2 Capítulo I Todo es posible

Adres Hawke

Comienzo. ¿Qué es? Se dice que es el punto de donde parte, nace o surge una cosa. Se supone que esa cosa soy yo, pero ¿Estoy preparado? O mejor dicho ¿Están preparados? ¿Si? ¿No? ¿Por dónde empiezo? No lo sé, pero ¿Acaso eso importa?.

Nunca he sido bueno para narrar, al menos  no  cuando de mí se trata. Para mí es difícil, porque  es mi propio principio, mi propio preámbulo. No obstante, vuelvo a preguntar ¿Están listos?

Si lo están, ésta es mi historia.

Empezaré con lo básico, presentándome y te hablaré un poco acerca de lo que es mi vida o lo que fue antes de... un sin número de sucesos que ya te enterarás. Mi nombre es Adres Hawke, tengo 19 años, con una altura de 1.78. Crecí en un pequeño pueblo llamado Asfásican, en una pequeña Alquería que está ubicada casi a las afueras del pueblo, en el centro del bosque Seytan.

Antes de que sigas leyendo, te advierto que mi historia quizás no sea el típico estereotipo, ni lo tópico que siempre lees. No obstante llevará un toque especial como toda historia lo lleva.

No diré que mi vida es normal y luego pasar a la parte donde se vuelve inestable e irregular, donde todo cambia. Mi vida no es común, en realidad estoy seguro que la de nadie lo es, ya que somos personas con diferente moralidad, no vemos las cosas de la misma manera, no reaccionamos igual y no pensamos igual. No somos comunes, somos diferentes internamente. Si pertenecemos a la misma especie, pero eso no nos hace ordinarios.

Es difícil que una persona piense igual que yo. Es decir, normalmente hay personas que comparten ideas o formas específicas de ver las cosas, su mundo y la vida. Es difícil querer ver todo desde una misma perspectiva como los demás lo hacen y no poder. Es difícil querer dejar de actuar, ser tú mismo y no poder. Querer sentir placer al ser tú, pero obligarte a no hacerlo por el bien de los de tu alrededor.

Puede que pienses que estoy loco y que quizás no actúo como otros personajes o quizás si lo haga. Puede que digas que hoy trato de sonar como un grano en el trasero, con un carácter de mierda y luego tenga un pretexto, poder hacerme la víctima y caerte bien. Sin embargo, me importa un carajo lo que pienses y hablo honestamente.

A lo largo de mi vida aprendí a querer a los demás, a aceptarlos tal cuales son, aunque se vean tan míseros y simples.

Toda mi existencia he fingido emociones, que no tengo, que no siento. Copio las acciones de las personas como un dispositivo inteligente.

Observo a los demás e imito lo que creo que esta bien, que me servirá para poder actuar igual a ellos y tratar de ser alguien normal. Es irritante. Lo sé. Parece estúpido. Tambien lo sé. Si dirás que es inaudito, créeme que lo sé y no espero que lo entiendas.

Mis padres me han llevado donde especialistas para que puedan ayudarme. He llegado al punto de tener que fingir que mejoro, ya que los encuentros con ellos son irritantes, pero en realidad sigo igual, como un fenómeno que arrasa con todo y solo causa daño sin pensar o reaccionar. O como una piedra que solo desea estar en el mismo lugar sin sentir y sólo puede causar daño o ser útil por medio de los demás.

Nadie cree que no soy capaz de sentir, que nada me importa, que me da lo mismo lo que mis acciones o las de los demás puedan causar. Terminan por creer que sólo soy una persona difícil o diferente. Al diablo con eso. Durante años no he podido ni han podido hacer nada. Nadie entiende lo que soy. Ni siquiera yo ¿Soy un fenómeno? No ¿Un extraterrestre? No sé ¿criatura de otro mundo? Tal vez ¿Ser sobrenatural? Una posibilidad. No te hagas ideas locas, porque terminarás con el cerebro calcinado.

Todas las mañanas me veo al espejo y me pregunto ¿Quién soy? observo mi reflejo y el resultado es el mismo. Soy un ser humano, una persona igual a todas las demás, de la misma raza, misma etnia, mismo origen, nada diferente físicamente. Sin embargo, no puedo sentir dolor físico, ni emocional, tampoco puedo amar a alguien, ni querer, ni preocuparme. Es como si fuese un muerto viviente o un robot o zombie.

Cada día veo personas quejándose por el dolor, por los problemas; que los agobia la preocupación, la tristeza, las enfermedades, entre otras cosas y la verdad yo no entiendo, simplemente no puedo. Me parece tan patético e irritante. Todo lo mencionado anteriormente para mi es un enigma, no existe. Es como algo que necesita ser descubierto, pero que aún está en proceso, sin embargo, no sé si alguna vez en la vida pueda ¿Experimentarlo? ¿Sentirlo?.

Soy alguien completamente anormal, pero me gusta, me gusta mucho, porque sé que no soy común y aunque muchas veces quisiera sentir lo que sienten los demás o cómo ser igual a ellos, aunque sea estúpido, pienso que por algo soy diferente, que por algo estoy acá y que tengo un propósito, sólo necesito descubrir para que o quién fui creado. Pero, a veces solo me decepciono y me resigno a ser un títere más de la jodida vida.

El reloj que se encuentra en mi mesa de noche marca las 4:30 am. Sé que no he dormido nada y que he pasado toda la noche y madrugada despierto. Aunque eso no me afecta. Normalmente duermo con un sedante, ya que no padezco de sueño –un efecto más a parte de los leídos anteriormente–. Ayer me tomé la última píldora y no recordé decirle a mis padres que se me habían terminado. Probablemente hoy por la mañana, a la hora del desayuno lo haga.

Mi familia consta tan sólo de tres integrantes. Mi madre Adeline Atwater una mujer de cuarenta y dos años de edad, mi padre Lucas Hawke un hombre de 45 años y mi persona. No tengo hermanos, mi madre y mi padre pretendieron procrear más hijos después de mí, pero les fue difícil, ya que en el embarazo mi madre tuvo muchas complicaciones. Luego de varios intentos y de visitas donde médicos y otras personas especialistas en el tema se dieron por vencidos.

Mis padres se conocieron en un psiquiátrico, algo muy tétrico. Vivían en este mismo pueblo, que en aquel entonces era más pequeño. Sin embargo, nunca se percataron de su existencia el uno del otro. Los dos llegaron a ese lugar por la misma razón que más tarde sabrás y lo entenderás. No tengo más familia aparte de ellos dos, ya que murieron en un evento trágico que se dio lugar acá en Asfásican, donde no hubieron sobrevivientes. Sé que te preguntarás cuál fue ese evento, pero capítulos más adelante te contaré y verás cómo todo tiene sentido.

Hay muchas cosas de las cuales quiero hablarte y necesitas saber, pero tenme paciencia. Pronto las sabrás. Quizás en algún momento no entiendas que es lo que sucede y te hagas muchas interrogantes. Pero, poco a poco te irás dando cuenta el porqué de cada cosa. Sólo espero y estés preparado para lo que viene.

Si llegaste hasta acá espero y te quedes, no te prometo una historia con una trama perfecta, pero si prometo que no te arrepentirás de leerme. Te contaré todo a mi manera, a mi forma y desde mi perspectiva. No soy perfecto, pero con tu ayuda puedo llegar cerca de serlo.