37 Capítulo 37 - Definitivamente ninguna oportunidad de ganar

Para cuando Hao Ren, Xie Yujia y Ling regresaron al campo, la carrera de obstáculos de 400 metros ya había comenzado. Caminaron de regreso a las gradas de espectadores mientras veían la carrera en la pista.

En teoría, había dos horas reservadas para el almuerzo, pero sólo algunos estudiantes fueron a la cafetería a comer. La mayoría de ellos simplemente comían galletas y pan, jugaban a las cartas, o conversaban mientras veían los juegos.

Zhao Jiayi y los otros chicos se sorprendieron y emocionaron al ver a Hao Ren y Xie Yujia regresando juntos. Nadie podría haber predicho que sin darse cuenta Hao Ren se hiciera tan cercano a la presidenta de la clase Xie Yujia, especialmente cuando Hao Ren parecía honesto y tímido. "Xie Yujia probablemente se haga su novia si todo continúa yendo tan bien", pensaron todos.

—Hey, la última vez dijiste que si Ren podía conseguir una novia dentro de los cuatro años de la universidad, nos darías 1000 yuanes a mí y a Cao Ronghua —gritó a Zhao Jiayi Zhou Liren, dándose cuenta de lo que sucedía. Él acababa de perder 30 yuanes jugando a las cartas.

Zhao Jiayi solía pensar que era absolutamente imposible que Hao Ren encontrara una novia, pero ahora comenzaba a sentir pánico. Sin embargo, no estaba en su carácter romper una promesa. Por lo tanto, lo pensó por un momento y dijo—: Zhou Liren, ¿Qué tal si hacemos otra apuesta? Esta vez apostaremos sobre en qué posición terminará Ren la carrera.

Los compañeros de clase a su alrededor estaban también muy emocionados y listos para unirse a la apuesta cuando escucharon la sugerencia de Zhao Jiayi. dijeron—: ¡Jeje, esto es interesante! ¡Cuenta con nosotros!

—¡De acuerdo, de acuerdo, de acuerdo! ¡Se abren las apuestas! —Zhao Jiayi tomó un papel y un lapicero del suelo y comenzó a anotar y registrar las apuestas, lanzando las cartas que tenía en sus manos a un lado. Luego dijo—: La proporción será uno a uno sí apuestan que Hao Ren llegará en el último lugar; uno a uno y medio si apuestan que Hao Ren llegará en penúltimo lugar… Uno a cincuenta si creen que Hao Ren llegará de segundo lugar; ¡y uno a cien si creen que Hao Ren puede llegar de primer lugar!

Algunos más se animaron tan pronto como Zhao Jiayi comenzó la apuesta.

—¡Apuesto 100 yuanes a que Hao Ren llegará de último lugar!

—¡Apuesto 50 yuanes a que Hao Ren llegará de penúltimo lugar!

—Yo le apuesto al penúltimo lugar también. No puede ser tan débil como para llegar de último lugar, ¿cierto?

—Le apuesto 10 yuanes a que llegará en el último lugar. ¡10 yuanes de ganancias siguen siendo ganancias!

Mientras hacían sus apuestas a todo volumen, Hao Ren y Xie Yujia se sentaron en los mismos lugares de antes; no tenían idea de lo que los chicos estaban haciendo.

Ling también tomó asiento mientras disfrutaba de su bebida en silencio. Su aspecto era común. No era bonita pero tampoco era fea. Ella regresaba a casa todos los días con Zhao Yanzi después de la escuela, y se escaparon juntas de clases hoy. Era obvio que ella era la mejor amiga de Zhao Yanzi en la escuela.

"Más allá del estatus especial de Zi, ella es una niña normal de secundaria y tiene una mejor amiga, sus propios hobbies y su propio temperamento…" Pensó Hao Ren.

Después de la carrera de obstáculos de 400 metros había algunos juegos femeninos. La carrera de relevo de 400 metros, la carrera de relevo de 1600 metros y la carrera de 800 metros…

La apariencia de las estudiantes femeninas vestidas en tops y shorts ajustados instantáneamente calentó el campo que hasta el momento estaba silencioso y aburrido.

La Universidad del Océano del Este era una universidad comprehensiva. Cada especialización contaba con los mismos recursos y habilidades para la investigación. La característica que probablemente la hacía más popular era el gran número de hermosas estudiantes femeninas que tenía.

Los ojos de todos los chicos en las gradas de espectadores se iluminaron, y tomaron nuevamente los binoculares que yacían a sus pies.

Finalmente era la hora para las especializaciones que tenían más chicas que chicos. Especializaciones tales como Artes Liberales, Cine y Televisión y las Bellas Artes demostrarían sus habilidades atléticas.

Viendo que Hao Ren observaba la pista con tan agudo interés, Xie Yujia aprovechó la oportunidad para fastidiarlo—: Hay tantas chicas lindas en la Universidad del Océano Este, ¿y tú todavía no tienes una novia?

—Hay una chica hermosa en mi clase, ¿es necesario que busque una en otro lugar? —dijo Hao Ren sin siquiera darse la vuelta.

Xie Yujia se paralizó por un momento. Entonces vio la expresión calmada en el rostro de Hao Ren, asegurándose de que no tuviese algún otro significado especial. Luego, tras pensarlo por un momento, preguntó—: ¿Tienes ya una novia?

Siguiendo la línea de inicio en la pista, Hao Ren inspeccionó a las chicas hermosas y corpulentas una por una, y ni siquiera escuchó la pregunta de Xie Yujia.

El rostro de Xie Yujia se puso rojo. Había planeado usar la oportunidad de preguntarle a Hao Ren más sobre Su Han. Sin embargo, después de pensarlo un poco más, se contuvo al sentir que había sido muy chismosa últimamente.

¡Bang! Ocho chicas preciosas comenzaron a correr tan pronto como la pistola de inicio disparó.

Aunque su velocidad no podía compararse con la de los chicos, sus figuras delgadas y hermosas eran la vista más maravillosa para los chicos en las gradas.

El revoloteante y sedoso cabello negro, las largas y delgadas piernas al vuelo, los tiernos y suaves brazos balanceándose, y las mejillas sonrojadas; todas estaban mostrando el encanto de los deportes.

—¡Eh… Hem! —sonó una tos dos veces detrás de Hao Ren.

Hao Ren volvió la mirada y vio a Zhao Yanzi parada detrás de él, no se había dado cuenta de cuando había regresado.

Se movió un poco a la izquierda haciendo espacio para ella. Entonces preguntó—: ¿Qué tal estuvo?

—¡No tan bien! Pareces feliz viendo a las chicas bonitas, tus babas casi se derraman de tu boca —dijo en un tono celoso Zhao Yanzi y tomó asiento.

Hao Ren se dio cuenta entonces de que estaba tan concentrado viendo la carrera de las chicas hermosas que no había prestado atención a nada de lo que Xie Yujia había dicho. Sin embargo, estaba demasiado avergonzado como para preguntarle qué había dicho antes.

Aunque no se lo podía culpar. Ningún chico podría mantener la calma mientras veía a tantas chicas hermosas. ¿Acaso los ojos de los otros chicos no estaban a puntos de estallar?

Obviamente, Hao Ren no le explicaría esto a su "prometida". Fingió volver la mirada seriamente hacia Zhao Yanzi. Intento decir algo pero al final no dijo ni una palabra.

De hecho, a él le hubiera encantado saber de qué habían hablado Su Han y Zhao Yanzi, pero no podía preguntarle ya que Xie Yujia estaba allí.

—El próximo evento será la carrera de 1500 metros para hombres. Todos los participantes, ¡por favor ingresen al campo y prepárense! —repitió el anuncio por la radio del campo.

—¡Es tu turno! —recordó Xie Yujia a Hao Ren.

—¡Eh! —Hao Ren se levantó y estaba a punto de bajar de las gradas.

Xie Yujia lo detuvo de inmediato y sacó de su mochila una identificación con un número. Le dijo—: ¡Ten, póntelo!

Se levantó y estaba por ponerlo en el pecho de Hao Ren, pero pareció recordar algo. Al final, simplemente se lo entregó a Hao Ren, diciendo—: Póntelo tú mismo.

Hao Ren asintió, retiró el plástico, y pegó la identificación con el número en su pecho.

—Todos los participantes, por favor ingresen al campo…—continúo el anuncio en la radio.

De repente, Hao Ren se sintió un poco nervioso.

Xie Yujia le brindó una sonrisa alentadora, cerró su puño y le hizo un gesto celebratorio.

Hao Ren le sonrió de vuelta mientras respiraba profundamente y bajaba de las gradas de los espectadores.

—¡Tienes que obtener el primer lugar! —exigió Zhao Yanzi.

Hao Ren no se dio vuelta para mirarla. En su lugar, saludo con la mano y caminó directamente a la pista.

Sin importar si obtenía el primer lugar o el último, no tendría arrepentimientos siempre que diera lo mejor de sí. Esta era la creencia de Hao Ren desde que estaba en la escuela primaria y secundaria. Esto también explicaba cómo Hao Ren podría llegar a la línea de meta cuando todos los demás colapsaran.

El número ocho se correspondía con la línea más externa del campo. Era la posición de mayor desventaja en las carreras de larga distancia.

Huang Xujie, vestido con su atuendo deportivo dorado, estaba haciendo algunos estiramientos; él ni siquiera tenía un número sobre él. Entonces caminó hacia Hao Ren.

Hao Ren lo observó, pero no dijo nada.

—A sus posiciones…—ordenó el árbitro.

Hao Ren se preparó mientras se ponía en cuatro patas y permanecía sobre sus rodillas, con su trasero apoyado sobre los tobillos.

Huang Xujie estaba detrás de él. Su posición era la segunda más externa en la pista; estaba a solo medio metro de distancia de Hao Ren.

—Estudiante de primer año, hoy te haré saber cual es la diferencia entre nosotros, —Huang Xujie le susurró a Hao Ren.

Hao Ren miró por encima de su hombro y vio los zapatos dorados Nike de Huang Xujie y los firmes músculos de sus piernas.

—¡Preparados! ¡Listos!

¡Bang!

La pistola de inicio disparó.