La caída de Falcon Scott (55)

—Sunny había pasado muchos largos meses en el cuerpo de la sombra sin nombre. Desde el sangriento suelo del Coliseo Rojo hasta las calles en llamas de la Ciudad de Marfil, había librado innumerables batallas con las cuatro manos garrudas de la criatura Despierta.

...Sin embargo, nunca había experimentado ser el Diablo de las Sombras como un Ascendido.

Al poseer el poder de un Maestro y aumentado por sombras, explotó con un poder verdaderamente aterrador. Con tres metros de altura, Sunny se había convertido repentinamente en un violento heraldo de destrucción. Se lanzó sobre la masa de escarabajos negros, destripando a cientos de ellos en un instante.

Sostenía una espada en cada una de sus cuatro manos, dos de ellas eran el Pecado del Consuelo y el Fragmento de Medianoche, y dos estaban formadas por sombras. Cada una se movía con una velocidad asombrosa, tejiendo una esfera translúcida de devastación en el río de oscuridad.