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[*Nombre: Kokabiel.

Raza: Ángel Caído.

Trabajo: Usuario de Luz, Espadachín.

Vitalidad: 10234.

Fuerza: 954.

Magia: 766.

*Lista de Habilidades:

-Ser de Luz (NEW): El usuario es un ser nacido de la luz, por lo que su cuerpo y alma tienen características similares al elemento.

-Transformación de Luz (NEW): Puede utilizar el elemento transformado como arma, objeto, e incluso fuerza.

-Caído (NEW): Su cuerpo está restringido de zonas naturalmente santas por la corrupción de su estado primario de "Ángel".

-10 Alas (NEW): Se denota como una habilidad este rasgo físico ya que es un rasgo mejorable, cada par de alas le otorga una fuerza increíblemente mayor a un Ángel Caído.

-Resistencia Anormal (NEW): El cuerpo del usuario está extremadamente fortalecido debido a entrenamiento, al punto de que su resistencia está mucho más allá de seres del mismo nivel.

-Pecador (NEW): El usuario fue creado como un ser de luz y como consecuencia de sus experiencias, actualmente ha cometido tanta maldad como para hacer de este aspecto abstracto una habilidad real, casi personificado el aspecto.

-Superior (NEW): El usuario posee un estado jerárquico lo suficientemente alto como para ser denominado un Ancestro de su raza, provocando mediante el paso del tiempo la creación de esta habilidad natural.

...

...]

'Oh, ya veo.'

El tipo tenía varias otras habilidades que parecía haber ganado como consecuencia de una vida inexplicablemente larga, pero Alexander no estaba interesado en más de esto.

De hecho, obteniendo la respuesta que esperaba, Alexander volvió de nuevo su mirada hacia este tipo que ahora estaba solo a unos metros de distancia.

"¿Y bien? ¿Finalmente te has dado cuenta de tu situación?"

Alexander no respondió, más giró su cabeza y miró las siluetas de estos magos en el aire que le apuntaban con diferentes hechizos al mismo tiempo.

Este hombre, Kokabiel, parecía insultado con la inexpresividad de Alexander, así como de que fue ignorado, pero justo cuando estaba por hablar, escuchó las primeras palabras que Alexander dijo en este momento.

"Así que... Kokabiel, ¿verdad?"

"¿Oh, me conoces?" Kokabiel sonrió sardónicamente en dirección a Alexander, "Te tomó algún tiempo, pero entiendo tu shock, de hecho, mi nombre es Kokabiel. Supongo que incluso alguien como tú debería saber sobre una figura reconocida mundialmente en lo sobrenatural como yo."

"... Según lo que tengo entendido, sé que desprecias otras razas que no sean los mismos ángeles caídos, entonces, ¿por qué estás trabajando con unos magos humanos?"

Kokabiel sacudió la cabeza, "Lo siento, actualmente no tengo tanto tiempo para charlar contigo y disfrutar de tu desesperación, al menos, no en este lugar, por lo que."

Chasquido.

"Atrápenlo."

Enseguida, las decenas y decenas de magos en el aire destellaron su magia de hechizos vinculantes, que se manifestaban de diferentes formas físicas como cuerdas, cadenas y demás, ¡y todas se arraigaron firmemente al cuerpo de Alexander!

"Bueno, ahí está." Con un suspiro, Alexander miró su ropa ahora rota por las diferentes manifestaciones de hechizos sobre sí, y levantó su cabeza mirando los ojos rojos de Kokabiel directamente.

"¡...!"

¿¡Qué!?

Kokabiel instantáneamente miró hacia los lados, porque pudo presenciar algo tan aterrador que en menos de un segundo le hizo sudar por la espalda, era una sensación extremadamente horripilante como si la mismísima muerte te estuviera mirando delante tuyo, sin tú mismo notarlo.

¡Kokabiel incluso llegó a pensar que los Maous habían llegado detrás suyo listos para atacarlo!

Naturalmente, Kokabiel no pudo alcanzar a enlazar que todo eso sucedió cuando Alexander lo miró a los ojos.

Kokabiel sacudió la cabeza, ahora parecía un poco más apresurado que antes, "Como sea, magos, hagan el círculo mágico de vuelta, no quiero llamar más atención de la necesaria cuando estoy aquí..."

Kokabiel se acercó a Alexander, y lo miró con burla, "Y tú, insecto, duerme."

Estirando su brazo y a punto de golpear la cabeza de Alexander con un gesto muy burlón... Kokabiel parpadeó en el siguiente momento porque algo que no entendía sucedió.

"¿Eh?"

Rápidamente, Kokabiel se dió cuenta de lo que pasó.

"¿Dónde está mi brazo?"

Tan simple y llano como sonaba, ni siquiera sintiendo dolor, solo conmoción, Kokabiel miró su hombro, dónde había una clara línea que delineaba con el resto de su brazo faltante...

"¡Kokabiel-sama!"

"¡Cadre!"

Parecía que los magos humanos sabían del estado de Kokabiel, ya que viendo lo que veían sus ojos exclamaron soprendidos. ¡Ellos estaban alarmados!

Porque en un instante, cuando Kokabiel iba a golpear a Alexander para desmayarlo, ¡Alexander desapareció!

Y no solo eso, ¡sino que también desapareció el brazo estirado de Kokabiel!

"Ah..." Fue lento, al principio, pero en dos segundos el dolor cortante en su herida se fue haciendo más agudo, tanto así que la expresión de Kokabiel se horrorizó. "¡Ahhhhh!"

"¡Mi brazo, mi brazo! ¡Ahhhhhhhhhhhhhh!"

Este hombre, Kokabiel, empezó a gritar como un cerdo siendo asesinado cuando su cabeza entendió que su brazo había sido cortado a un velocidad tan alta que ni siquiera lo notó.

Tal vez sea por el estado de vulnerabilidad en el que se sentía, pero en ese momento de conmoción y terror al ataque y atacante desconocido, Kokabiel se alarmó al máximo mientras sudaba y era despertado fríamente por el agudo dolor en su herida.

"¡¿Quién está ahí?! ¡¿Quién me hizo esto?!"

Miró en todos lados como una animal salvaje.

La furia que sentía solo era Igualada por el terror.

Kokabiel ni siquiera podía entender lo que pasaba, porque incluso si un Maou estuviera delante suyo, ¡todavía no podría cortarle un brazo tan fácilmente!

En ese momento, fue que Kokabiel se dió cuenta de que Alexander había desaparecido de su posición de hace unos segundos.

"¿Oh? Supongo que fui yo el culpable, la verdad."

Kokabiel giro su cabeza a la dirección de la voz y vió a Alexander, ahora con una katana simple en una mano, y su brazo en la otra.

Kokabiel finalmente fue superado por la furia extrema que sentía.

"Tú..."

"¡TÚ...!"

"¡Hijo de puta, muere!"

Una lanza dorada enorme así como estrepitosamente poderosa, se manifestó detrás de Kokabiel, y con la cara arrugada formando una expresión prácticamente inhumana, la lanzó hacia Alexander.

¡La concentración de poder en esa lanza era tanto que mientras atravesaba el viento, creaba ondulaciones casi ficticias en el espacio circundante!

¡Incluso algunos magos que estaban desprevenidos, se vieron envueltos en una tormenta repentina de poder tan grande que sus hechizos y círculos mágicos se destruyeron directamente!

Esa era simplemente uno de los atques más poderosos que Kokabiel podía realizar...

¡Corte!

"¿Eh?"

Una luz parpadeó delante de la cara de Kokabiel para su sorpresa justo después de lanzar su ataque, y vió como la enorme lanza que había enviando para matar asertivamente a Alexander fue dividida en dos en un solo tajo.

¡Auge!

¡Boom!

¡Boom!

Laa dos partes de la lanza tenían tanto poder imbuido que hicieron destrozos en el bosque que le seguía.

"Bastardo, ¡te mataré! ¡¿Cómo te atreves!? ¡¿Cómo te atreves a romper mi ata-?!"

Cuando estaba gritando, Kokabiel de repente se calló al darse de cuenta de que sus ojos tenían una mirada muy rara.

Los niveles de sus ojos veían diferentes, y esta diferencia de nivel se iba haciendo más y más grande.

Pero, ¿qué...?

Antes de que pudiera entender que pasaba, la consciencia de Kokabiel se apagó.

El destello del Sharingan en los ojos de Alexander brilló fríamente por un momento, para luego volver a sus ojos normales.

¡Los magos estaban tan soprendidos con esto que sus ojos se querían salir de sus cuencas!

El hombre que habían venido a matar, ¡había dividido fácilmente el ataque más poderoso de el señor Kokabiel, y no solo eso, incluso le cortó un brazo con la misma facilidad!

Ruido sordo.

El sonido del cuerpo de Kokabiel desmayado cayendo al suelo despertó a los magos de su trance y conmoción.

"¡Kokabiel-sama... está muerto!"

"¡Huir, tenemos que huir!"

"¡Ahhhhhhhhhhhh! ¡No quiero morir, no quiero morir! ¡Me voy de aquí!"

Haciendo caso omiso de las reacciones variadas y aterradas de los magos, Alexander simplemente se bufó antes de pisar el suelo... y desaparecer.

Seguidamente, era posible escuchar los lamentables gritos de casi cien magos que no pudieron huir de la muerte...

....

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