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Capitulo 3. Formas de recolectar información

Mientras miraba hacia el techo, Evan se sumergió en sus pensamientos.

"Si reencarné en este mundo, ¿Cómo fue que morí? ...." Pensó

Vagos recuerdos en su mente surgieron.

"Lo último que recuerdo..." dijo en voz baja Evan.

'Estaba en el departamento de Cristopher quien era un amigo mío, después de ir a comprar un manual de edición limitada por el aniversario número 10 de un juego llamado "Mundo Fantástico." Debido a que el manual ofrecía detalladamente la información de los diferentes personajes del juego y sus habilidades, las estadísticas de todas las armas, como conseguir más puntos de experiencia, artefactos y más. Se podría considerar que era la biblia del juego, mostrando sus mayores secretos y solo algunos jugadores en modo competitivo profesional fueron escogidos para recibir este manual. Debido a que me convertí 2 veces campeón en el torneo mundial, fui escogido para poder recibirlo. Para festejar, Cristopher y yo habíamos comprado unas cervezas, pero debido a que Cristopher no acostumbraba a beber, en menos de 40 minutos cayo dormido debido al alcohol. Por mi parte, decidí darle una mirada rápida al manual. Pero en el instante en que abrí la primera página mi visión se hizo borrosa al igual que sentía mi cuerpo débil hasta que una extraña e intensa luz me envolvió.'

"Eso fue lo último que vi antes de perder completamente la consciencia…" dijo Evan mientras reflexionaba.

"Pero eso no explica cómo llegué aquí. ¿Qué fue esa luz? ¿En realidad morí o tal vez fui transportado? ¿Es temporal o permanente? ¿Puedo regresar?"

Todo tipo de preguntas azotaron la mente de Evan.

"Ah... Es más complejo de lo que pensé." dijo abatido.

"Pero todo esto puede esperar... Lo más importante ahora es poder obtener toda la información disponible que pueda acerca de este mundo. No quiero llamar la atención como si fuese un idiota que no sabe nada del mundo" dijo seriamente.

A Evan se le ocurrió una idea y se levantó de la gran cama.

Se dirigió hacia la gran ventana que estaba siendo bloqueada por la gran cortina roja.

Al abrir ligeramente la cortina, una gran luz iluminó con intensidad la habitación.

Al ver la escena afuera de la ventana hizo que Evan volviera a reconsiderar si no estuviese soñando.

Siendo de mañana, la luz del día podía reflejar a la perfección el esplendor de dicha escena.

Grandes edificaciones blancas estaban a la vista. El edificio con una altura de 10 metros, fue el más pequeño en comparación al resto.

Y el más alto podría llegar a los 100 metros.

Desde la perspectiva de donde se observaba, es como la de un mirador.

El material con el que estaban construidos estas edificaciones era similar al mármol. Grandes acabados y detalles estaban en los muros.

Había estatuas grandes con formas humanas teniendo diferentes expresiones, unos con armas, otros montados en diferentes criaturas en todos lados.

Pero había uno en especial que destacaba, este tenía la figura de un hombre musculoso que tenía sus brazos levantados hacia el aire, y en cada uno sostenía la forma de una llama de fuego. El rostro del hombre era majestuoso e imponente.

"Debe haber sido alguien importante." se dijo Evan a sí mismo.

Evan también pudo ver hermosas áreas verdes, muchos árboles, hermosas flores de diferentes tipos, pequeños lagos.

Tal escena era como los ilustrados en los cuentos de hadas.

Un castillo.

Es lo primero que se le vino a su mente de Evan.

Cada edificio era parte de este castillo, estaban dentro de un gran muro blanco que lo bordeaba, este tenía una altura de 20 metros, y a lo largo del muro, a cada 30 metros había una torre con personas que portaba armas, por cómo se veía se podría decir que es una torre de vigilancia, en el techo de cada uno de ellos se ondeaba una bandera roja.

"Sí que les gusta mucho el rojo…" dijo irónicamente.

La bandera roja tenía una imagen de un ave dorada abriendo las alas y en sus garras están una espada y un escudo.

En la parte superior de la cabeza del ave había una gran corona.

Evan sintió una presión en su cuerpo con sólo ver esa bandera.

"Pensé que ya nada más me sorprendería tanto como saber el hecho de que desperté en otro mundo, pero al ver esto…" dijo Con una sonrisa amarga.

Al ver al horizonte, una gran mancha negra llamó la atención de Evan.

Trató de cerrar un poco más los ojos para poder ver con más precisión.

"¿Esos son edificios?".

Se veían algunas pequeñas edificaciones.

Había algunos movimientos de personas caminando. Pero debido a la gran distancia, no pudo ver con detalle.

Evan Soltó un suspiro y se obligó a calmarse.

"Solo con ver esto, puedo decir casi seguro que el tamaño del área del castillo es fácilmente 3 veces más grande que Central Park que se encuentra en Nueva York. Solo al pensarlo, me siento como un simple pescado dentro del océano." dijo Evan.

Evan se quedó apreciando esta escena por un tiempo. Pero de repente, sintió esta escena muy familiar.

Como si él hubiese hecho todos los días.

Este sentimiento confundió completamente a Evan.

En ese momento un ligero dolor apareció en su cabeza.

"Ah... Volvió a suceder este dolor." Dijo eso mientras se tocaba la frente.

Una idea surgió de repente

"Espera.... Este dolor también surgió de repente al tratar de recordar quien era Martha, Pero después, en realidad no sé pero sentía que conocía a Martha a pesar que era la primera vez que la veía. ¿Cómo fue posible? …" dijo mientras formaba sus conclusiones.

Fue en ese momento que recordó que cuando despertó en este nuevo lugar, una serie de imágenes muy vagas acerca de la historia de una persona que no conocía, pero a la vez sentía que era muy cercano a él, surgieron en su mente.

"Puede que sea lo que pienso..." dijo Evan sorprendido.

Después de haber entendido algo. Se alejó de la ventana y miró alrededor de la habitación.

Su mirada se centró en eso...

"Ahí" dijo eso cuando se acercó lo más rápido al espejo.

Debido a la gran sorpresa y el shock de un inicio, él no se percató de la existencia del espejo que estaba en una esquina de la habitación

Pará poder comprobar la hipótesis de Evan, el espejo era fundamental.

Evan se encontraba de frente al espejo que tenía un marco dorado con algunos grados en él.

El espejo reflejaba la imagen de un joven apuesto que por su apariencia no tenía más de 17 años.

Tenía una piel suave y blanca de porcelana, si se observará a lo lejos podría confundirse a la forma de una mujer.

Pero todo eso fue ignorado por completo, ya que la atención de Evan se concentró en otro lugar.

Específicamente en la zona de la cabeza de dicho reflejo.

Un par de ojos y cabello color gris cenizo, fue lo que resaltaban más a la vista.

"Tenía razón" dijo seguro después de haber confirmado su hipótesis.

Paso su mano sobre su rostro, estaba observando cada detalle.

La serie de imágenes que surgieron dentro de su mente, Evan observaba como un espectador la historia de un hombre desde su nacimiento, su crecimiento hasta la niñez, la pubertad hasta convertirse un adolescente.

El protagonista de esa historia, era la misma persona que estaba en el reflejo del espejo.

"Eso explica del por qué las imágenes surgieron en mi mente, el hecho de haber podido reconocer a Martha a pesar de nunca haberla visto antes y del por qué me sentía muy familiar al ver la vista de la ventana. Todos sus recuerdos se mezclaron con los míos." dijo seguro mientras se veía frente al espejo.

Evan consideraba que el hecho de tener los recuerdos del chico en su mente mezclados con los suyos, era lo que provoca esos dolores en su cabeza. Debido al conflicto de estos recuerdos, su cerebro se le dificultaba ordenarlos y procesarlos adecuadamente.

El consideraba que una opción era darles un orden a estos recuerdos, por lo que tendría que enfocarse a desmenuzar la historia completa del chico.

Este resultado beneficiaba el plan de Evan, cuando le pidió a Martha algunos libros su intención era comprender como funcionaba este mundo, pero con la situación actual tenía la posibilidad de tener más panorama de este mundo. Y que mejor por una persona que ha vivido en el por muchos años.

Los recuerdos del chico funcionaran como un pequeño tutorial para Evan.

En ese momento.

Toc Toc.

"Soy Martha, Su Alteza. Traigo lo que me pidió." nuevamente volvió a sonar esa voz de Martha detrás de la gran puerta.

'Eso fue rápido.' pensó Evan

"Puedes pasar, Martha."

Después de decir eso, la figura de Martha apareció nuevamente en la entrada.

Empujaba un carrito en el cual transportaba algunos platos y utensilios para comer. Ella entró con una sonrisa en su rostro.

"Aquí está su desayuno, Su Alteza. Puede que se vea simple, pero le puedo garantizar que no lo decepcionara." dijo eso mientras entraba a la habitación.

Dijo con orgullo, mientras colocaba una bandeja sobre la mesa que estaba dentro de la habitación.

Destapó el domo de plata de la bandeja, mostrando un solo plato de porcelana.

Debido a que apenas había sido preparado y estaba caliente, el vapor del plato se distinguía con solo ver.

Fue cuestión de instantes que el aroma llegó a la nariz de Evan, y no puedo evitar tragar saliva con sólo olerla.

"Se ve muy delicioso, Martha. ¿Puedo preguntar qué es?" dijo Evan mientras se acercaba a la mesa y tomaba asiento.

"Es una sopa de verduras con unos trozos de carne de jabalí. Es una receta que se hacía en mi familia. Aunque en el castillo hay mucha variedad de ingredientes, no pude encontrar algunos ingredientes por lo que tuve que improvisar con los que pude encontrar. "dijo Martha.

"A pesar que no lograste encontrar los ingredientes pudiste hacer un maravilloso plato, por lo que veo tus habilidades en la cocina son extraordinarias. "dijo Evan sin contenerse al ver el plato.

Solo con deleitarse con el aroma, él estaba seguro que el sabor sería sabroso.

Martha se sorprendió al escuchar su comentario, no esperaba recibir tal alago.

" Sus palabras son exageradas, Su Alteza. Es sólo un simple plato. No debería recibir sus halagos." dijo ella mientras hacía una reverencia.

"Estas equivocada. Yo siempre he pensado que, hasta la cosa más común, puede ser extraordinario para otro. Por lo que, a pesar de ser un platillo sencillo, debes sentirte orgullosa ya que es el producto de tu propio esfuerzo. No lo desprecies de tal forma." dijo Evan.

Ese comentario confundió a la ya sorprendida Martha, ella se quedó en blanco mientras repetía esas palabras nuevamente en su mente.

Ella creía que la persona que decían los rumores describían de manera diferente a la persona frente a ella, no tenían ninguna relación.

Ella había sido asignada al servicio de este joven príncipe hace apenas dos días debido a que él lo solicitó.

Pero debido al accidente que sufrió el príncipe en el día del banquete, fue hasta hoy que ella pudo conocer personalmente a este joven.

Antes que ella empezará su labor como sirvienta personal de este príncipe, había escuchado de sus compañeras diferentes rumores con respecto a su personalidad.

Desde que el joven príncipe era muy arrogante hasta muy lascivo. Acosaba a las sirvientas que se le asignaban. Las manoseada, las miraba lujuriosamente como una bestia en celo e incluso se rumoreaba que se había acostado con algunas sirvientas, pero misteriosamente, ellas desaparecían y nunca más se volvieron a ver. Por lo que pensaban que el después de usarlas y violarlas, las mandaba asesinar. Incluso hubo rumores de que era estéril y su amigo de abajo no se levantaba.

Entre esos y más rumores fueron el motivo que muchos consideraban que estaban condenadas a una muerte segura si se les seleccionaba como la sirvienta principal de este horrible príncipe.

Martha al saber que ella había sido asignada como la nueva sirvienta principal de este príncipe, todas sus compañeras la vieron con lástima.

Aunque tenía miedo en un principio, debido al artefacto que estaba en su cuello, se obligó aceptar su destino.

Por lo que ella ya iba preparada mentalmente para lo peor, pero para su sorpresa dicha escena que tenía en su mente nunca sucedió.

Incluso se sintió más confundida con la actitud amable de este príncipe hacia ella.

Aunque la imagen de este horrible príncipe arrogante y lujurioso estaba aún en su mente, ella tenía otra opinión deferente.

Por lo cual ella decido revaluar en la manera en cómo ve a este hombre.

.....

"Muchas gracias, Su alteza" Ella guardo esas palabras en su mente y agradeció con una reverencia

"No me lo agradezcas, es un consejo que te quiero dar. Puedes verlo como intercambio por haberme preparado mi desayuno." Dijo Evan.

Con una sonrisa en su cara, Martha sólo asintió.

"Bueno, vamos a empezar."

Evan estaba apuntó de tomar la cuchara y probar la sopa del plato, pero se percató que Martha se colocó a un lado de Evan completamente parada.

Evan se sentía incómodo por el simple hecho de que el solo estaba comiendo.

Se quedó pensando por un momento, una sonrisa se marcó en su rostro.

Y se le ocurrió una idea.

"Una pregunta Martha." dijo Evan

" Dígame, Su Alteza" contestó ella.

"¿A qué hora es el desayuno de las sirvientas?" preguntó el.

Ella no sabía por qué el joven hacía esa pregunta, pero de todas maneras ella contestó amablemente.

"El desayuno de los ayudantes y sirvientas del castillo está programado al medio día, después que todos los miembros de la familia real hayan sido servidos." contestó ella.

"Con qué es así... Eso significa que aún no has desayunado ¿Verdad?" pregunto Evan con interés.

"Esta en lo correcto, Su Alteza." dijo ella.

"Esos es perfecto. Ya que hay comida suficiente para servir otro plato. ¿Por qué no te sirves y desayunas conmigo?" dijo amablemente.

Como si ella pensara que escucho mal, no contesto de inmediato.

'¿Dijo que desayunara con él?' se preguntó a sí misma.

Al ver reacción confundida de Martha, él lo volvió a mencionar.

"Toma asiento y desayuna conmigo. Debes de tener hambre." dijo Evan.

Al volver escuchar nuevamente la invitación, ella confirmó que no había escuchado mal.

Pero ella no sabía que decir.

Es un hecho que, al preparar esta vieja receta de su familia, se sintió algo emocional y varias veces pasó por su mente el hecho de comer por lo menos un pequeño plato. Pero no lo hizo porque sabía que si la descubrían haciendo recibiría un gran castigo.

Pero ahora el joven frente de ella la estaba invitando a desayunar junto a él.

"Pero Su Alteza…" ella trató de decir algo más pero no encontró la manera correcta para expresarse.

Debido a sus diferentes estatus sociales, ella sabía que no era correcto y era mal visto que una sirvienta se siente en la misma mesa que una persona influyente, y mucho menos un príncipe.

Aceptar su invitación era romper con todas las etiquetas sociales.

Tal vez Evan pudo entender la vacilación en el rostro de Martha por lo que dijo.

"No te preocupes, si alguien se entera diré que fue una orden mía. O ¿Piensas en desobedecer la orden de un príncipe?" dijo con un tono juguetón.

Llegado hasta este extremo, ella decidió darse por vencida.

"No, no lo haría Su Alteza." dijo ella mientras tomaba asiento elegantemente.

"Jaja me alegra que hallas aceptado. Existe un dicho, se dice que toda la comida sabe más deliciosa si se come acompañado."

Evan se levantó y se dirigió al carrito que había traído Martha.

De ahí sacó otro plato que estaba en la parte de abajo y sacó unos cubiertos.

Las coloco enfrente de Martha.

Abrió la olla donde venía la sopa y sirvió un poco en el plato vacío.

Toda esta escena deja sin palabras a Martha.

La personalidad de este príncipe era diferente al de las personas que eran nobles o personas influyentes.

Es normal que existan casos donde los nobles abusen de sus ayudantes. Tienen el poder y la fuerza para ser arrogantes.

La actitud de estas personas hacia las personas comunes era lo mismo que a ver unas simples hormigas.

Pero la actitud de este príncipe era diferente, es como si viese como su igual a una simple sirvienta.

Ese echo desconcertó a Martha.

No puedo evitar sentir que no estaba comiendo con un príncipe, si no con una persona ordinaria.

Fue debido a eso que se relajó un poco.

Por su parte, Evan había pensado en aprovechar esta oportunidad y poder conseguir más información a través de Martha.

Pero por otra parte quiso invitarla porque ella es la primera persona a la que conoce. Por su amabilidad y actitud sencilla, Evan empezó a tener una buena impresión de ella y tenerle algo de confianza.

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