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Pasó una semana después de la fiesta y había regresado a la escuela, era el último campeonato de vóley para mí y también para Mitchie. Estábamos por acabar e ingresar a la universidad pronto. Había mandado solicitudes a varias universidades fuera del radar de papá, sabía que le molestaría una vez que se enterara.

No recordaba lo que había pasado en la fiesta después del campeonato y no era que me importe de todos modos pero todos habían visto el video de nosotras en la mesa de billar bailando.

Tenía suficiente con mi hermana hablando sobre el baile de graduación y no es que ella vaya a graduarse pero Tyler tarado Wood estará en la fiesta. No tenía interés de ir de alguna manera.

Papá estaba feliz que no saliera a fiestas y ese tipo de eventos que consista de citas, novios y embarazos, así que eso también iba para Bonnie, estaba claro que ella no lo obedecía.

Arranqué un poster del baile mientras pasaba por el pasillo ganándome algunas miradas de odio. El baile era una estupidez, una pérdida de tiempo, una estúpida tradición y obviamente al parecer yo era la única que pensaba así.

El profesor de historia no había ni un día que no me mandara con el director y solo por dar mi opinión. Yo era la única que daba su opinión acerca de los temas que tocaba en cada clase.

Podría jurar que le molestaba mi presencia.

Teníamos práctica de vóley en el campo junto a los corredores. Con el uniforme y las rodillas manchadas de barro junto con el sol cayéndonos en la piel, estábamos sudadas y cansadas después de dos horas y media de práctica.

"Es suficiente por hoy" Escuchamos el grito de la entrenadora. "Buen trabajo chicas, mañana a la misma hora" Corrimos hasta nuestras mochilas por agua, sedientas. Concentrada en tomar mí agua no vi acercarse el hermano de Mitchie.

"Hey"

"Hola"

"¿Cómo estás?"

"Sudando y sedienta" Metió ambas manos en los bolsillos.

"Así que... ¿Te recojo el viernes en la noche?" Lo miré confundida.

"Aja, claro" Agarré mi mochila y la coloqué en mi hombro alejándome de él.

"¿Prefieres el sábado?" Escuché gritar en mi espalda

"Ni siquiera sé quién eres." Le regresé el grito.

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Llegué a casa hace media hora, me había bañado y ahora estaba acostada mirando el techo escuchando música con mis audífonos. Se podía escuchar la música desde otra habitación.

Algunas de mis compañeras de equipo les había llegado la carta de aceptación y la mía aun no llegaba. Cerré los ojos suspirando fuertemente.

"Sé que llegará, sé que llegará" Me repetía varias veces una y otra vez.Tenía buenas calificaciones y no tenía problema con ninguna materia a pesar de mis visitas frecuentes con la directora gracias al profesor de historia.

Papá tenía miedo que saliéramos en citas y quedar embarazadas, nuestra prima había pasado por eso. No tiene por qué preocuparse por mí porque no pensaba en tener novio. Bonnie por otro lado estaba desesperada por uno, todas sus falsas amigas tenían uno y se quejaba de eso todo el maldito tiempo. No entendía que tener novio no te hace mejor mujer.

Y teniendo en cuenta que papá sacaba niños de las partes íntimas de las mujeres cada hora. Desde que mamá murió había tratado de hacer lo mejor que podía. No pasaba tanto tiempo en casa y no era que me preocupe porque yo podía cuidarme sola pero no puedo decir lo mismo de Bonnie.

Por otro lado, no tenía idea cual era el problema con el hermano de Mitchie. Me molesta.

Suspiré, lo mejor será dormir.

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Me encontré con Mitchie en la hora de almuerzo al día siguiente. Estaba quejándose de su hermano, Ethan. Si, ya sé su nombre.

"Desde que llegó me molesta por lo borracha que estaba por la fiesta, no lo soporto". Soltó un gruñido bajo. "Él tiene la peor reputación y cree que tiene el derecho a decirme esas tonterías de que soy irresponsable". Hizo un ademancon su mano ocupada de su tenedor. "Quiere hablar de irresponsable, Talía. Déjame decirte que tengo una lista larga delas estupideces que él ha hecho en toda su vida" Rodé los ojos.

"Solo deja que siga hablando, no vale la pena. Y no es como si todos los días salieras y te emborracharas"

"Exacto!"

"Oh, mira quien viene para acá" Baje la voz.

"Mátame" Murmuró Mitchie.

"Hermanita hola. Hola Talía" Me sonrió, lo miré.

"¿Qué haces aquí? Tu pandilla está al otro lado" Ethan rodó los ojos.

"Solo quería saludar. Me estoy yendo ahora" Lo miré guiñarme el ojo haciéndome fulminarlo con la mirada.

"Tú hermano me molesta"

"Lo sé, a mí también"