29 Capitulo 27: ¿Y yo soy el Tsundere?

Luego de esa 'retirada estratégica', Kurama caminó tranquilamente con destino al bosque de la muerte.

"Buenos días pelirrojo-san" - dijo una mujer mayor que estaba comprando - "Parece que te pasó algo bueno por la cara de felicidad que tienes"

"¿Es muy notorio?" - preguntó Kurama con una sonrisa.

"Como decirlo" - asintió la mujer mientras miraba al chico con felicidad - "Desde que volviste habías estado un poco... rígido..."

"Es que con la emoción de haber comenzado mi camino como shinobi, no había podido calmarme hasta ayer" - dijo Kurama con calma - "Así que estuve entrenando y entrenando hasta el cansancio"

"Es bueno que te esfuerces pero tienes que descansar también" - la mujer solo le dio una mirada preocupada - "Recuerda que Kushina-chan te necesita... Ella estuvo muy preocupada por ti"

"Lo sé" - murmuró el pelirrojo.

"Solo te lo digo para que lo sepas" - sonrió la mujer con afecto - "No soy quien para meterme en la vida de un ninja"

"No se preocupe" - negó Kurama - "Solo lo dice porque se preocupa por nosotros"

"Es bueno que lo sepas cariño" - asintió la mujer - "Ya no voy a molestarte más, lamento que esta vieja mujer haya ocupado tanto de tu tiempo"

"Fue un gusto hablar con usted nuevamente" - dijo Kurama con una sonrisa - "¡Nos vemos luego!"

"Es un niño tan bueno" - dijo la mujer con una sonrisa al ver como el pelirrojo desaparecía de su vista. Ella había conocido a Kushina y Kurama cuando llegaron a Konoha y durante el tiempo pudo ver como la pelirroja se esforzaba por cuidar al niño mientras él entrenaba sin descanso.

La mujer estaba tan concentrada en sus asuntos que no se dio cuenta que se iba a chocar con otra persona - "¡Ack! D-Disculpe por eso señor..."

". . ." - el hombre la miró con frialdad - "¿Puedo tomar esto como un acto en mi contra?"

"¡¿D-De qué está hablando?!" - exclamó la mujer con miedo.

"Supongo que lo veré así..." - dijo el hombre con una mirada sin emociones - "Con eso tienes dos delitos... el primero es atacar a un shinobi sin motivo alguno y el segundo... ser amistosa con el zorro demonio..."

"¡N-No se de que estas hablando!¡Kya!" - dijo la mujer mientras temblaba, para luego sentir como un kunai atravesaba su estomago.

"Tienes suerte que no quiera matar a ningún civil..." - murmuró el hombre mientras caminaba fuera del lugar, todo bajo la mirada dela gente que no podía hacer nada para detenerlo. Ellos no tenían la fuerza como para impedir que la pobre mujer siguiera sufriendo. Cuando vieron que el hombre había desaparecido, uno de ellos llamó al hospital para que pudieran salvar a la desafortunada mujer.

* * * * *

"Alguien se acerca... y huele a sangre..." - murmuró el pelirrojo cuando sintió como al presencia de alguien se dirigía en su dirección. Kurama miró en dirección de donde provenía el olor y pudo sentir una mirada llena de odio y celos - "Si no vas a enmascarar sus emociones negativas, será mejor que no intentes esconderte..."

"No se podía esperar menos del Kyubi no Yoko" - dijo una voz sin emociones mientras dejaba ver su apariencia. Él era un hombre joven de ojos marrones, pelo corto de color negro, una barba y patillas largas. Su vestimenta consistía en el uniforme ninja de estándar, con vendajes en los brazos por debajo de los hombros , finalizando en un chaleco táctico verde oscuro.

"Asuma... Sensei..." - murmuró el pelirrojo mientras miraba sorprendido al sensei del equipo 10 pero entrecerró los ojos al sentir que era de él, o mejor dicho de su kunai - "Sangre..."

"Solo digamos que castigue a cierta... infractora..." - dijo Asuma con calma - "Era una mujer castaña de unos 60 años que vestía delantal amarillo"

"!" - Kurama abrió los ojos mientras le daba una mirada afilada - "¿Y cual... fue su delito?"

"Primero atacó a un shinobi sin motivo y segundo..." - respondió Asuma con una voz neutral - "Mostró amabilidad hacia un... asesino..."

"Bien dejemos los juegos a un lado Asuma" - dijo Kurama con frialdad - "Qué mierda quieres conmigo..."

"¿Te haces el idiota o simplemente no sabes?" - preguntó el Jonin con el ceño fruncido - "Quiero que te alejes de Kurenai"

"¿Kurenai Sensei?" - dijo Kurama sin entender - "¿De qué estas hablando?"

"Solo te lo digo Zorro demonio" - dijo Asuma - "No se que clase de Jutsu usaste pero desde que volvieron tú y la zorra pelirroja, ella a estado completamente concentrada en ustedes..."

"Primero, aún no entiendo de que mierda estas hablando..." - dijo Kurama mientras liberaba su sed de sangre. El bastado frente a él había insultado a una de las personas más importantes de su vida así que estaba haciendo todo lo posible por no matarlo - "Pero si vuelves a insultar a Kaasan... te juro que ni el Hokage salvará tu cuello..."

"!" - Asuma sintió como toda la zona baja de temperatura.

"Segundo, solo veo a Kurenai-sensei cuando voy a entrenar o realizar misiones" - continuó el pelirrojo con frialdad. Asuma se quedó en silencio mientras sentía como el aura llena de sed de sangre lo rodeaba lentamente, así que decidió hacer una retirada estratégica.

"Supongo que voy a tener que preguntarle a Kurenai sensei el por qué mierda me esta siguiendo su novio" - murmuró Kurama con frialdad - "Pero primero, voy a revisar el estado de Rei-san... solo espero que no sea nada serio..."

* * * * *

Luego de haber revisado el estado de la pobre mujer y estar seguro de que ella no tenga ningún problema, Kurama se dirigió hacia la torre Hokage para informarle a Hiruzen lo que había pasado.

"Lo siento, Kurama-kun" - dijo Hiruzen mientras soltaba un suspiro - "No sé lo que le pasó a mi hijo..."

"Yo tampoco lo sé y ni tampoco me importa" - dijo Kurama con frialdad - "Pero si hace algo que dañe a mis seres queridos... prometo que no te gustará como terminará..."

". . ." - Hiruzen solo podía soltar un suspiro y rezar que su hijo no haga nada estúpido. Él no quería pelear contra el pelirrojo porque sabía que si Kurama se salía de control, no solo él estaría en peligro, sino que toda la aldea. Enfrentarse al Kyubi no Yoko en toda su furia, solo haría que Danzo bailara de felicidad, sino que también haría que las demás aldeas que todavía tienen malas intenciones contra Konoha, se sientan como niños en navidad - "Prometo que cubriré la cuenta del hospital y le daré una remuneración a Rei-san..."

"Ok..." - Kurama solo asintió mientras se retiraba del lugar y volvía a caminar hacia el bosque de la muerte.

"Asuma..." - murmuró Hiruzen mientras miraba por la ventana.

* * * * * *

"¡Yo, Gaki!¡Llegaste temprano!" - exclamó Zabuza mientras llegaba acompañado de Haku y un Anbu con mascara de cuervo.

"Hola Karasu-san, supongo que a ti te encargaron observar a Zabuza y Haku" - asintió el pelirrojo al ver al Anbu.

El Anbu solo asintió mientras que el Ex Nukenin estaba un poco molesto - "¡Oye Gaki!¡Podrías al menos saludar!"

"Lo siento Zabuza, Haku-san" - dijo Kurama mientras se rascaba la mejilla - "Pero tienes que saber que Karasu-san me ha ayudado antes, y es de los pocos Anbus que me agradan"

Zabuza se sorprendió al ver como el Anbu le daba un pulgar arriba y le hablaba con señas.

"Ya veo..." - asintió el pelirrojo - "Te recomiendo llevarla al restaurante de la calle 7, puedo pedirle a Choji que me reserve la mejor mesa"

Karasu-san solo asintió aunque se podía notar que él estaba feliz.

"¡Oye!" - gritó Zabuza con molestia - "¡Se supone que estas en misión!¡No deberías mostrar emociones o pedir consejos para una cita!"

"Por eso es que me agrada Karasu-san" - sonrió el pelirrojo mientras Karasu-san asentía.

"Como sea..." - dijo Zabuza como si se diera por vencido - "Ok calabaza, dime para que me llamaste..."

". . ." - el lugar quedó en completo silencio luego de que el Ex-Nukenin terminara de hablar.

"¿Sabes Zabuza-san?" - Kurama solo liberó un aura fría mientras miraba al ex-Kirinin - "Hay cosas que nunca le tienes que decir a un Uzumaki... y una de ellas... es insultar su color de cabello..."

"Nota mental, nunca insultar el cabello de un Uzumaki..." - pensaron los presentes mientras veían como el chico se calmaba.

"Como sea, lo que quiero es que me enseñes algo de Kenjutsu" - suspiró el pelirrojo.

"¿No puedes venir a las clases que estoy dando?" - preguntó Zabuza.

"Quiero algo más avanzado" - dijo Kurama con calma.

"Hmm... no estoy seguro de que estés listo" - murmuró el ex-Kirinin.

"Supongo que eso sería todo por ahora" - dijo Kurama mientras se retiraba - "Lamento haber gastado tu tiempo"

"¡Alto ahí Gaki!" - dijo Zabuza al ver como se iba el pelirrojo - "Nunca dije que no te lo enseñaría"

"Gracias por enseñarme" - Kurama asintió en agradecimiento.

"Tampoco dije que te enseñaría... ¡Espera!¡Era una broma!" - exclamó Zabuza al ver que el pelirrojo se estaba retirando.

* * * * *

"No habría pasado nada de esto si solo hubieras dicho que si" - suspiró Kurama mientras se tomaba el puente de la nariz.

"N -No es como si estuviera feliz con que alguien quiera aprender directamente de mi" - murmuró Zabuza mientras miraba hacia un lado.

"Zabuza-sama..." - suspiró Haku mientras negaba con la cabeza.

"¿Y yo soy el Tsundere?" - pensó Kurama mientras sacudía la cabeza.

"¡C-Como sea! El este estilo de Kenjutsu que te voy enseñar se llaman Nagare (Flujo)" - dijo Zabuza con seriedad - "El objetivo de este estilo, es adaptarse a los movimientos del rival como si tu fueras agua fluyendo..."

"Suena interesante pero al mismo tiempo parece más un estilo de Taijutsu" - asintió el pelirrojo.

"Es porque Nagare es un estilo de combate que no solo combina movimientos de Kenjutsu, sino también de Taijutsu" - respondió el ex-Nukenin - "La ventaja que tiene este estilo, es que puedes pelear con o sin arma"

"¿Cuando empezamos?" - preguntó el pelirrojo con emoción porque ese estilo de Kenjutsu era perfecto para él.

"Ahora mismo" - asintió Zabuza mientras le indicaba que creara un grupo de Kage Bunshin para poder empezar con el entrenamiento.

* * * * * * *

Así paso la tarde. Zabuza, Haku y Karasu-san ya se había ido.

"Tengo que admitir que Nagare es interesante..." - murmuró Kurama mientras soltaba un suspiro - "¿Por que siento tanta hambre?"

Lentamente él miró alrededor y notó que el cielo estaba oscuro - "¡Mierda! ¡Kushi-chan me matará por no llegar a cenar a tiempo!"

Sin más, él salió corriendo a su hogar lo más rápido posible.

"Solo espero que nada pase..." - murmuró Kurama mientras corría por la zona comercial pero como si dios le jugara una broma, se frenó al escuchar como alguien lo llamaba - "Hola Kurama-kun, justo me dirigía a donde Kushina-sama para informarte sobre el horario de mañana"

"¿Kurenai sensei?" - murmuró el pelirrojo mientras le daba una mirada a la mujer.

"Suenas como si no me quisieras ver" - dijo Kurenai con el ceño fruncido.

"Todo lo contrario, Kurenai Sensei" - respondió Kurama - "Yo quería hablar con usted sobre algo que sucedió hoy"

"¿Algo que sucedió hoy?" - preguntó la kunoichi de ojos rojos con el ceño fruncido - "¿De qué estás hablando?"

"Voy a ir directo al grano Kurenai Sensei..." - respondió Kurama sin darle más vueltas al asunto - "Quiero que controle mejor a su novio"

"?" - Kurenai seguía sin entender que sucedía pero luego de escuchar al pelirrojo, una expresión oscura apareció en su rostro. Los dos han estado peleando últimamente porque ella no ha querido dar el siguiente paso en su relación. Kurenai había escuchado de los rumores que rondaban en la aldea y de que ella era protagonista. Estos consistían en que ella se estaba acostando con una gran cantidad de shinobis.

Cuando Asuma por fin decidió sacarle esos hechos a Kurenai, ella se enojó como nunca. Él le estaba diciendo que ella era una zorra cuando ella seguía siendo virgen pero lo que más la sacó de quicio, fue que él la estaba acusando de tener una relación con su Genin. Ese fue el mismo día donde terminaron aunque ella todavía podía sentir como su miraba la seguía.

"Muy bien Kurama-kun, iré a hablar con él para dejar todo claro" - dijo Kurenai con una mirada fría. Esa fue la gota que rebalsó el baso. Luego de despedirse, ella desapareció entre la multitud que aun rondaba por las calles mientras Kurama la observaba como si nada de esto fuera problema suyo. Él solo esperaba que Asuma no viniera como perro rabioso a intentar morderle el culo porque como bueno zorro, él devolvería la mordida - "Solo espero que Kushi-chan no esté molesta..."

* * * * * * *

Kurama estaba cerca de su casa, cuando vio a un Anbu con mascara de cuervo - "¡Yo, Karasu-san!¿Qué haces aquí?"

"Solo quería agradecerte por lo de la reservación" - dijo Karasu.

"Por fin hablas, Itachi-san" - dijo Kurama mientras asentía - "No hay problema con eso, solo pido que no lastimes a Ayame Nee"

"No te preocupes por eso, ella es la única que me a hecho sentir esto luego de que..." - dijo Itachi pero cayó en un profundo silencio.

"No pienses en el pasado, Itachi-san" - dijo Kurama mientras soltaba un suspiro mientras la imagen de sus padres ensangrentados volvía a su mente.

"Es bueno conversar estas cosas de vez en cuando..."- dijo Itachi mientras se calmaba - "Por cierto..."

"¿Si?" - dijo Kurama con curiosidad.

Itachi apuntó a la casa del pelirrojo y luego hizo una señal de "You are F*cked".

". . ." - Kurama quedó en silencio al ver como en la puerta estaba una hermosa pelirroja que lo miraba fríamente.

"¿Algo que decirme, Kuro-chan?" - preguntó Kushina con una mirada seria.

"¿Alguien te ha dicho que te ves hermosa cuando estás molesta?" - sonrió el joven pelirrojo.

"Más de una vez" - asintió la bella mujer de cabello rojo - "Espero que me digas el motivo del por qué no llegaste a cenar..."

" Te lo diré mientras cenamos" - sonrió el pelirrojo - "Prometo que luego te lo compensaré"

"Créeme... lo harás..." - dijo Kushina mientras tomaba al joven Uzumaki del cuello de su yukata - "Voy a asegurarme de eso"