9 Capítulo 9: Mi llegada a Starling parte 7: un nuevo cambio

El siguiente mes fue más difícil para mi familia, porque comenzaron los problemas entre mis padres y ahora mi madre me estaba sobre protegiendo mucho, al parecer no quería que me matará o algo por el estilo. Era la mañana siguiente, estaba algo desesperado porque además de ir con mi psicólogo, no tenia nada más que hacer. Entonces fui por un cuaderno y me puse a dibujar durante un par de horas; creo que había encontrado una cosa que hacer, mientras me tenían encerrado en mi casa. Mi madre entro a mi cuarto y me preguntó -¿como estas? -era de las pocas veces que actuaba como una madre

-estoy bien ¿y tu? -respondí mirándola fijamente. -espero que no suceda nada malo en este día

-bien, no te preocupes mi vida -dijo mi madre. -solo tenía una sonrisa en su cara

- y ¿Qué haces aquí? -le pregunte. -me resultaba sospechoso que me vinera a verme

-necesitaba asegurarme que estuvieras bien y que no hicieras nada malo hacia tu persona -contestó algo preocupada. -como sí ahora deseaba matarme, pero no tengo mucho animo para matarme

-¿porqué ahora te preocupa mucho mi vida? Sí antes no te importaba nada sobre mí - mencione. -aun no podía olvidar todo lo que me hicieron

-eres lo único que tengo y no quiero perderte - dijo. -se notaba que la había pasado mal desde el funeral

- aún estaré vivo, pero desde que maté a mi hermano he recibido toda la atención que nunca había tenido, creó que su muerte fue lo mejor para mí y ustedes -le comente. -no podía evitar burlarme de ese imbécil y de que todos notan que existo.

Antes de que mi madre me dijera algo, me dio una cachetada muy fuerte en mi cara y me gritó -¡no vuelvas a decir eso, jamás! ¡Me oíste! -estaba molesta por mi comentario, pero no podía ocultar la verdad

Yo me quedé callado, mientras me tocaba mi mejilla que estaba completamente roja y me fui corriendo hacia el armario y me encerré ahí, mi madre trataba de disculparse por lo que hizo, pero yo no quería verla y le dije - ¡deja me sólo de una maldita vez! Es lo único que sabes hacer mejor, madre -solo lloré y estaba furioso por golpearme sólo porque me burlaba de Daniel

- pero... -dijo ella tratando de contener las lágrimas -sin embargo, no la deje terminar lo que me iba a decir

- ya veté de una buena vez -dije. -cada vez que trataba de ser normal, mi maldita actitud lo arruinaba todo.

Mi madre sólo cerró la puerta de mi cuarto, finalmente se había ido; simplemente me quede ahí por un rato hasta que me sentía mejor. Luego de unos minutos la voz me dijo -esa cachetada, sí te la mereces por insensible y estúpido -era su turno de regañarme

- ahora tu también vendrás a decir me todo en mi cara -mencioné algo molesto. -quería ignorarlo, pero no pude

- pues tu ya te sabes la rutina, así que sí -contesto de forma graciosa. -solo quería hacerme enojar y hacer arruine mi vida más de que esta.

Sin pensarlo, abrí la ventana de mi casa y salí antes de que la voz siguiera con sus molestias, ya afuera de mi casa decidí esconderme en un arbusto para ver si había algo interesante que hacer. Sin embargo no había mucho que hacer, pero lo más raro de esto que ya nadie venía a visitarnos, desde la última vez que les grité a los familiares de mi padre, pero bueno. Cada vez las cosas se venían abajo y todo había sido por mi culpa (como siempre).

Narra la madre

Una noche, este ***** no había llegado del consultorio, entonces mi esposo decidió que habláramos acerca de mi pequeño. -¿como es posible que se haya convertido así? -preguntó este José. -seguía sin entender que somos los responsables de todo

- no lo sé, pero creo que quería que le pusiéramos atención y por eso hizo todo esto -le respondí. -trataba de justificar todo lo que hicimos

- ya lo creó, pero pienso que no fue la mejor manera de actuar de él y no olvidó la parte en donde insulto a toda mi familia en el funeral - mencionó. -José simplemente lo odia por lo que hizo, por eso es cruel con él

- es cierto lo que dices, pero también nosotros provocamos que él llegará a esos extremos -dije. -era el momento de aceptar nuestros errores al criarlo, además no he sido capaz de decirle que no es su hijo

-puede ser, pero ya se nos esta saliendo de nuestras manos el comportamiento de ***** -recalcó nuevamente mi esposo. -finalmente capto que ya no tenemos control sobre nuestro hijo

-entonces ¿Qué haremos con él? Ya que nadie en tu familia no lo quiere y la mía no sabe nada sobre lo que pasó -le pregunte buscando una respuesta para saber que hacer con él. -solo creo que ya consideré mucho dejarlo internado en un hospital psiquiátrico

-parece que a él le agrada que todos estemos peleados, no haya ninguna armonía en nuestra familia. He llegado a pensar que es feliz con todo esto y no se arrepiente de nada -contestó. -era cierto lo que decía, solo busca que todos nos odiemos

-también he pensado eso y en cierta parte es cierto lo que dices, porque siempre esta feliz y actúa con normalidad. A veces creó que jamás llego a querer a Daniel y él quería ser el hijo único por eso lo mató -le comenté la posible teoría de por lo que hizo. -nunca pensé en creer eso, pero como no son iguales puede existir esa posibilidad

-puede ser, pero será mejor que se alejé de la cuidad por un tiempo -me sugirió mi esposo. -a lo mejor es el cambio que necesita

-bien, mañana arreglaré todo para mudarnos a Starling mi cuidad natal -indiqué. -estaba feliz en regresar a mi ciudad, aunque creo que llego el momento de enfrentar al pasado

-correcto, yo todavía estaré acá por varios días más, a sí que se pueden ir ustedes antes y no se preocupen por la casa haré lo posible para comprar una antes o sino se van a tu casa por unos días - mencionó. -a pesar de todo lo sucedido, ha sido amable conmigo y realmente lo aprecio de él

- bien... Hoy empacamos todo y nos vamos mañana en la noche, para arreglar sus citas y lo demás -recalqué nuevamente. -espero que no haya más problemas.

Después de hablar con mi marido, decidí pensar un poco en los cambios que ha habido últimamente. Además regresar a Starling significa que ese pasado oculto volverá a surgir y no sabré que problemas traerá.

Narra el asesino

Todavía seguía a fuera de mi casa, sin embargo nadie en esta cuidad le interesaba saber de mí y eso que no le agrego que la mayoría de los ciudadanos tienen prohibido hablarme -ya enloquecieron, ¡lo sé! -pensé. Pero me agrada eso porque no hay ningún que venga con su hipocresía a hablarme. Entonces regresé a mi cuarto, se me hacia extraño que todo estuviera tranquilo a sí que salí de mi cuarto para saber si todo estaba bien, llegue a la sala y se oía a mi madre hablando con su familia y mi padre buscando una casa. Ambos me miraron y mi padre dijo - lo bueno que estas aquí -solo los miraba, era muy raro que ambos estén aquí

-¿porque dices eso? -le pregunté. -esto es algo inusual y no debo de bajar la guardia

- es que tenemos algo que decirte y es muy importante que lo sepas -respondió muy contento. -ambos estaban muy felices, pareciera que se sacaron la lotería

-¿que cosa? -pregunté nuevamente. -espero que ya me vayan a dejar a un manicomio y se olviden de mi, eso sería el mejor regalo de todos

-nos iremos a vivir a Starling -contesto mi padre. -mi sonrisa desapareció, no debí haberme emocionado.

En ese momento no sabía que decir, porque prácticamente iríamos en la cuidad donde vivía mi madre y eso que no omito que mi padre biológico es de allá también; creo que esto cada vez empeora para todos y finalmente le conteste -que buena noticia, después de todo ya me cansé de estar aquí -tenia una sonrisa falsa en mi cara

-nos alegra mucho que hayas tomado así la noticia, ahora ve y empaca tus cosas -dijo mi padre muy feliz. -lo bueno que se creyeron mi mentira

-bien... A sí lo haré -contesté. -esta vez solo seguí fingiendo ser feliz por la noticia, pero no es tan mala porque puedo empezar de nuevo y lograr lo que nunca pude hacer, por culpa de mi hermano.

Me dirigí a mi cuarto, cada vez esto estaba raro. Sin embargo no termino en discusión así que todo va mejorando un poco, porque no recibí una regañiza de mi padre. Antes de que siguiera el camino hacia mi cuarto la voz me dijo -ahora te vas a vivir a Starling ¿verdad? -no le agradaba mucho la noticia

-sí, mis padres creen que es lo mejor para todos -respondí tranquilamente. -ya esperaba para comenzar mi vida otra vez y en esta ocasión no haré nada malo

-como sea, pero aún a sí seguirás con tu lado asesino -mencionó la voz. -y justo ahora tenía que recordarlo

-no es cierto, puedo controlarlo al igual que tú -recalqué. -le tenía que demostrar de lo que era capaz

-ya lo veremos... Y a ver quien gana el juego -me retó a que no podía controlar me. -esa maldita voz no sabe a quien se enfrenta.

Yo sólo sonreí de la nada y la voz no dijo nada, al parecer creo que ya había entendido mi juego. Después de estar empacando todo para irnos de la cuidad, miraba con felicidad la habitación vacía y recordaba todo lo malo que me había pasado, quería evitar pensar en eso pero era en evitable y saber que casi nunca tuve momentos felices, pero no pensaba en eso. Era la mañana siguiente, hoy voy a mi cita con el psicólogo no se que contarle pero a ver que le inventó. Ya en el consultorio, el psicólogo me saludó -hola ¿Cómo has estado? -estaba tan tranquilo y me sentía bien en todos los aspectos

-bien, además hay buenas noticias -dije tan contento. -era el momento para decirle la enhorabuena

-¿a que noticias te refieres? - me preguntó muy sacado de onda. -me miraba fijamente, tal vez no le agrade mucho la decisión de mis padres

-nos mudáremos de la cuidad - conteste. -solo le solté la noticia, realmente no sabía como respondería

-me alegra mucho eso, y ¿Cómo te ha afectado la noticia en sí? -mencionó. -era extraño que no se haya molestado

-pues no me afecto nada, hasta estoy muy feliz por eso -conteste con una sonrisa de oreja a oreja. -realmente solo deseaba ser el mismo chico tierno y dulce que he sido

-¿en donde vivirán? -volvió a preguntarme. -sería buena idea decirle, a lo mejor desea visitarme

-en la cuidad de Starling, donde vivió mi madre -respondí. -no le comentado que no soy hijo de José, el padre biológico de Daniel

-bueno... Por lo visto estas feliz, sin embargo pienso que ese gran cambio va a generar más problemas entre tu familia y tu -dijo algo preocupado el psicólogo. -a pesar de que fuera una buena noticia, no se miraba muy seguro de que vaya ser lo mejor para mi

-¿porqué lo dice? - pregunté con algo de curiosidad. -necesitaba saber en que pensaba en este momento

-es que pienso que tu volverás a destruir a tu propia familia y por lo que me has contado sobre la voz y el secreto que te oculta; es mala idea que te vayas -me contó sus inquietudes. -no podía evitar estar feliz por su preocupación y dudo que vaya a suceder

-no se preocupe por eso, usted me ayudará a controlar eso porque aún así vendré a verlo o viceversa -dije. -por suerte aún lo podré ver a pesar de estar lejos

-esta bien, ya es todo los que me tienes que contar -mencionó. -espero que me ayude a pesar de estar lejos

-sí -mencioné. -ya estaba muy contento por decirle la noticia, aunque sé que será un gran cambio

-otra cosa más, si tus padres piensan en meterte en una nueva escuela será mejor que trates de hacer amigos o hablar con alguien y evita entrar en peleas -me aconsejo el psicólogo. -por suerte no era el único que pensaba en esa manera

-claro que lo haré, es la primera vez que tendré que hacerlo y estoy muy feliz... Y le prometo que seré una buena persona -le asegure. -solo lloré de felicidad, ya que nunca pude hacer amigos y ahora ya podré hacerlo.

Después de mi cita con el psicólogo, regresé a casa al parecer todo estaba listo para ir nos, mis padres arreglaron todo para que no pasara nada malo por mis antecedentes. Y partimos hacia Starling, honestamente no sabía lo que iba a ocurrir allá; pero ya lo tendré contemplado.