cuando buscabas a la Princesa Flora, pero dejemos eso de lado, no es el momento." Rio habló y poco después Roanna y Reinhard salieron.

"Tú… eres el asesino… Reivan Welt…" Dijo Celia con pesar. Ella estaba incrédula por los antecedentes de este estudiante.

A diferencia de Roanna, Reinhard no se molestó en explicarle nada.

"<<Magicae Murum>>"

Celia extendió su mano con un círculo mágico rodeándolo. Inmediatamente después, una barrera blanca de esencia rodeó por completo el cuerpo de Reinhard.

"Ahora, ¡corre!" Exclamó Celia a Roanna.

Rio se quedó sin palabras ante la rápida acción de su profesora, pero él no apartó la vista de Reinhard, él no le daba una sensación agradable.

Roanna estuvo apunto de explicar la situación a Celia cuando algo sucedió a su lado.

*CRACK*

Rio rompió la barrera de un solo golpe.

Su puño estaba rodeado de un aura roja.

"Eso es..." Rio se sorprendió al ver eso.

"Con que esas tenemos, profesora…" Dijo Reinhard.

Un aura roja rodeó todo su cuerpo y él despareció de la vista de todos.

No, solo una persona en el aula podía verlo.

Reinhard se estaba dirigiendo a una velocidad increíble hacia Celia.

Rio sacó su espada y cortó verticalmente hacia Reinhard mientras un aura plateada envolvía todo su cuerpo. (Se refiere a Rio)

Era claramente una acción de asesinato, Rio lo hizo por reflejo sin pensar en las consecuencias. Estaba preocupado por la vida de Celia.

Reinhard se detuvo.

Él se sorprendió un poco.

Él vio como la espada iba directamente hacia su cabeza en cámara lenta.

En efecto, en cámara lenta.

Reinhard levantó su mano izquierda y detuvo su espada entre sus dedos índice y pulgar de su mano izquierda.

"Impresionante, un control espectacular." Dijo Reinhard con un tono sarcástico.

Antes de que Rio pueda reaccionar, Reinhar le propinó una fuerte patada en el estómago.

Rio fue lanzado volando hacia la puerta de entrada del aula.

*POW!*

La puerta se hizo añicos.

"¡Rio!" Celia exclamó con extrema preocupación.

Ella corrió hacia él.

Roanna quedó impactada.

Él era Rio, aunque los nobles no lo admitieran, todos sabían en sus corazones que él era el más fuerte de la academia y esa persona fue lanzada volando fácilmente por Reinhard. Él le dijo que era más fuerte que Rio, pero ella pensó que solo se estaba jactando.

"Así que era verdad…"

Evidentemente, todo el ruido causado por el aula trajo atención no deseada.

"¡Una pelea por allí!"

"¡Todos! ¡Rápido! ¡Recuerden la recompensa!"

"…"

Reinhard suspiró al escuchar esas palabras.

Ella miró a Roanna.

"El tiempo que pasamos juntos fue muy divertido, nos veremos luego." Dijo Reinhard con una sonrisa haciendo una señal de despedida con su mano derecha hacia ella.

Sin esperar su respuesta, numerosos puntos rojos rodearon el área de la espalda de Reinhard.

Rápidamente se formaron un par de alas escarlatas… eran muy hermosas según la perspectiva de Roanna.

Sin perder más tiempo, Reinhard rompió la ventana y escapó volando del aula.

Roanna solo pudo ver como Reinhard se alejaba a la distancia... hacia el cielo estrellado.