167 Capitulo 153: Rebelión (1)

"La 'Hierva de la Mente', te va a ayudar durante tu entrenamiento, con ella podrás identificar los pequeños errores y movimientos innecesarios que hacías durante tus entrenamientos, haciendo mucho más efectivo estos" - agrego Fukasaku mientras asentía - "Ahora acompáñame, tenemos que iniciar con tu verdadero condicionamiento físico para que tus porcentajes de éxito al practicar Senjutsu, aumenten exponencialmente"

"Ok" - asintió el pelirrojo con firmeza. Esto le venía bien porque al menos así, no tendría que dejar su entrenamiento en Senjutsu a la mitad para poder ver el nacimiento de sus hijos.

"Muy bien, esa es la respuesta que buscaba" - sonrió el viejo sapo - "Comenzamos de inmediato, primero come esto"

". . ." - Kurama se le quedó mirando unos segundos porque no sabia como reaccionar al ver el enorme gusano que el sapo estaba cargando.

"No me des esa mirada, este es el primer paso en tu entrenamiento" - dijo Fukasaku con seriedad - "Los insectos de Monte Myoboku, tienen la particularidad de tener pequeñas concentraciones de Energía de la Naturaleza. Nosotros los consumimos para poder aumentar nuestra afinidad con el Senjutsu, así que come"

"Ok" - asintió Kurama mientras tragaba el gusano sin pensarlo dos veces, solo para sentir como el Chakra Senjutsu que había dejado Hashirama dentro de él, empezaba a moverse lentamente.

"Bien, ahora iniciaremos con los ejercicios..." - dijo Fukasaku mientras sacaba tomaba un palo de escoba.

"Estás disfrutando esto..." - dijo Kurama mientras fruncía el ceño.

"Si voy a hacer un trabajo, al menos tengo que disfrutarlo... ¿no?" - sonrió el sapo - "Ahora continuemos"

* * * * *

Los semanas pasaron y el día para el parto de Kushina estaba cada vez más cerca. La mujer había estado sintiendo las patadas de su bebé con mayor regularidad, pero nada de eso importaba en estos momentos, ya que ella junto a Mikoto, Tsunade y Tsume, estaban reunidas junto a Hiruzen y los demás líderes de los clanes, así como Homura y Koharu.

"Viejo... ¿para qué nos llamaste?" - preguntó Kushina con irritación, Con los cambios de humor producto del embarazo, su actitud era cada vez más explosiva, aunque no era la única porque Mikoto tenía una mirada fría en su rostro, una que solo podría aparecer en un Uchiha.

"¿Yo? Mis Anbu me dijeron que ustedes querían hablar conmigo" - dijo Hiruzen mientras fruncía el ceño.

Los presentes empezaron a mirarse entre ellos en silencio porque no comprendían que estaba pasando.

"Eso podemos responderlo nosotros" - dijo Homura mientras una pequeña sonrisa aparecía en su rostro.

"Lo sabrán dentro de unos momentos" - respondió Koharu.

"Homura... Koharu..." - dijo Hiruzen con frialdad mientras empezaba a liberar su chakra - "Espero que hablen de inmediato o me veré en la penosa necesidad de mandarlos al IT por sobrepasar sus límites de autoridad"

"No será necesario Hiruzen" - dijo una voz que todos conocían muy bien.

"Danzo..." - dijo Kushina con frialdad mientras Mikoto activaba su Sharingan.

"Es bueno verte, Uzumaki Kushina... y veo que has cuidado bien a Uchiha Mikoto... nada mal..." - sonrió el viejo halcón de guerra - "Hmm... incluso Tsunade está con ustedes... que terrorífica combinación de clanes"

"Kushina... Mikoto... será mejor que se relajen... no es bueno que se alteren con su situación actual" - dijo Tsunade con seriedad mientras veía como las dos mujeres se calmaban un poco.

"Exacto... sería una lástima que perdieran a los bebés que llevan dentro" - agregó Danzo y en el proceso, sorprendiendo a todos los presentes, incluso a Hiruzen - "Esos pequeños tendrán el talento para destruir todo a su paso sabiendo quien es el padre"

". . ." - Kushina y Mikoto nuevamente enfurecieron pero una mirada de Tsunade las calm�� nuevamente.

"Danzo... nunca pensé que aparecerías frente a nosotros" - dijo Hiruzen con frialdad mientras una gran cantidad de Anbu aparecían alrededor suyo.

"Me insultas, Hiruzen... sabes muy bien que nunca aparecería en este lugar si no estuviera seguro de mi seguridad" - sonrió el viejo Halcón de Guerra mientras la mitad de los Anbu se ponían a pelear con los otros .

"Eso no cambia nada, viejo amigo" - dijo el Sandaime mientras miraba a su antiguo compañero de equipo - "Tú aún estás en desventaja total"

"No.." - sonrió Danzo mientras una gran cantidad de gritos se escuchaba desde fuera del edificio.

"Hiruzen-sama..." - dijo Hiashi con frialdad - "Shinobis, civiles, una gran cantidad de ellos se acerca a la Mansión Hokage... pero el problema es... que entre esos shinobis, hay una gran cantidad de miembros de nuestros clanes"

"¿Lo vez, Hiruzen? Yo siempre tengo un movimiento más" - sonrió el viejo shinobi - "He estado ocupado todo este tiempo, tomando shinobis lentamente para que no se dieran cuenta. Poco a poco mis fuerzas se fueron expandiendo hasta que cubrí la mitad del poder militar de Konoha"

"Danzo... aunque logres ganar, todo será para nada" - dijo Hiruzen con frialdad - "Lo que estás a punto de hacer, destruirá a la aldea y nos dejará vulnerables"

"Eso es lo que nos hace diferentes, Hiruzen" - respondió Danzo - "Mientras tú pensabas que una pelea entre los dos causaría este escenario, yo pensaba en como solucionar las cosas luego de salir victorioso... y ahora que esas dos están embarazadas del Kyubi no Yoko, ¡tengo el método necesario para cumplir mi meta!¡Konoha se alzará frente a las demás naciones Elementales!"

"¡Ni creas que voy a dejar que tengas a mi bebé!" - rugió Kushina mientras liberaba sus cadenas, solo para vomitar por las nauseas y en el proceso deshacer su Henge. Mikoto estaba en una situación similar, así que tampoco pude hacer nada.

"Será mejor que no intenten nada estúpido, ustedes dos" - bufó Danzo mientras miraba a las dos mujeres - "No quiero perder a mis nuevas herramientas, mucho menos a dos buenas máquinas de soldados"

"Kushina, Mikoto... detrás de mi" - dijo Tsunade mientras su confiable asistente se ponía en guardia junto a ella. Las dos matriarcas asintieron mientras se escondían detrás de la rubia de grandes pechos, aunque podía notarse la furia y el odio que sentían por Danzo en estos momentos.

"Senju Tsunade... sinceramente nunca te tuve en cuenta en mi plan" - dijo Danzo con frialdad - "Después de todo, nunca pensé que la hija prodiga volvería a Konoha luego de todo lo que sucedió... incluso para asegurarme de que no intervinieras nunca más, mandé a Kato Dan a una zona de máximo riesgo..."

"!" - Tsunade y Shizune abrieron los ojos cuando escucharon esto porque no podían creer lo que estaban escuchando. Ellas sabían que la muerte de Dan tenía algo extraño en todo esto, pero nunca se les pasó por la cabeza que el responsable había sido el hombre que estaba frente a ellas.

"Sí... yo fui el que mandó a tu novio a ese frente..." - sonrió Danzo - "Incluso la muerte de tu pequeño hermano menor estuve presente... solo tuve que mandar a un shinobi como explorador para que fuera capturado por las fuerzas hostiles y ellos hicieron el trabajo sucio"

La furia de Tsunade y Shizune crecía con cada palabra que Danzo decía.

"Danzo... no voy a perdonarte por esto..." - dijo Tsunade mientras se lanzaba contra Danzo con toda sus fuerzas y lo tomaba del cuello.

"Heh" - Danzo solo le dio una sonrisa con desdén mientras sentía como su cabeza explotaba por el impacto el azote de Tsunade.

"Imbécil..." - murmuró Tsunade mientras volvía a su lugar en silencio. Ella quería darle una muerte lenta y dolorosa al bastardo que fue responsable de la muerte de sus seres queridos, pero no podía arriesgar la seguridad de Mikoto y Kushina por una mísera venganza.

"¡Tsunade-sama!¡Cuidado!" - exclamó Shizune con terror.

"¿Eh?" - Tsunade no sabía que era lo que trataba de decir, pero su sentido como shinobi le dijo que se moviera lo más rápido posible.

Ella dio un pequeño salto hacia un lado, solo para sentir como su hombro era penetrado.

"Tch... como se esperaba de una kunoichi con años de experiencia... una pequeña señal y pudiste salvarte de una herida letal" - dijo Danzo mientras retiraba la espada del cuerpo de la mujer.

". . ." - Tsunade apretó los dientes mientras usaba su Jutsu de Mano Mística para poder curar la herida que sentía - "¿Cómo?"

"¿Donde quedaría la diversión si te lo dijera?" - sonrió Danzo mientras afuera se escuchaba a la gente pelear entre ella - "Aunque es una lástima que no lograra matarte de inmediato... perdí mucho por ese ataque y no conseguí nada"

Los presentes quedaron en silencio mientras veían a Danzo como si fuera un monstruo. Él había logrado levantarse como si nada hubiera pasado luego de que Tsunade hiciera explotar su cabeza en miles de pedazos.

"Yo sé lo que hiciste, bastardo..." - dijo Mikoto con frialdad - "Conozco muy bien esa técnica"

"Sería un insulto a tu clan si no lo hicieras, Mikoto" - dijo Danzo mientras soltaba una carcajada lunática y se quitaba el parche que cubría su ojos, mostrando un ojo familiar.

"Eso comprueba mi suposición... el ojo de Fugaku... tú puedes usar el Izanagi..." - dijo Mikoto con frialdad mientras observaba al hombre frente ella - "La técnica prohibida del clan Uchiha que hace que todas las heridas, la muerte e incluso la realidad misma, no sea más que solo una ilusión..."

"¡¿Como puede existir una técnica tan poderosa?!" - exclamó Hiashi mientras sentía un dolor de cabeza al observar el brazo de Danzo- "¡¿Qué es lo que tienes en tu brazo?!¡¿Cómo es que puedo sentir tantas firmas de chakra en él?!"

Hiashi no podía creer como antes no se había dado cuenta de un detalle tan importante.

"Como se esperaría del Byakugan" - dijo Danzo mientras se quitaba las vendas de su brazo, mostrando una imagen que hizo que los presentes sintieran asco.

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Lamento incongruencias con capítulos próximos (Cap reescrito el día 18-06-2020)