Las palabras de Nan Yan dejaron atónitos a los dos presentes en la habitación.
An Xiran nunca había esperado que Nan Yan, quien siempre había parecido débil y sumisa, siguiendo constantemente detrás de An Muyao y obedeciendo cada una de sus órdenes, dijera tales palabras.
An Muyao, aún más, nunca esperó que Nan Yan se atreviera a hablarle de esa manera. Su rostro no pudo ocultar su ira por más tiempo.
Nan Yan caminó lentamente hacia ella, su esbelta figura erguida como un pino, exudando un aura inexplicable.
Su mirada fría se fijó en los ojos de An Muyao mientras se burlaba —No eres más que una heredera falsa que aprovechó el nido de otra persona. ¿Qué te hace pensar que mereces todos los privilegios que disfrutas?
—Has tomado el lugar que originalmente me pertenecía, y ahora quieres controlar mi vida. ¿Quién te crees que eres?
El rostro de An Muyao palideció al instante —Yanyan, eso no es lo que quise decir...
Support your favorite authors and translators in webnovel.com