116 CAPÍTULO 116- Detrás de un engaño.

Humanos contra demonios.

CAPÍTULO 116

(Tiempo atrás.)

Yo, de 15 años, estaba jugando con un perro en la entrada de la escuela. El perro era callejero, y apestaba un poco, pero no me importaba.

—¡Eres muy lindo!

Varias chicas se pararon detrás de mí.

—¡Daniel, no lo toques, apesta!

—¡Te puede contagiar algo!

—Estoy seguro de que este perro no ha sido acariciado en mucho tiempo... Darle un poco de cariño es lo mínimo que puedo hacer para que no se sienta miserable.

Me quité mi mochila y saqué un sándwich.

—Lo estaba guardando para comerlo después, pero creo que puedo compartirlo contigo.

Partí a la mitad el sándwich y le di una mitad al perro.

El perro se lo comió y comenzó a saltar.

—Creo que le gustó...

Dejó de saltar y se me quedó viendo mientras movía la cola.

—Sigue con hambre...

Le di una mordida al sándwich y le di lo demás al perro.

—Toma, ya me llené.- Dije sonriendo.

El perro se la comió rápidamente y me comenzó a lamer la cara.

—Supongo que es un "gracias".- Dije sonriendo y acariciando su cabeza.

Sonia se acercó a mí y acarició al perro.

—D-Daniel... Q-quiero hablar contigo... ¿T-tienes tiempo?- Dijo sonrojada y nerviosa.

Volteé a verla y le sonreí.

—Claro, está bien.

Me tomó de la mano derecha y comenzó a caminar.

•

•

Daniel la siguió y las chicas que estaban detrás de él, se pusieron celosas.

—¿Desde cuándo son tan cercanos?

—Daniel y ella son amigos desde pequeños.

—¿Son amigos de la infancia?

—Eso le da demasiada ventaja.

•

•

Sonia y yo nos alejamos de la escuela, y nos sentamos juntos en una banca, estábamos en un parque.

—¿Qué pasa, Sonia?

—D-Daniel... S-somos amigos desde pequeños... Y últimamente te he visto hablar demasiado con Valeria.

—Es de las pocas chicas que no trata de besarme, me agrada mucho...

Sonia se puso completamente roja y me di cuenta de lo que pasaba.

—Vaya, vaya. Sonia, no sabía que te gustaba.

Volteó a verme y se puso aún más roja.

—B-bueno, D-Daniel, l-lo q-que p-pasa e-es q-que...

Le acaricié la mejilla derecha con mi mano.

—Eres la única chica que me gusta, y soy un poco tímido, así que no me atreví a confesarte mis sentimientos... Pero ahora que me doy cuenta de que te gusto, supongo que puedo confesar mis sentimientos... Sonia, ¿aceptas salir conmigo?

—Daniel...- Dijo sonrojada y sorprendida, no podía creer lo que yo estaba diciendo, lo sabía porque ella estaba temblando.

Cerré los ojos mientras sonreía.

—Si la respuesta es sí, dame un beso, pero si la respuesta es un no, acaricia mi cabeza.

Sonia acarició mi mejilla derecha y se acercó a mí.

—Eres el chico más bueno que he conocido... Te amo, Daniel.

Sonia comenzó a besarme.

•

•

Cris los estaba observando desde lejos, les estaba tomando fotos con un teléfono.

—Vaya, hasta que se atrevió.- Dijo sonriendo.

•

•

Dejamos de besarnos y acaricié sus mejillas con mis manos.

—Ese fue mi primer beso.

—El mío también.- Dijo Sonia sonriendo.

—No puedo comprarte cosas caras... Pero al menos intentaré hacerte reír. Dicen que los novios divertidos son los mejores.

—Quiero que sigas siendo el mismo de siempre, Daniel.

Juntamos nuestras frentes.

—Nunca cambiaré, te lo prometo.

—Te amo... Y siempre te amaré.

•

•

(Presente.)

—¡¿"Y siempre te amaré"?! ¡¿Por qué me creí esa gran mentira?! ¡Maldita sea!

—¿Daniel?- Dijo Sandro.

—Lo siento... Recordé algo doloroso... Sandro, si enamoras a Sonia, ten cuidado y no creas en sus palabras. Te lo digo por experiencia.

—Listo, ya me puse la ropa.

Volteé a verla.

Zei está vestida con un vestido negro, medias blancas y zapatos negros.

Le hice esa ropa con mi magia.

—Bien, ya estás vestida, podemos seguir con nuestro camino.

—¡Gracias por la ropa, amo!

—Dime Daniel, por favor.

Volteo a ver a Neka.

—Vamos, nos falta poco para llegar al castillo... ¿Y tus hermanas son igual de fuertes que tú?

—Lo son, aunque yo soy la más fuerte.

—Y no lo dudo, lograste capturarme fácilmente, no detecté tu presencia. Aparte, el poder de eliminar magia es increíble.

—¡Gracias por tus cumplidos, Daniel!- Dijo sonrojada.

Volteo a ver a Zei.

—¿P-puedes volver a tu forma animal otra vez?

—Claro.

Comienza a brillar y se vuelve un lobo gris. Sí, funcionó. Su ropa desaparece. Al volver a su forma humana, tendrá su ropa... Su transformación es increíble... ¡Y es muy adorable!

—¡Realmente eres linda!

Acaricio su cuerpo y sus cabezas.

—¡¿Cuánto tiempo puedes estar en esta forma?!

—Esta es mi forma normal, puedo estar así para siempre... Aunque nací con forma humana.

—Pero también debes comer y bañarte... Estarás en tu forma animal cuando salgamos a pasear, por ahora, estarás en tu forma humana.

—Sí, Daniel.

•

•

(Mundo 1.)

Sonia está llorando en su habitación, está sentada sobre la cama.

—Daniel ya olvidó lo que pasó, pero yo no puedo olvidarlo... Realmente me arrepiento de lo que hice... Me dejé convencer por unos simples regalos.

Maisha aparece frente a la cama de Sonia.

—Daniel era el amor de tu vida, pero tú no eres el amor de su vida...

Sonia levanta la mirada y observa a Maisha.

—¿Quién eres?

—Una amiga... Solo te quiero decir que te enamoraste de Erick porque Daniel está destinado a ser pareja de otra chica... Si una pareja no está destinada a estar juntos, uno de ellos terminará enamorándose de otra persona.

—Daniel... ¿Quién es el verdadero amor de Daniel?

—Solo te puedo decir que no es humana.

Maisha desaparece y Sonia levanta la mirada.

—¿No es humana?

•

•

Maisha apareció en el comedor de su casa y suspiró.

—Ah... La culpa me está matando.

El Dios supremo apareció al lado de ella y se sentó sobre la mesa.

—Era obvio que te sentirías culpable.

Maisha se arrodilló.

—Si Daniel se entera de lo que hiciste, te va a odiar.

—Sí... Lo sé... Por eso nunca se lo diré.

—Daniel no es idiota... Ten cuidado.

El Dios supremo desapareció.

—No me arrepiento de lo que hice... Daniel es mío... Sonia no se lo merecía.

(Nota del autor: Si hay comentarios en este capítulo, seguiré subiendo capítulos >:3 ¿Qué opinan de Daniel? Su desarrollo, su personalidad. ¿Qué opinan de la historia en sí?)