23 Capítulo 23: Fu Jiu coquetea con Qin Mo

Translator: Nyoi-Bo Studio Editor: Nyoi-Bo Studio

Qin Mo entrecerró sus ojos, se apoyó con un brazo en la mesa y miró la pantalla del computador. Sus ojos eran oscuros.

En el momento en el que él iba a hacer algo, ¡un mensaje apareció en la lista de amigos de la ventana de chat!

Espada Z: —Todopoderoso Qin, gastas tanta energía buscándome, ¿acaso estas enamorado en secreto de mí?

Luego de ver esas palabras, la temperatura alrededor de Qin Mo bajo al punto de congelamiento.

COCO y Fatty, quienes estaban a su lado, ambos quedaron boquiabiertos.

¡Como…! ¡Cómo se atrevía a hablarle así!

¿Coqueteando con el Capitán?

¿De verdad está cortejando a la muerte?

¡¿Pero se morían por ver que sucedería después!?

COCO mordió la oreja del conejo con firmeza por la emoción.

La voz de Qin Mo se enfrió y cada palabra se sentía como una plancha al hueso.

—Todos ustedes, dense la vuelta.

Swoosh!

Esta vez, fatty reaccionó más rápido y se dio vuelta al instante. ¡Él tenía tanto miedo que el CEO Qin se diera cuenta de que estaba mirando la pantalla!

¡Ese… Espada Z… Es demasiado asombroso!

No sus habilidades como hacker, ¡sino que para coquetear así con el CEO!

Incluso aunque ellos sabían que no era el momento de molestar al CEO Qin, ¡ellos morían por saber qué diría Espada Z ahora!

Fu Jiu aún tipeaba con su piruleta en su boca. Su sonrisa se mostraba por toda su cara, y sus largos y hermosos dedos cruzaban a través del teclado, tipeando con los clics que hacía el teclado.

— No soy fan de este tipo de cortejo, pero si tu insistes, trata de seducirme tu mismo, tal vez diré que sí en un impulso, ¡quien sabe!

Mirando esas palabras, las manos de Qin Mo se tensaron ante de relajarse. Finalmente, acercó el teclado y, firmemente, tipeó una palabra a la vez. Sus ojos eran tan fríos que podrían matar de frío a alguien.

—No importa quién seas, mejor empieza a rezar ahora. No me dejes encontrarte.

Fu Jiu miro el cuadro de diálogo y no respondió. Enrosco sus labios con pereza, estiró su espalda y se desconectó. Estaba de buen humor

Por el lado de Qin Mo, la temperatura de la habitación nunca subiría de nuevo.

En la cima del edificio más lujoso en la ciudad de Jing, la piscina en el techo brillaba pálidamente.

Nadie en el equipo se atrevía a mirar la hermosa cara del CEO.

COCO y Fatty no podían resistirse, incluso con la amenaza de muerte, miraron escondidos la línea de palabras dejada en la pantalla y, por supuesto, se sorprendieron con ella.

¿!Se… Seducir?!

¿! ¡¿Pidiéndole al CEO que lo sedujera… Con su cuerpo?!

¡Bang!

¡COCO aflojó el agarre de su conejo y lo dejó caer!

Fatty frotó su cara con ganas. Después de todo, ¡la conservación era demasiado picante para sus ojos!

COCO y Fatty se miraron el uno al otro.

Estaban pensando que, si llegaba el día en el que el CEO (Capitán) sedujera a alguien por iniciativa propia, ¡ambos alzarían sus manos en apoyo y mirarían la escena!

La expresión de Qin Mo se volvió fría. De repente, miro hacia allá y, con un tono frío, dijo: —¿Ustedes dos se ven felices?

—¡No, no! De ninguna manera.

COCO y Fatty lo negaron al mismo tiempo.

—Este Espada Z es repugnante, debemos deshacernos de él!

Solo para poder ver más cosas asombrosas, ¡debían encontrarlo!

Qin Mo sonrió, pero no había calidez en sus ojos.

—Ustedes dos serían más convincentes si se pudieran deshacer de las sonrisas en su caras mientras dicen eso.

Luego, le dijo a la secretaria que estaba parada atrás de él: —Comunica mis órdenes: ¡COCO y Fatty tienen prohibido comer carne por un mes!

—Si, CEO.

La secretaria era profesional y rápida, tomando nota de todo

COCO y Fatty se miraron el uno al otro otra vez

—CEO Qin!

—¡Capitán!

—¡No puede hacernos esto!

Ambos se desplomaron contra la pared mientras miraban su espalda desvanecerse en el corredor distante. ¡Estaban demasiado tristes como para llorar!

¡¡¡Cómo podían vivir una vida sin carne!!!

En este día, aun estando en cama, quedaba una fría y borrosa luz en los poderosos ojos del CEO Qin

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