103 La dolorosa vida de Izuke- CAPÍTULO 46

Sakuto azota mi cabeza contra el suelo mientras se ríe. Los dos estamos muy heridos.

—¡¡Te gané, debes aceptarlo, soy más fuerte que tú!!

—¡¡Aún no me ganas!!

Me azota la cabeza contra el suelo de nuevo.

—¡¡Claro que te gané!!

La rana de Nina se acerca a nosotros saltando.

—¡¡Tienes suerte de que te necesitemos con vida, si no, ya estuvieras muerto!!

La rana salta a la cara de Sakuto.

—¡¡Qué asco!!

Intenta quitarse la rana y aprovecho su distracción.

—¡¡Crea fes!!

Convierto una parte del suelo en agua y entramos al agua. La rana salta y sale del agua.

Salgo del agua rápidamente y extiendo mi mano derecha apuntando al agua.

—¡¡Crea fes!!

Convierto el agua en hielo, congelando a Sakuto.

—¡¡Te gané, no eres rival para mí!!... Aunque quisiera poder convertir el agua en lava, pero no puedo... Supongo que mi poder mágico tiene un limite.

El hielo se rompe rápidamente y Sakuto sale del hielo.

—¡¡Esa estrategia no te salvó!!

—¡¡Maldición!!

—¡¡Rínde...!!

La rana da un gran salto y entra a su boca.

—¡¡¿Eh?!!

Se mete la mano a la boca y con una gran velocidad, tomo su cabeza y su mandíbula y la cierro fuertemente, provocando que su mano se separe de su brazo. Es una escena asquerosa, Sakuto tiene su mano en la boca.

Escupe su mano y la mano cae al suelo.

—¡¡Maldi...!!

—¡¡No te distraigas, idiota!!

Tomo su brazo y azoto su cuerpo contra el suelo.

—¡¡Muere!!

Empiezo a darle golpes en la cabeza mientras está en el suelo.

—¡¡Muere, muere, muere, muere!!

Le doy una gran mordida en el cuello y le arranco un pedazo de carne. La escupo inmediatamente.

—¡¡Sabes horrible!!

—¡¡Maldito loco!!

—¡¡Muere!!

Intento golpearlo y mueve su cabeza a un lado.

Me da un golpe en la cara y se aleja rápidamente de mí.

—¡¡Me hiciste enojar, mal...!!

Abre la boca y la rana sale de su boca.

—¡¡Recuperé poder mágico!!- Grita la rana con la voz de Sinfer.

—¡¡¿Eh?!!- Grito confundido.

La rana aterriza y su cuerpo brilla. Está creciendo poco a poco y se convierte en Sinfer. Está desnudo y me sonrojo

—¡¡¿Sinfer?!!

Sinfer voltea a verme y me sonríe.

—Hola, Izuke.

—¡¡¿Por qué estás vivo?!! ¡¡¿Por qué eras una rana?!!

—No hay tiempo de explicaciones, tenemos frente a nosotros un demonio.

Sinfer se convierte en demonio.

—Izuke, este demonio es demasiado fuerte, debemos pelear juntos contra él.

—Sí... Está bien... ¿Pelearás desnudo?

—Cierto, lo olvidaba.

Truena sus dedos y unos pantalones negros aparecen en él.

—Pantalones hechos de magia demoníaca.

—¡¡Idiotas, no me importa que sean dos, los derrotaré!!

Sinfer y yo nos ponemos en guardia.

—Yo te apoyo con magia, tú lo atacas con tú gran fuerza. ¿Listo? - Dice Sinfer.

—Sí, lo estoy.

-Godfer-

Saito y Desmolfer están bebiendo juntos viéndonos a través del espejo.

—Sinfer e Izuke peleando juntos... Será interesante... ¿Todavía quieres ayudarlo?

—Ahora que Sinfer regresó, más que nunca debo ayudarlo... Ya me he enfrentado a uno de los cinco espíritus mágicos "Divinos", así que sé que hacer.

—Hiciste un gran trabajo derrotando a Buentalan... Pero si lo ayudas, el Dios supremo te eliminará... Pídele permiso... Aunque tardarás dos horas haciendo fila para hablar con él.

—Sí... Cuando Izuke logre derrotar a ese demonio, iré a pedirle permiso.