97 Capitulo 89: ¡¿Qué clase de estúpido creó esta Ley?!

* * * [Con Jiraiya, la noche anterior] * * *

"¿Qué es lo que quieres, Jiraiya?" - preguntó Hiruzen mientras miraba a su estudiante - "Estaba a punto de irme a casa..."

"Viejo, venía a avisarte de algo importante" - respondió el Sannin con seriedad.

"Dime" - la expresión de Hiruzen se volvió seria con esas únicas palabras - "¿De qué se trata?"

Jiraiya empezó a explicarle toda la situación con calma mientras Hiruzen mantenía su silencio.

"Necesito más que suposiciones para poder hacer algo, Jiraiya" - dijo Hiruzen mientras negaba con la cabeza.

"¡Viejo!" - exclamó el Sannin.

"Estoy hablando enserio, Jiraiya" - respondió el Sandaime con seriedad - "Aunque eso no significa que no haré nada... después de todo, es mejor prevenir que lamentar"

"¡Así se habla, viejo!" - sonrió el Sannin - "¿ Y qué tienes pensado?"

"Por el momento, nada" - negó el Hokage - "Si hago un movimiento brusco, es posible que no solo Orochimaru, el cual estoy seguro de que tiene que estar escondido en algún lugar de Konoha porque Kurama-kun lo dañó en gran medida, escapará y perderemos la oportunidad de atraparlo"

"¿Qué piensas de Suna?" - preguntó Jiraiya.

"Desde que recibí la información de que tenemos un Jinchuriki que podría explotar en cualquier momento" - respondió Hiruzen - "Una decisión que no debería haber tomado Rasa porque podría crear preguntas por parte nuestra cuando descubramos esta situación. Ese chico Gaara no es un simple Genin, él es una persona que en las situaciones equivocadas podría destruir media Konoha"

"Eso mismo pensaba" - murmuró Jiraiya mientras negaba con la cabeza - "Yo ya cumplí con mi parte, lo que suceda ahora es decisión tuya"

"¿Ya te retiras?" - preguntó Hiruzen mientras le daba una mirada a su estudiante - "¿No quieres venir a tomar algo a mi casa? No muchas veces vienes a ver a este viejo, mucho menos conversar"

"Si fueras mujer y unos 40 años más joven, aceptaría sin siquiera pensarlo dos veces" - bufó el Sannin - "Ok, vamos... yo también quiero saber algunas cosas"

"Deja que termine este reporte" - suspiró el Sandaime - "Aún no comprendo cómo es que la solución terminó siendo peor que la enfermedad..."

"¿A qué te refieres, viejo?" - preguntó Jiraiya con el ceño fruncido.

"Lee esto y lo comprenderás" - suspiró Hiruzen mientras le entregaba un documento.

"Veamos... Párrafo 7, Sección B de la nueva ley de los derechos a los clones..." murmuró el Sannin - "¡¿Qué clase de estúpido crea una cosa como esta?!"

". . ." - Hiruzen solo guardó silencio mientras le daba una mirada apática a su estudiante.

"Oh... lamento eso..." - murmuró el hombre de cabello blanco.

"Tranquilo... yo también me siento como un estúpido..." - suspiró el Sandaime - "Todo comenzó porque me aproveché de los Kage Bunshin. Lo que no sabía era que al tener un corto tiempo de vida, ellos eran mucho más 'despreocupados' con sus acciones, al punto que encontraban cada vez más formas de dificultar mi trabajo, hasta que un día ellos tuvieron la idea de crear esta ley... creo que no necesito explicar más..."

"Mis condolencias, viejo" - suspiró el Sannin - "¿Quieres ayuda?"

"Sí... podrías tomar mi puesto como Hokage" - asintió el Sandaime.

"Ni lo pienses, no voy a pasar mis últimos días detrás de un escritorio con una ley de mierda como esta" - bufó Jiraiya mientras apuntaba a la Ley de Derecho de los Clones - "Solo un idiota lo haría, sin contar que tengo una Red de Espionaje que liderar y un libro que escribir..."

"Sabía que dirías algo como eso" - suspiró Hiruzen mientras volvía a trabajar - "Sin contar que Konoha sería mal vista si somos liderados por un hombre que escribe libros eróticos a pesar de lo buenos que son"

"Una lástima la verdad... yo llevaría a Konoha a una era dorada" - suspiró Jiraiya - "Primero, habilitaría la poligamia y me crearía una harem, segundo, haría que la ropa de las kunoichis fueran más sugestivas, tercero, aumentaría la cantidad de burdeles, cuarto, volvería todas las aguas termales en baños mixtos, quinto..."

"Sí... mejor dejemos las cosas como están" - negó Hiruzen.

"Esperaba más de ti, sensei" - bufó Jiraiya.

"Solo pásame los documentos" - respondió el Sandaime mientras se tomaba el puente de la nariz - "Estoy muy viejo para toda esta mierda"

* * * * *

Kurama estaba caminando por las calles de Konoha en silencio con una mascarilla médica y unos lentes de sol - "Este disfraz es aprueba de tontos..."

"Hola, Kurama" - dijo Iruka mientras pasaba por su lado.

". . ." - Kurama solo negó con la cabeza - "Siempre hay un pequeño porcentaje de fallo"

El pelirrojo continuó caminando con calma y para su alivio, nadie parecía estar prestándole atención.

"Pff... si ellos no pueden descubrir a un niño rubio vestido completamente de un mono naranja mientras pintaba el monumento Hokage, no creo que me descubran mientras visto este impresionante disfraz" - pensó Kurama mientras caminaba con destino a Ichiraku.

El pelirrojo continuó con su viaje hasta que luego de unos pocos minutos, por fin llegó a su destino.

"Bienvenido a Ichiraku, mi nombre es Ayame y seré su mesera" - dijo Ayame al ver a la persona que tenía frente a ella - "¿Mesa para uno o para dos?"

"¿No me reconoces, Ayame Nee?" - preguntó Kurama con sorpresa.

"Le pido por favor que no me hable con tanta familiaridad, ahora... ¿me va podría decir que tipo de mesa necesita?" - preguntó la chica de cabello castaño mientras fruncía su ceño.

"Supongo que este disfraz es aprueba de idiotas como pensaba" - asintió el chico.

"Si va a insultarme, entonces será mejor que se retire porque... ¡¿Otouto?!" - exclamó la chica cuando vio como el chico se quitaba la mascarilla y los lentes - "¡¿En verdad eres tú?!"

"Je, es el disfraz perfecto" - sonrió el pelirrojo pero soltó un pequeño grito cuando sintió como la chica le daba un golpe en la cabeza - "¡Ach!¡¿Por qué fue eso?!"

"¡Por llamarme idiota!" - exclamó la chica con furia - "¡¿Por qué estás usando todo eso?!"

"¿A caso no sabes sobre la mierda de Sekkusu Kami-sama?" - preguntó el joven Uzumaki.

"Sí... pero sinceramente decidí pensar que no eras tú la persona de quien estaban hablando" - respondió Ayame con seriedad - "Sería incómodo... sin contar que muchas de mis amigas quieren conocerte..."

"Sí... eso no pasará" - suspiró el pelirrojo - "En fin, quiero mesa para uno... de ser posible lo más rápido posible porque no quiero que alguien me descubra"

"No hay problema con eso" - asintió la chica - "Te recomiendo que te pongas de nuevo tu disfraz porque hoy estamos concurridos"

"Ok, gracias por la información" - Kurama rápidamente se puso la mascarilla y los lentes para poder entrar en paz. Lo único que quería era comer algo tranquilo pero antes de que pudiera dar un paso, notó como alguien se ponía delante suyo - "¿Necesitas algo?"

". . ." - la persona que estaba frente a él, solo guardó silencio.

"Si no es nada, será mejor que siga con mi camino" - dijo Kurama mientras caminaba nuevamente.

"¡Espere, Sekkusu Kami-sama!" - exclamó la persona, demostrando por el tono que era una mujer.

"Creo que tiene a la persona equivocada, señorita" - dijo Kurama mientras intentaba nuevamente avanzar, pero para su molestia, otra mujer bloqueó su camino - "Voy a preguntarlo de nuevo... ¿necesitan algo?"

"Sí..." - asintió la que parecía ser su líder - "¡Queremos convertirnos a su religión!"

"Lo diré de nuevo, tienen a la persona equivocada..." - dijo Kurama con seriedad - "Yo solo soy una persona común y corriente que quiere comer algo delicioso"

Con un movimiento rápido, él creó un clon trasformado en mosca y lo mandó hacia la entrada del restaurante para que esperara la señal.

"Yo estoy segura de que tenemos a la persona indicada..." - dijo la mujer con seriedad - "Vi su apariencia cuando se quitó el disfraz así que puedo asegurar que es realmente usted"

"No me van a dejar en paz... ¿verdad?" - suspiró el pelirrojo mientras negaba con la cabeza.

"¡Sekkusu Kami-sama!" - se escuchó fuera del restaurante.

"¡Mierda!" - el Clon actuó sorprendido mientras salía corriendo a toda velocidad.

"¡Por favor espere, Sekkusu Kami-sama!" - exclamó una mujer mientras una segunda casería empezaba.

"Creo que eso comprueba mi identidad..." - dijo Kurama con molestia.

"Si usted no está tratando de cubrirse... ¿por qué usa esa mascarilla y lentes?" - preguntó una de las mujeres.

"Porque estoy enfermo y no quiero contagiar a nadie" - respondió Kurama con aún más molestia - "Los lentes son porque he estado mucho tiempo encerrado y mis ojos no se han acostumbrado a la luz...¿Tengo que seguir respondiendo a sus preguntas sobre mi vida privada?"

La mujer iba a decir algo más pero fue interrumpida por la líder del grupo - "Lamentamos que las cosas terminaran de esta forma..."

"Solo no repitan esto más..." - dijo Kurama mientras caminaba con calma, solo que esta vez nadie lo detuvo - "Hay veces que unas palabras pueden hacer más daño que un golpe físico"

"Regresemos al hospital" - dijo la líder.

"Pero..." - murmuró una de las otras mujeres.

"Lo sé... él es Sekkusu Kami-sama" - dijo la líder - "Pero no tenemos el tiempo para seguir con esto, recuerda que nuestro descanso está a punto de terminar... sin contar que no tuvimos la mejor primera impresión"

". . ." - las chicas se quedaron en silencio cuando escucharon esto.

"Lo siento chicas, el baño estaba ocupado" - dijo una linda mujer un rostro tierno que hacía un gran contraste con su cuerpo seductor - "¿Me perdí de algo?"

"No fue nada, Hikari-chan" - sonrió la líder - "Es hora de volver"

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Lamento incongruencias con capítulos próximos.