20 Contacto 2

Pero un momento antes de hablar se detuvo, volvió su mirada hacia el pequeño yeti, ¿se suponía que los yetis contaban con la capacidad de lanzar magia?

―Intrusos se encuentran en presencia del Gigante de hielo Valuk, cuál es su propósito al interrumpir en su morada.

El yeti pequeño pronuncio su discurso, al parecer el yeti de gran tamaño se llamaba Valuk, Adrion escucho la voz del pequeño yeti, bueno, podría decirse que escucho y no escucho al mismo tiempo.

¿Se suponía que los yetis eran capaces de articular palabras de ese modo?

Varias interrogantes se formaron en un instante, los yetis eran monstruos, como tal no contaban con la capacidad de aprendizaje, solo podían lograr lo que estaba dentro de sus capacidades innatas.

Simplemente contemplo la rareza que se presentaba frente a él, cuando noto que se había demorado demasiado en dar su respuesta, simplemente respondió de forma automática.

―Venimos a ustedes por el motivo que su guarida se encuentra demasiado cerca de mi fortaleza y eso es un problema. Por otro lado, me impresiona que un simple yeti se llama a si mismo Gigante de hielo, es verdaderamente gracioso.

Valuk pareció pronunciar algo, pero solo pareció, ya que Adrion solo pudo escuchar varios balbuceos molestos.

―Intrusos Valuk les da la opción de rendirse o morir.

El yeti pequeño parecía servir como traductor para el yeti de nombre Valuk, por su tono de voz, parecía no querer pronunciar lo que dijo.

―Yo les ofrezco el mismo trato de mi parte.

Desde un principio las probabilidades de que esto terminara de manera pacífica eran extremadamente bajas, además Adrion había perdido su interés inicial al notar que su líder era incapaz de hablar, solo el pequeño yeti le parecía interesante.

Valuk se levantó de su trono mientras recogía su maza, camino hasta donde estaba Adrion, parecía que quería resolver el problema con sus propias manos.

La diferencia de tamaños era bastante notoria, pero los presentes no dirían nada por esto, simplemente se quedaron quietos, tanto los yetis, como Cherit y Kokonatsuji, ambos grupos parecían estar seguros del resultado de este enfrentamiento.

―No te demores.

Valuk parecía haber esperar que Adrion intentara defenderse, pero al verlo completamente tranquilo pronunciando esas palabras, dejo de contenerse, levanto su maza dirigiéndola justo a la cabeza de Adrion.

El sentido de la lógica al ver esa situación nos diría que era el final de Adrion, un monstruo de ese tamaño dirigiendo toda su fuerza hacia un punto, debería terminar con su armadura convirtiéndose en chatarra y su cuerpo en pulpa de carne.

Eso sería si su oponente fuera alguien normal, el ataque del yeti era extremadamente lento y débil para Adrion, el simplemente levanto su brazo deteniendo en seco la maza de acero.

Luego del sonido del impacto de metal contra metal, la cueva quedo en un profundo silencio, todos los yetis quedaron en shock, podrían esperar que su enemigo esquivara el ataque de su líder o usara magia para defenderse, pero no esperaban que fuera capaz de bloquear el ataque sin la más mínima dificultad.

―Se que esta es un arma mágica, ¿no vas a mostrarme que hace?

Valuk salió de su estado de confusión luego de escuchar las palabras de Adrion, por un momento vacilo con miedo, su oponente sabía que llevaba un arma mágica y aun así se arriesgó a bloquearlo. Pero luego recobro su confianza, su arma nunca le había fallado, mientras el tuviera esta arma era invencible, no lo pensó más y activo la magia con la que estaba imbuida.

La maza cobro un intenso color rojo disparando una corriente de fuego que envolvió por completo a Adrion, todos los yetis en los alrededores se encorvaron de miedo, la magia de tipo fuego era la debilidad primaria de los yetis, ninguno sobreviviría si eran golpeados de lleno por tal magia. Por otro lado, la cara de Valuk era de intensa felicidad, su enemigo había parecido aterrador por un momento, pero fue golpeado sin problemas por la magia de su arma, su victoria era segura.

Mientras en la parte trasera tanto Cherit como Kokonatsuji miraban con expresiones serenas, parecía que todo el suceso no tuviera nada de especial.

―Ya veo, magia de fuego.

Valuk miro la dirección de la voz, pero él no quería creerlo, la voz provenía justo del centro de las llamas. No pudo hacer otra cosa que ver como las llamas se disipaban mostrando a su oponente intacto.

Adrion había decidido recibir la magia de forma directa, parecía que su resistencia pasiva funcionaba de forma adecuada.

Valuk pareció pronunciar algo, pero el acto debía de terminar, Adrion con la maza aun atrapada en su mano, tiro hacia abajo, provocando que su oponente cayera de rodillas. Con la distancia acortada, coloco su mano libre sobre la cabeza del yeti y después de eso, giro su mano.

El resultado fue el esperado, Valuk tuvo una breve vista de su trono, su subordinado más importante lo observaba con horror, sintió un intenso dolor en el cuello, el cual se fue disipando mientras se oscurecía su visión, su ultimo pensamiento se dirigió de forma involuntaria, él había fallado su misión.

El cuerpo de Valuk se desplomo, murió rápidamente luego de que Adrion rompiera su cuello, él dejo caer la maza del mismo modo y dirigió su mirada al resto de los yetis.

―Su líder está muerto, ¿se rendirán o lo seguirán a su tumba?

Luego de ver a su líder morir los yetis se quedaron inmóviles, parecían no saber que hacer, luego de unos segundos se produjo la respuesta más primitiva al peligro, uno de los yetis dio un paso en dirección a una de las bifurcaciones de la cueva. Seguido por él varios fueron impulsados por la misma idea de querer escapar, estaban en su territorio, si todos corrían al mismo tiempo deberían tener una posibilidad de escapar, eso era su pensamiento, pero antes de que lograran dar un segundo paso todos quedaron paralizados.

La culpable de tal suceso se encontraba parada en el mismo lugar en el que había permanecido desde el comienzo de todo, Cherit permanecía como si nada pasara, probablemente esperando que esto ocurriera, preparo un hechizo de parálisis en masa de forma silenciosa, ella simplemente lo libero cuando fue necesario.

Adrion camino en dirección al único yeti que permanecía libre.

―¿Cuál es tu nombre?

El pequeño yeti se encontraba tirado en el suelo, después de que Adrion pronunciara sus términos arrojo su bastón y se rindió.

―Este humilde ser se llama Rondruin.

―Muy bien Rondruin, puedes levantarte, tengo muchas preguntas que quiero hacerte.

―Si gran señor, responderé cualquier pregunta.

Rondruin mostro lo que Adrion creía era una sonrisa.

―Bien, pero no aquí.

Adrion miro hacía Kokonatsuji.

―Nuestra parte termina aquí, llama a los exploradores.

―A la orden.

Después de dar varias órdenes extra a sus campeones se dirigió a la salida.

El humor de Adrion era ambivalente, se podría decir que su misión era un completo éxito, pero él no se sentía satisfecho por esto, esta era una operación imposible de fallar, simplemente no había sensación de logro por esta tarea. Principalmente la situación del contacto humano que extrañaba seguía molestándolo. Y una vez volviera a la fortaleza se quedaría sin nada que hacer nuevamente.

Al salir de la cueva no pudo evitar dirigir su mirada al cielo, este mundo es demasiado grande para permanecer encerrado por el miedo.

Ellas siguieron avanzando, la imagen de esas hermanas se formó en la mente de Adrion.

avataravatar
Next chapter