1 La Primera Batalla

"El conejo sabio está consciente de que la zanahoria no saltará hacia él."

Usagi, la Guerrera de la Liebre.

"Deseo por libertad."

Nombre real: Hitonomi USAGI

Nacimiento: 3 de marzo

Estatura: 158 cm

Peso: 52 kg

Hitonomi es la única hija de una respetada, culta familia de guerreros que habita en una región rural. Dado su extraño pasatiempo de coleccionar cuchillos y otras armas varias, junto a su obsesión por la disección de animales, la chica llegó a ser apartada por los otros niños de su edad.

Esto, sumado a las exigencias de su familia por convertirla en un miembro digno del Clan Liebre mediante un constante entrenamiento físico y mental, fue lo que acabó llevándola a volverse bastante reservada y mentalmente inestable.

A la edad de quince años huyó de su hogar, en búsqueda de algún sitio donde pudiera encontrar su propio camino. Al llegar a una ciudad lo suficientemente alejada de su pueblo natal, Hitonomi se encontró con la cruda realidad. Sin dinero, familia o amigos, sobrevivió a punta de hurtos y extorsión, hasta que una pelea con un hombre que se resistió a ceder su billetera se salió de control, acabando ésta en la muerte del sujeto.

Tras ser capturada por las autoridades, Hitonomi fue encerrada en una correccional juvenil, con la esperanza de que pudieran rehabilitarla a la sociedad y la pobre chica pudiera evitar el cruel destino de la prisión. No obstante, ni esto reparó el irremediable odio que la joven había acumulado durante quince años. Al ser trasladada a una prisión debido a su comportamiento irremediablemente agresivo, Hitonomi tuvo una discusión con otro reo, un famoso asesino serial. Para cuando los guardias llegaron, el hombre se hallaba en el suelo, muerto, mientras que la chica aún vivía, pese a que su rostro había sido atravesado por una vieja hoja oxidada.

Tras el procedimiento médico de eliminación del tejido dañado por la herrumbre, Hitonomi fue puesta en una celda solitaria de alta seguridad, destinada a aquellos condenados al castigo capital. Cegada permanentemente de un ojo, aún fue capaz de leer la invitación a la legendaria Guerra Zodiacal que le fue hecha llegar mediante un mensajero misterioso.

Cuando se encontraba caminando hacia la horca, se liberó de las esposas, escapando de la cárcel y dejando un rastro de sangre tras ella.