91 La dolorosa vida de Izuke- CAPÍTULO 34

—¡¡Esto ha llegado demasiado lejos!!

Me da una patada en el costado izquierdo.

—¡¡Levántate, raro!! ¡¡Y deja de sonreír, te acabo de golpear y estás en el suelo!! ¡¡Deja de sonreír!! ¡¡La promesa que le hiciste a tú padre es estúpida, no tiene sentido!! ¡¡Solo los idiotas sonríen todo el tiempo!!

—Mi padre siempre sonreía... Él no era un idiota.

—¡¡Claro que lo era!!

—No lo conoces.

—¡¡Y tampoco quisiera conocerlo!! ¡¡Me dan asco los vagabundos como él y como tú!!

Me levanto con dificultad mientras tengo la mano en mi pecho.

—Pobrecito, ¿Te duele el corazón? ¡¡Eso te pasa por no obedecer mis ordenes!!

—Discúlpate.

—¿Qué dijiste?

—Discúlpate por lo que le dijiste a mi padre. Él no era un idiota... Él era una persona admirable y buena.

—¡¡No lo haré!!

Toma a Crismei del brazo y empieza a caminar.

—¡¡No tengo tiempo que perder, adiós!!

—¡¡Déjame!!

Me acerco rápidamente a él y le quito la mano del brazo de Crismei.

—¡¡Ya me tienes harto!!

Me da un golpe en la mejilla derecha, pero no me saca volando... Me mantengo firme y de pie.

—Insultaste a mi padre y lastimaste a Crismei... Sinfer...

Dejo de sonreír y lo veo con una expresión de enojo.

—¡¡No te lo perdonaré!!

Le doy un gran golpe en el estómago y al mismo tiempo, Sinfer me da un golpe en la cara.

—¡¡Deténganse!!- Grita Ángel.

—¡¡Maldito mocoso!!

Empezamos a intercambiar golpes.

—Izuke está peleando mientras siente dolor en su corazón.

—Si sigue así, él morirá.

Maria y Seipo están escondidos detrás de un árbol viéndonos pelear.

—Nos protegió... Debemos ayudarlo.

—Seríamos un estorbo... No somos rivales para él.

Sinfer me da un golpe en la frente y caigo al suelo. Empieza a darme patadas en la cara.

—¡¡Déjalo, Sinfer!!

Sonia se acerca a nosotros corriendo.

—¡¡Esto llegó demasiado lejos!!

Toma el brazo de Sinfer.

—V-vamos... Tú no eres así... Sé que la muerte de Cris te afectó, pero...

—Si tan solo... Si tan solo...

Me da un gran golpe en la cara con su pie.

—¡¡Si tan solo no hubieras tratado de salvar a Ángel!!

Empieza a darme varios golpes en la cara con su pie.

—¡¡Si hubieras estado despierto, podrías habernos ayudado a derrotar a ese demonio!!

Me toma del cuello y me levanta. Me levanta bastante del suelo y empieza a ahorcarme.

—¡¡Ella aún seguiría con vida si no fueras tan idiota!!

—¡¡Detente, Sinfer!!

—¡¡No te metas!!

Sinfer le da una patada a Sonia en la cara y cae al suelo.

—¡¡Maldito!!

Le doy una patada en la barbilla y me suelta. Intento recuperar el aire.

—Sonia es tu esposa... Y la golpeaste... ¡¡No te lo perdonaré!!

Salto y le doy un gran golpe en la cara, que lo saca volando.

—¡¡Ya no te considero un amigo!!

La marca de mi pecho empieza a desaparecer.

—¡¡Ya no eres importante para mí!!

La marca desaparece por completo.

Ángel, Sonia y Crismei observaron lo que pasó.

—La marca de Izuke...

—Desapareció...

—Ya no es el familiar de Sinfer...

—¿Eso es posible?

—Acaba de pasar, así que sí es posible.

—Pero Sinfer aun sigue con vida, miren.

Sinfer se acerca a mí corriendo y nos intentamos golpear. Nuestros puños chocan.

—¡¡Te ves mejor cuando no sonríes, maldito raro!!

—¡¡Cállate!!

Intentamos golpearnos, pero nuestros puños chocan. Sinfer me da una patada en el costado derecho y me alejo rápidamente de él.

Se acerca a mí y me da un golpe en la cara.

—I-Izuke está perdiendo.

—Izuke es más fuerte, pero Sinfer tiene más experiencia peleando que Izuke.

—La fuerza no importa si no sabes como aplicarla.

—Izuke...

Sinfer pone su mano frente a mi cara.

—¡¡Faio soul zes!!

Una pequeña bola de fuego sale de su mano y me da en la cara.

—¡¡Mierda!!

Me da una patada en la cabeza y me saca volando.

—No puedo convertirme en hada... Pero debo hacer algo. - Pienso.

Me levanto y veo que Sinfer se dirige a mí. Extiendo mi mano derecha.

—¡¡Faio soul zes!!

Una gran bola de fuego sale de mi mano. Es casi de mi tamaño. (Es de la mitad del tamaño de la bola de fuego que usó Ángel la primera vez)

Sinfer intenta esquivarla, pero no lo logra y recibe la bola de fuego.

Sinfer sigue de pie, pero está completamente herido.

Me acerco a él lentamente. Yo también estoy completamente herido.

—Ya... Debemos parar.

—No... Esto aún no acaba.

Sinfer me ve con odio y se convierte en un demonio.

—¡¡Sinfer, no lo hagas!!- Gritan Ángel y Sonia.

—Izuke... ¡¡Te mataré!!

avataravatar
Next chapter